Bullying y Baja autoestima
por WebMaster em STUM WORLDAtualizado em 02/08/2011 12:49:24
por Valéria Centeville - [email protected]
Traducción de Teresa - [email protected]
El bullying es una experiencia extremadamente agresiva para quien la sufre. Es la vivencia del chivo expiatorio. Quien ha pasado por ella puede calcular el sufrimiento que representa. El bullying es la práctica de ser excluido y/o agredido y humillado por un grupo. Puede serlo solo verbalmente o puede incluir también agresiones físicas. Alina (nombre ficticio) llega a la terapia con la queja de que nada sale bien en su vida, no le gusta su apariencia, se considera gorda, fea, no tiene novio y siente como si los demás siempre estuviesen observando sus defectos y burlándose de ella. Cuenta que en la infancia era golpeada por otros críos, que le llamaban gorda, ballena, botijo, etc. En la adolescencia, le parecía que no gustaba a nadie y ella tampoco se gustaba a sí misma.
Pregunté a sus mentores espirituales qué era lo que estaba dando lugar a aquella situación y cómo debía resolverse. A lo largo de las sesiones de terapia los mentores mostraron a Alina vidas pasadas en que sus personajes (Egos de vidas pasadas) también habían sido excluidos, atacados y humillados por grupos.
En una encarnación, fue un judío capturado y asesinado por los nazis. Otra vida pasada mostrada por los mentores reveló que su personaje fue un ladrón que murió apedreado y linchado por la población.
También descubrió una encarnación en que murió quemada en una hoguera, acusada de brujería. La gente la miraba y clamaban por su muerte, al creer que ella tenía pactos con el demonio.
En una vivencia anterior, fue recogida y recluida en un sanatorio porque hablaba con espíritus que solo ella veía. Fue considerada loca y murió en un manicomio, sometida a maltratos de todo tipo.
Los mentores también mostraron encarnaciones en que Alina había sido el “verdugo”, o sea, había excluido y humillado a otras personas. Tras la desencarnación, su espíritu pasó por el umbral y se sintió culpable, lo cual acabó por generar encarnaciones posteriores en las cuales sufrió bullying.
El espíritu de Alina fue desligado emocionalmente de todas las vidas pasadas de exclusión. También se perdonó a sí misma y a aquellos que la hicieron sufrir.
Su niño interior que estaba muy herido fue cuidado, recibiendo amor y cariño. Su autoestima mejoró en la medida en que empezó a valorar sus cualidades y a cuidarse más.
Los mentores dijeron que ella no volvería a sufrir bullying, pues ya no estaba en contra de sí misma, ni temerosa de las otras personas. Una nueva fase de paz y amor había comenzado. Y así su tratamiento emocional y espiritual se dio por terminado. Alina parecía una nueva persona: más bonita, confiada y feliz.
Valéria Centeville – Psicóloga y Terapeuta de Vidas Pasadas.
