Abrazar la sombra
por WebMaster em STUM WORLDAtualizado em 31/10/2013 10:00:07
por Maria Silvia Orlovas - [email protected]
Traducción de Teresa - [email protected]
Algunos temas como abrazar a sombra, han sido banalizados en los últimos años. Todo el mundo habla de abrazar la sombra, de trabajar el perdón, de romper el ego, de cuidar el niño interior, como si todo eso fuese muy fácil.
En el ámbito de las terapias alternativas entonces, las recetas para el éxito proliferan por todas partes, algunas ofreciendo posibilidades reales y claves importantes; otras, en cambio, caen en lo obvio, en la repetición de pensamientos e ideas aprendidas en cursos, pero sin la vivencia práctica del contenido; lo cual no ayuda en nada, o incluso dificulta, porque a fuerza de "entenderlo" así, la gente va creando un cascarón racional, explicando todo con respuestas bien fundamentadas, pero poco profundas.
Por cierto, considero que el mundo está sufriendo por culpa de la poca profundidad de las personas que quieren rapidez en todo. El amor tiene que funcionar rápidamente y, para que salga bien, se pasan por alto importantes etapas de la relación, como si no tuviesen importancia. En la escuela los niños van siguiendo diariamente un millón de clases y cursos, a menudo con la intención de llenar el tiempo, ya que sus padres están trabajando durante períodos cada vez más largos, ganando más, produciendo, comprando, gastando.
Me parece que muchos de los que estáis leyendo este artículo estáis de acuerdo conmigo: la locura de este mundo se hace cada vez mayor y mucha de esa prisa y superficialidad que nos afecta en todos los sentidos se debe precisamente a la falta de compromiso con el sentido mayor de la vida. Es decir, pocos se fijan en la esencia de las cosas; las gentes, en lugar de buscar la profundización, quieren solamente llenar el vacío cada vez mayor.
Y ¿no será esa nuestra sombra?
Vivimos hacia fuera, buscando en el mundo, en las relaciones con los demás, ocupar aquello que está a oscuras dentro de nosotros. Y cuando logramos avanzar un paso, pensando en algo que resuelva y nos ayude a mejorar, a encontrar más paz o más felicidad, no tenemos tiempo. ¿O será por miedo?
Estar aprisionados también es sombra, y no es teoría. Cuántas veces desearíamos andar, empezar aquellas clases de gimnasia, o aquel régimen, o incluso hacer la práctica diaria de la meditación que sabemos nos haría bien, y no somos capaces porque no tenemos tiempo o no conseguimos organizarnos. ¿No es eso una prisión?
Sí, la prisión de la falta de tiempo, de energía, de voluntad, que está siendo drenada para las mil ocupaciones que hemos creado o aceptado para nuestra vida.
Internet entonces, es otra sombra cuando es mal usada, pues basta que empecemos a consultar algo, y una noticia sigue a la otra y cuando nos damos cuenta hemos perdido un tiempo enorme con nada. Y no hay cosa peor que perder el tiempo, viviendo en una sociedad en que, todos los días, tenemos millones de compromisos, todos importantes.
Claro que existen sombras reales, casos de terapia, tales como miedo, neurosis, falta de la capacidad de comprensión que origina falta de amor. Muchas personas están enfermas, aunque sólo ven la enfermedad y la incapacidad ajenas. Por cierto, eso también es un ataque de las sombras. Cuando perdemos la noción de la realidad humana, que es tener imperfecciones, errores, y aun así amar, perdemos la luz y nos hundimos en las sombras. Entonces, cabe una vez más la pregunta: ¿qué significa realmente abrazar la sombra?
¿Llorar en la terapia descubriendo que "nunca" fuimos amados por nuestra madre, y continuamos nuestra vida sin saber amar a nadie, hasta nuestra edad actual? ¿O será descubrir, en un verdadero momento de inspiración, que hemos vivido abrazando la sombra sin entrar en nosotros mismos, desconociendo nuestra luz, nuestra capacidad de comprender al otro, y reprochar menos a aquellos que tenemos a nuestro alrededor, e incluso de perdonar a nuestra madre?
¿Qué será la bandida sombra?
Desgraciadamente, amigo lector, no tengo respuestas concluyentes, incluso porque la sombra se mueve, toma otras formas, asume en su oscuridad la condición de desmontar incluso un razonamiento lúcido.
Lo que sé, es que claro y oscuro forman parte de este mundo, y que todos tenemos sombra, pero que si cada uno invierte en amar más, en abrirse para intentar comprender el mundo del otro, perdonar los fallos visibles e invisibles que tanto nos perturban, la sombra va perdiendo la capacidad de asustar y pasa a ser únicamente otro importante complemento más en la andadura. Porque no hay persona en este mundo que soporte únicamente la luz. Y si no hay sombra para hacer pensar y tratar de comprender el por qué de las cosas e impulsar los cambios, ¿qué sería de nosotros?
Si empleamos todo aquello que nos causa desazón e incomprensión a favor del crecimiento, madurando nuestras cuestiones, estoy segura de que ese tenebroso abrazo de nuestras incapacidades, miedos y neurosis, se convertirá en una gran oportunidad de amar, a nosotros mismos y al mundo.
¡Mucho ánimo luminoso para ti y respeto al aprendizaje de la sombra!
