Autodefensa Energética y Espiritua
por WebMaster em STUM WORLDAtualizado em 26/05/2014 09:22:58
por Nadya Prem - [email protected]
Traducción de Teresa - [email protected]
Nosotros somos unos seres que estamos interactuando todo el tiempo con las dimensiones sutiles energética y espiritual. Tenemos que tomar conciencia de que nuestra salud está condicionada a nuestra buena convivencia con los elementos que constituyen las dimensiones sutiles.
Podemos decir que, así como en nuestra vida terrena procuramos atender a los cuidados personales para con la salud, también en las dimensiones sutiles ese cuidado es fundamental y ha de ser redoblado.
La dimensión energética queda mejor expresada si la llamamos dimensión bioplasmática.
Nuestro cuerpo bioplasmático es el cuerpo que conecta el espíritu con la materia y por tanto también puede ser denominado cuerpo vital.
Estamos todos inmersos en el mundo energético y sufrimos las influencias de energías ajenas, a las cuales podemos o no vincularnos. Según sea nuestra sintonía, así nos veremos afectados por la energía que se asemeje a la nuestra.
En el mundo de los espíritus, o sea, en la dimensión astral, interactuamos y respiramos la atmósfera que nos es propia, en el lugar más adecuado a nuestra sintonía, y nuestra vecindad será de espíritus que posean el mismo tono vibratorio.
Tenemos que estar atentos a nuestros pensamientos, sentimientos y actitudes que nos conectan con las energías circundantes.
Nuestra frecuencia vibratoria será el instrumento de defensa que nos hará estar inmunes a las energías negativas provenientes del plano espiritual y energético.
Podemos fortalecernos a través de una serie de prácticas que nos ayuden a establecer la conexión correcta.
Son los mantras, y en este contexto incluimos las oraciones, las prácticas meditativas, el empleo de la fitoenergía de las hierbas, la conexión con las egrégoras energéticas positivas, la acupuntura, masajes, Reiki y otros tratamientos que actúan en el campo vital y astral. Todos son instrumentos que alteran significativamente nuestro patrón energético y nuestra frecuencia vibratoria para mejor.
Claro, hemos de comprender que la autodefensa no es conclusiva únicamente por las prácticas mencionadas. Tales prácticas son como el medicamento que promueve el reequilibrio.
Entretanto, será en la transformación interior donde se producirá el cambio definitivo de la frecuencia vibratoria con que nos identificamos.
Nada mejor que, a las prácticas citadas, acompañar el trabajo terapéutico del autoconocimiento promovido por la psicoterapia transpersonal, lo cual se hará presente como resultado en la vida diaria. En el trabajo, en casa, con la familia, con los amigos…
Se trata entonces de un conjunto de medidas terapéuticas capaces de defendernos de cualquier posible acoso espiritual o ataque energético.
Hoy, como instrumento de autodefensa, vamos a hablar acerca de la Ruda.
Esta planta tiene un alto contenido energético contra las energías deletéreas.
La ruda tiene como principio energético la capacidad de barrer, de disolver los miasmas, las formas-pensamiento, todas las negatividades.
Puedes tener la ruda en un tiesto en tu casa. Puedes también portarla contigo como protección, desechando el ramito al final del día.
También puedes, con un ramo de ruda, hacer un barrido por todo tu cuerpo.
Esto no es superstición, ni tampoco simbología.
Las hierbas traen en su naturaleza una frecuencia vibratoria propia y, como nosotros, poseen un campo vital o energético.