Cómo se alimentan los sentimientos negativos
por WebMaster em STUM WORLDAtualizado em 26/12/2010 20:12:03
por Andre Lima - [email protected]
Traducción de Teresa - [email protected]
Toda emoción negativa desea fortalecerse. Es como si tuviese vida y un tipo de inteligencia propia que busca formas de alimentarse. La emoción se adueña de nosotros en ciertas situaciones, habla a través de nuestra boca y actúa a través de nuestro cuerpo.
Ya escribí otro artículo "Tú no eres tus pensamientos y sentimientos" en el cual pongo que nosotros no somos las emociones que arrastramos, sino la Consciencia que está por detrás de todo, el observador, el testigo. Como si fuese una entidad, la emoción puede poseernos, originando pensamientos y actitudes negativas para que ella pueda alimentarse y perpetuarse.
Obsérvate a ti mismo. Yo me sorprendo irritándome con ciertas cosas, y en el momento en que esto ocurre, es casi irresistible sentir y actuar tal como lo hago. En ese momento, la emoción se ha apoderado de mí, influye sobre mis pensamientos y actos. En el momento en que eso ocurre, las razones exteriores parecen justificar muy bien la forma en cómo yo me siento, hablo y procedo. Es como si yo dijese en ese instante “¡no hay cómo no irritarse con eso, cualquier persona se sentiría así!” Con todo, no es más que la irritación que ya está dentro de mí, manifestándose, hablando por mi boca, que quiere beber más sufrimiento y fortalecerse.
Fíjate en si adviertes, de vez en cuando, un deseo irresistible de protestar, de enojarse con algo, de hablar mal de alguien o del pasado, de recordar alguna situación desagradable. Solo es la emoción, tratando de sobrevivir. La emoción permanece latente, al acecho, esperando una oportunidad para alimentarse. Las situaciones externas y las otras personas son los gatillos que despiertan esa negatividad. Tú estás tranquilo cuando, de pronto, alguien dice o hace cualquier cosa y entonces surge un malestar de forma instantánea. Cuando menos lo esperas, la emoción te domina, varios pensamientos negativos se han originado y quizá ya hayas procedido de una determinada forma.
La emoción podrá influenciarnos ligeramente, originando tan solo algunos pensamientos negativos o algunas palabras, pero puede también llegar a provocar conductas violentas e incluso crímenes. Es el mismo mecanismo en acción, solo que a niveles diferentes.
La intensidad de nuestra reacción dependerá de dos cosas: de la fuerza de la emoción negativa que está guardada en nosotros, y de nuestro grado de identificación con esa emoción. Lo explicaré mejor. Hay personas que son verdaderas bombas de relojería. Tienen guardada una carga emocional tan fuerte (cosas del pasado mal resueltas, resentimientos, enojos, rechazos, etc.,) que ese cuerpo emocional cuando es activado por algún acontecimiento, produce una reacción como una avalancha incontrolable, y se apodera de la persona. Así ésta puede volverse violenta, o puede ponerse triste y llorar desesperadamente. Cuanto mayor sea el contenido emocional, mayores las posibilidades de que nos pille de sorpresa.
El grado de identificación con la emoción es lo cuánto supones que ella forma parte de ti, de tu yo, de tu personalidad. Tú no eres tus pensamientos y sentimientos, pero la mayor parte del tiempo pensamos que lo somos. Entonces, cuando surge la emoción negativa, si tienes una consciencia mayor de que tú no eres aquello y que ella únicamente desea alimentarse, es más fácil solo observar su actitud con calma, hasta que se vaya disolviendo poco a poco. Lo ideal es observar sin resistirse, sin juzgar, sin alimentar, solamente sintiendo la emoción, las reacciones físicas que causa y los pensamientos que provoca. Hemos de estar muy atentos para hacerlo así.
Sin embargo, cuando no tenemos consciencia (y la mayoría de la gente no la tiene) de que la emoción no es quien nosotros somos, vamos a alimentarla cuando ella surja, con pensamientos y acciones. Argumentaremos interiormente que estamos totalmente acertados al sentirnos de aquella forma. Así la emoción negativa cumple su objetivo de alimentarse. Después de un tiempo, ella se acomodará en tu interior y aguardará otra oportunidad para manifestarse.
Observa el siguiente mecanismo: la persona está triste debido al final de una relación y empieza a poner música triste para “roer” y curtir el dolor. Es la propia emoción de la tristeza dirigiendo los actos de esa persona para alimentarse. Ella te hará elegir y poner las canciones más tristes. Y así sientes una extraña mezcla de placer y dolor. ¿Placer para quién? Para la tristeza instalada, el dolor de oír la música triste es placer.
Ese mecanismo ocurre también cuando empezamos a alimentar recuerdos de historias pasadas: disgustos, pérdidas, culpas, frustraciones, etc. Creamos un diálogo mental hablando de un acontecimiento pasado desagradable. Ese diálogo puede ponerse a recordar palabras que se han dicho, cosas que hubieras podido hacer pero no has hecho. Es posible también que ese diálogo tenga un tono de victimismo o agresividad. Pueden también surgir imágenes de lo ocurrido, o de lo que podría haber ocurrido. Algunas personas remuelen compulsivamente historias del pasado.
Cuando aplico la *EFT (técnica para auto-limpieza emocional, véase cómo recibir un manual gratuito al final del artículo) en consultorio, es interesante observar el cambio en el modo de hablar de la persona después de que la emoción negativa ha quedado disuelta con esa técnica. El discurso cambia completamente. Vamos a suponer que la persona viene con mucho enojo contra alguien. Puede llegar diciendo que “él tiene mal carácter, es un canalla, lo hizo a propósito, me dan ganas de golpearle…”. Es el propio enojo hablando por la boca del cliente. Después de algunas rondas, el enojo se disuelve y la persona puede decir cosas tales como: “yo también he procedido mal con él, sé que ese día él estaba muy estresado y yo también, solo podía haber pasado eso…”. En ese momento, ya no está la entidad “enojo” hablando por la persona.
La emoción es “lista”. Si no te mantienes muy atento, se adueñará de ti. A veces puede sorprenderte en un conflicto interior, que hay una parte intentando dejar a la emoción de lado y la otra parte alimentándola. La emoción negativa intentará convencerte a no abandonar aquellos pensamientos. Aplica la EFT en ese momento en que la emoción surge, pues será bastante más fácil disolverla con esta técnica. Pero atención. La emoción no desea ser disuelta. Entonces es muy probable que no tengas ganas de aplicar la EFT. Ahora que ya comprendes el mecanismo, se hace más fácil identificarlo y no ceder. Es importante también limpiar la carga emocional de acontecimientos pasados, desde la infancia hasta los más recientes. Básicamente, ese es el trabajo que hacemos en el consultorio, que aporta beneficios enormes a la persona en todos los campos de su vida: relaciones, autoestima, salud física y área profesional.André Lima – Práctico en EFT, Terapeuta Holístico, Maestro de Reiki e Ingeniero.
EFT – Emotional Freedom Techniques – Es la auto-acupuntura emocional sin agujas. Enseña a desbloquear la energía estancada en los meridianos, de forma fácil, rápida y extremadamente eficaz, proporcionando la curación para cuestiones físicas y emocionales. Tú mismo puedes auto-aplicarte ese método. Para recibir un manual gratuito de esa técnica y comenzar ya a beneficiarte, accede a: link y solicita el manual. Infórmate también sobre cursos, atendimientos terapéuticos on-line y mucho más.