Cultiva la alegría de vivir
por WebMaster em STUM WORLDAtualizado em 08/03/2014 11:28:54
por Vinicius Francis - [email protected]
Traducción de Teresa - [email protected]
Hoy, miércoles de ceniza, mucha gente descansa de las fiestas, en cambio otros han aprovechado los días de carnaval para eso, reposar. Como quiera que hayan sido tus festivos, a partir de este día todo vuelve a lo normal. Para muchos la rutina diaria ya forma parte de su realización. Hay un número considerable de seres humanos viviendo de acuerdo con lo que les gusta. Por otra parte, la gran mayoría aún vive una realidad indeseada, muy diferente a la que le gustaría vivir.
Y yo considero que recomenzar la rutina con algunas palabritas de motivación marca toda la diferencia. Bueno, para eso estamos ahora charlando, porque así como mis amigos no físicos están constantemente ayudándome a mantener el foco en aquello que quiero y que me hace feliz, intento yo, de una forma muy humilde en comparación a lo que ellos hacen por mí, orientarte hacia un rumbo más excelente. Y esa excelencia empieza dentro de nosotros, en la forma en cómo nos sentimos.
Y toda la realidad que posiblemente estés experimentando en este momento, por mucho que no sea como la “soñada”, has de comprender que eso no es más que un punto en tu existencia. Es sólo donde tú estás ahora y lo que importa no es dónde tú estás, sino a dónde quieres llegar. ¡Recuerdo haber leído esto hace años! Cuando yo no era más que un aprendiz de todo eso que hoy enseño. ¡Qué cosas! Así es la vida.
Pasamos de alumnos a profesores. Hoy frente a contrastes y teniendo que lidiar con aspectos indeseables de nuestra realidad, mañana orientando a otros en el proceso suyo.
Cuántas cosas he atravesado, y pensaba: ¡Me reiré de esto un día! Y cuando hablamos así, a menudo parece que ese día nunca va a llegar, puesto que ahora nos encontramos inmersos en un estado de tristeza, ira, preocupación, aflicción; no somos capaces de sentir vibraciones del tipo de “me reiré de esto”. Pero ten la seguridad de que todo pasa. Por muy doloroso y desafiador que sea, va a pasar. Mientras tanto, tu contribución es muy importante e indispensable para que las realidades negativas puedan ser disueltas. Tienes que ponerte en una vibración positiva para que lo negativo se aleje.
Obviamente, también hacen falta actitudes. Las palabras no convencen al Universo, pero él siente perfectamente nuestras actitudes, porque están cargadas de emociones; y el cosmos es sumamente sensible a todo lo que emitimos. ¡Ayer, mientras meditaba, el maestro Jesús vino hasta mí y me dijo cosas que me llenaron de una motivación muy grande! Y pensé: Tengo que dar un poquito de esto a mis lectores.
Mira, si tienes una “pizquita” de fe como un grano de mostaza, serás capaz de mover un monte. Y esa fe está dentro de todos nosotros, basta que la activemos con nuestra fuerza de voluntad y nuestra determinación. Él me ha dejado una frase, que es esta: Al hombre que cree en sí mismo, todo le será posible.
Entonces ¿qué tal cultivar esto en tu corazón hoy? Aliméntate de la certeza que sólo la fe puede darte. Ahora que la vida ha vuelto a lo normal, no dejes que la realidad, con sus opiniones y caretas, ofusque el brillo de tu certeza. Mantén una mirada positiva, una convicción más allá de la materia, tú no necesitas ver para creer, es posible hacer lo contrario, basta quererlo de verdad.
Concédete más sonrisas, buenos pensamientos, entusiásmate con pequeñas cosas. Entrena tu vibración hacia arriba, es fácil, es sencillo y es un ejercicio constante. Observa la naturaleza, cesa un poco en tus cuestionamientos internos e invierte tiempo en ti mismo, positivamente. Lo que no anda bien es posible arreglarlo, pero hace falta paciencia y perseverancia, ¿vale? Nada de desesperación, nada de ansiedad y nada de preocupación más de la cuenta. Volvamos a la rutina normal llevando en nosotros la esencia de la, hasta entonces, “propuesta” del Carnaval, la alegría de vivir. ¡Celebra esto! En ese acto está la conexión con mucho de lo que deseas manifestar.
¡Buen día! ¡Sé Feliz!
Vinícius Francis