Día Internacional de la Mujer
por WebMaster em STUM WORLDAtualizado em 06/03/2015 10:38:41
por Gisela Campiglia - [email protected]
Traducción de Teresa - [email protected]
En este artículo especial, en homenaje al Día Internacional de la Mujer, traigo una reflexión sobre el comportamiento de la mujer moderna. Mi objetivo es ayudar a las mujeres para su actuación dentro de la sociedad de hoy, sin que tengan que perder su preciosa feminidad.
Analizando la valoración de lo femenino en la historia de la humanidad, observo que el hombre prehistórico, a pesar de que se le llama primitivo, admiraba la fertilidad femenina, considerando a la mujer un ser sagrado debido a su capacidad de generación. La religión wicca, tenida por pagana y existente aún a día de hoy, confiere a la mujer una posición importantísima, por ser la personificación de la gran madre naturaleza. En el taoísmo, Dios es designado como el Todo, al mismo tiempo yin y yang, destacando la igualdad de importancia y la complementación entre el sexo femenino y el masculino. Religiones politeístas de la antigüedad como las practicadas en el antiguo Egipto, en Grecia y Roma, también incluían a Diosas en su panteón sagrado. Fue con la aparición de las religiones monoteístas, y la calificación de Dios como masculino, cuando la Mujer pasó a ser clasificada como elemento secundario.
La creencia de que la mujer es inferior al hombre está presente en el inconsciente colectivo; de esta forma, sin apercibirse de ello, hay mujeres que buscan su debido reconocimiento intentando ser iguales a los hombres. Una triste confusión, porque lo femenino es complementario a lo masculino y no igual.
Proporcionar explicaciones sobre las diferencias entre los sexos opuestos parece algo innecesario, sin embargo, analizando la práctica conductual femenina en los días de hoy, percibimos que gran parte de las mujeres está luchando contra su sistema hormonal, y actúan de forma masculinizada. El sistema límbico cerebral de la mujer es más desarrollado que el del hombre, y siendo así, ella produce mayor cantidad de oxitocina, también conocida como la hormona del amor. Esa hormona es un mensajero que estimula la producción de la leche materna, también asociada a las emociones y al comportamiento de la mujer. Mientras que la naturaleza masculina está más vinculada al combate, a la objetividad y al poder, la mujer es más compleja, acogedora y amorosa. Siendo una cuidadora en esencia, la mujer tiene facilidad para generar vínculos sociales afectivos. También es portadora de una sensibilidad extraordinaria, conocida como intuición. La naturaleza femenina incluye la habilidad de llevar a cabo varias tareas al mismo tiempo, ella es multidisciplinaria. Como resultante de su característica maternal, que exige la capacidad de escuchar, comprender, acoger y solucionar los problemas de sus hijos, la mujer es una competente comunicadora y mediadora. La pertinente búsqueda por parte de la mujer en lo que se refiere a su valoración debe continuar, si bien su modelo de actuación debe ser estructurado con base en su feminidad.
En el campo profesional, el conjunto de habilidades necesarias para ejercer cargos de liderazgo en las empresas va del encuentro a las capacidades naturales de la mujer. El gran líder de la actualidad escucha, comprende y motiva a sus subordinados, es un cuidador. Necesita llevar a cabo multitud de tareas, y tomar sus decisiones considerando el aspecto racional y el intuitivo. No es copiando el modelo profesional masculino y reprimiendo sus características de hembra de la especie humana como la mujer llegará a triunfar. Al reprimir su propia identidad, la mujer acaba por practicar la violencia contra sí misma.
La solución para la mujer moderna es hacer las paces con lo femenino, asumiendo la Diosa que lleva en sí. Recuperando la valoración de su naturaleza femenina, la mujer puede utilizar sus preciosos atributos en la búsqueda de su realización. La mujer es una mensajera del amor en la Tierra, madre dedicada, generadora de familias, ideas y negocios. Y es con su habilidad femenina como la mujer puede conquistar el espacio que tanto desea.
¡El mundo está necesitado de amor para convertirse en un lugar mejor!
¡Hagamos nuestra parte y conquistemos nuestro espacio sagrado, actuando a través de la Diosa que existe en cada una de nosotros!