Cómo Eliminar las Energías Negativas de tu Cuerpo
por WebMaster em STUM WORLDAtualizado em 16/10/2016 10:33:18
AutorA Paula Teshima
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Traducción de Teresa
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El exceso de informaciones, el estrés diario, las preocupaciones, las exigencias y otras muchas situaciones que hacen al ser humano tener una vida desequilibrada, agitada y caótica, acaban contribuyendo para la acumulación de energías negativas en el propio ser.
Está claro que no es fácil mantener una vida equilibrada en los días actuales. Pese a todo, hay ciertas prácticas que ayudan a eliminar, o al menos minimizar, las consecuencias originadas por la vida moderna.
Tres actitudes que puedes incorporar a tu vida diaria:
1. Meditación - ayuda a tu mente a trabajar de forma correcta. Te hace esta/centrado, presente, consciente, activo, perceptivo y atento a todo cuanto sucede a tu alrededor. Además de mejorar el sueño, la respiración, la concentración, la memoria y la salud en general. Tan sólo 7 minutos diarios ya son suficientes para empezar a transformar tu vida entera. La meditación enfocada en limpiar y energizar los chakras también es muy eficaz para transmutar toda la energía negativa en energía positiva. Esta meditación consiste en mentalizar y activar los colores y las energías de los siete chakras principales. Esto hace que el aura vuelva a estar equilibrada y regenerada.
2. Contacto con la Naturaleza - procura estar siempre presente en la naturaleza, ya sea jugando con tu mascota o escalando una montaña, observando el mar y los animales silvestres. Es muy importante pisar descalzo, al menos durante 20 minutos, la arena de la playa, la tierra del jardín de tu casa, o sentarte en un césped. Esto es muy eficaz para retirar toda la negatividad acumulada en tu cuerpo. Si tienes la oportunidad de hacerlo todos los días, con toda seguridad percibirás un cambio en tu ánimo, en tu energía, y una mayor disposición para hacer cosas.
3. Ejercicios Físicos - desgraciadamente, no hay forma de estar saludable sin ejercitarse constantemente. La actividad física que has elegido ha de ser un hábito normal diario, como el de ducharse diariamente. Para algunos el ejercicio es un reto, una meta que se ha de cumplir, pero para otros es una actividad muy placentera que restaura su energía. Y esto es verdad. Cualquier ejercicio hace que nuestro cuerpo libere ciertas hormonas que nos dan placer, alegría y vitalidad. El ejercicio está directamente relacionado con nuestra disposición física, o sea, es un generador natural de energía. Por eso cuantos más ejercicios practiques, más energía tendrás para tu día a día, y también para hacer más ejercicios. Esto promueve un ciclo de vitalidad. Entonces, cuando estés cansado, ese es el momento exacto en que necesitas ejercitarte. Si practicas algún ejercicio ya te habrás dado cuenta de que al principio se hace difícil, porque no tienes la menor voluntad, no tienes energía, pero tras unos 15 minutos, empiezas a notar el ánimo, el deseo grande de continuar, y a menudo vas más allá de lo que habías programado hacer. Todo eso es energía. Nuestro cuerpo es un gran productor de energía. Para darnos energía no necesitamos exclusivamente los alimentos. Al comprender este proceso, ya nunca querrás dejar para más tarde tus preciosas horas de ejercicios.
Has visto que no es tan difícil incluir esas actividades en tu día a día, aunque vivas en una gran ciudad. Basta emplear tu creatividad e innovar con pequeñas cosas que pueden marcar la diferencia en tu vida.
A lo largo de las décadas, los occidentales hemos perdido el contacto con nuestra propia esencia. Vivimos y nos comportamos de cara al mundo exterior, y no al interior. Esto es la gran fuente de tantas dolencias, infelicidades, frustraciones tristezas. Por tanto, el conocimiento aliado a la práctica, principalmente, de estos tres factores antes mencionados, pueden contribuir para la reducción de las energías corporales negativas. Espero que logres poner estos conocimientos en práctica y llevar una vida más saludable.
Abrazos,
Paula Teshima
