Depresión Posparto X Reencarnación
por WebMaster em STUM WORLDAtualizado em 23/03/2015 10:29:05
por Nadya Prem (Nadya Prado) - [email protected]
Traducción de Teresa - [email protected]
Muchas madres experimentan alteraciones de humor y crisis de llanto después del parto, que desaparecen naturalmente, y son debidas a las alteraciones hormonales del embarazo. Sin embargo, algunas notan los síntomas con más intensidad, dando origen a la depresión posparto. La mujer está cada vez más ansiosa, con pensamientos negativos y desagradables. Nuevos estudios indican que la depresión también puede afectar al padre, por tanto no es únicamente una cuestión hormonal.
Factores físicos, emocionales, psicológicos y de vida pueden estar presentes en el desencadenamiento del trastorno, aunque no hay una causa específica. Hay un conjunto que determina la evolución del cuadro de depresión posparto y que debe ser tratado como un todo.
La maternidad, como toda nueva fase de la vida, origina internamente una revolución, principalmente cuando no estamos preparados, o cuando ya tenemos cierta tendencia al control y a valorar el lado negativo de todo. Nuestras creencias, basadas en lo que hemos visto en la vida acerca de la responsabilidad de criar un hijo, y la relación que hemos tenido con nuestros padres, son determinantes en nuestro estado emocional durante ese período.
Otro hecho a considerar es que al comienzo, tras el nacimiento del bebé, los padres se sienten más estresados, duermen menos, se preocupan más. El nuevo miembro de la familia exige una serie de cuidados que toman gran parte del tiempo útil.
Se siente la necesidad de una adaptación al nuevo momento y de adquirir la capacidad de vivir de forma positiva la maternidad.
Si se tienen en cuenta la espiritualidad, las vidas pasadas y el karma, se hace más fácil comprender integralmente el desequilibrio. ¿Cuál es el motivo de que las mujeres en situaciones de vida y psicológicas semejantes, tengan reacciones diferentes después del parto?
En algunos casos, durante el embarazo la mujer ya puede sentir el enfrentamiento energético causado por la aproximación del espíritu que viene a reencarnarse. La relación que hay entre el sistema endocrino, las hormonas y los cuerpos sutiles, explica una serie de síntomas que se verifican en algunas madres.
Antiguamente se decía que si la mujer tenía muchas náuseas eso significaba que el bebé tenía mucho cabello. Supersticiones aparte, las náuseas ocurren debido al rápido aumento de la gonadotrofina, hormona liberada por la placenta. Energéticamente, puede haber una actuación disonante entre madre e hijo que exacerba la sintomatología.
La Medicina Tradicional China considera que al comienzo del embarazo las futuras madres tienen que nutrir el feto y eliminar las toxinas producidas por él; y después del parto, con la sobrecarga, pueden tener su flujo energético deficiente y desequilibrado. El tratamiento se concentra principalmente en cuidar la energía del hígado y de los riñones.
Recibí a una clienta que había tenido cuatro hijos y según me relató, cada gestación tuvo su particularidad. En una, sufrió náuseas durante los nueve meses. Contó que fue muy difícil y durante ese período su humor era pésimo.
En la depresión posparto puede ocurrir lo mismo, la condición materna tras el parto difiere de un hijo para otro y este elemento nos hace pensar que hay algo más, que determina la aparición del trastorno.
Algunas clientas que atendí con depresión posparto tenían también en común la mediumnidad exacerbada tras el embarazo y casos de síndrome de pánico. Las crisis y la depresión estaban en íntima relación con la criatura que dieron a luz.
Es bastante delicado, y con mucho respeto y cariño procuro explicar a la madre los rescates kármicos que se verifican por medio de la maternidad. El ambiente familiar, el vínculo maternal es capaz de convertir los lazos de odio en lazos de amor, rescatando compromisos asumidos en otras vidas. Somos espíritus inmortales y con cada encarnación hay un nuevo comienzo, un reencuentro con aquellos con quienes tengamos algo que aprender o enseñar.
En consultorio puedo percibir energéticamente, en estado alterado de de conciencia, los conflictos espirituales familiares, que se traen de tiempos pasados a la vida actual. En el transcurso de la terapia observamos las desarmonías en las “entrelíneas”.
Pensar que un bebé o un niño es sólo un espíritu infantil, es una equivocación. La infancia es el período en que el espíritu está más vulnerable tanto frente a las energías astrales y etéricas, como a la energía de los padres. En esa fase él está fluídicamente unido a los padres de forma profunda.
Desde el nacimiento el espíritu recibe de los padres los primeros aprendizajes emocionales que habrán de acompañarle durante toda la vida. Así también los padres pueden sentir la energía del bebé que tienen bajo su responsabilidad. Inconsciente del proceso, la madre podrá sentir la angustia que aquel espíritu le emana, porque hay lazos antiguos que los reunieron.
Su alma reconoce aquel ser y se deprime, tiene miedo de no conseguir poner en práctica lo que se propuso en la esfera espiritual, el compromiso de educar y amar a aquel espíritu.
Entonces, si sentimos cierto malestar en nuestra relación con nuestros hijos, algún sentimiento de rechazo o algo parecido, no hay por qué culparse. Tomar conciencia del proceso que nos vincula a los espíritus familiares es el primer paso para transformar el conflicto interno generado por la depresión posparto. Saber que hay una programación de vida que nos pone en convivencia con problemas antiguos que necesitamos resolver. Sentimientos cristalizados en nuestro campo áurico que conscientemente no comprendemos.
Los problemas familiares entre padres e hijos son casi siempre la tónica de las salas terapéuticas. Sentimientos de culpa y abandono. A menudo es inadmisible para un padre tener dificultades para amar a un hijo, aceptar los deslices que ha cometido. La madre que padece una depresión posparto, ya sea por motivos actuales o pasados, tendrá necesidad de entrar en contacto consigo misma, con ese dolor del alma.
Las reencarnaciones tienen mucho sentido y ofrecen la respuesta a los sinsabores que pasamos en la vida para los cuales no encontramos la oportuna “explicación”. A partir de esa comprensión podemos tratar efectivamente cualquier trastorno psicológico que hasta entonces tenía una laguna en su proceso de curación.
A las madres que están pasando por conflictos de esa naturaleza, les recomiendo psicoterapia transpersonal, acupuntura y esencias florales.
Práctica de Visualización para la mamá:
. Pon una música suave y cierra los ojos;
. Entra en contacto con tu ángel de la guarda, o con tu mentor, como quieras;
. Visualiza, siente, percibe su presencia a tu lado, él sabe lo que tú sientes en este momento;
. Pídele que te ayude a plasmar un cordón de luz violeta brillante entre tu hijo y tú;
. Por ese cordón fluye la energía amorosa que os mantiene unidos;
. Da gracias por ese nuevo lazo de amor con que estás siendo bendecida y permite que ese nuevo vínculo sea tu instrumento de comunión con lo Divino.
La depresión posparto no es una debilidad de carácter o una flaqueza, no es motivo de culpa, el tratamiento inmediato puede ayudar a comprender y a tomar el control de los síntomas, mejorando la calidad de ese momento ¡que es único y engrandece!
¡Sé Amor!
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