Dinero Sí Compra Felicidad.
por WebMaster em STUM WORLDAtualizado em 06/08/2013 14:32:51
por Lis-Andros - [email protected]
Traducción de Teresa - [email protected]
Fue demasiado. Mi esposa contó un chiste en que un líder religioso dijo en la TV: “No os iludáis, el dinero no trae felicidad”, qué risa. Esa es buena. Pura hipocresía, porque ningún líder religioso es pobre. “Ah, ¡es para la obra de Dios!”. Vale, pero aun así esa “necesidad” para la causa de Dios hace de él y de sus fieles personas más felices. Siendo así, nosotros también necesitamos dinero para nuestras necesidades. Sin él todo está peor. El dinero es bueno, el dinero es estupendo, me encanta, me gusta el dinero. Si decimos que el dinero es algo maldito nunca lo tendremos, a fin de cuentas ¿quién es el que quiere tener lo que está maldito? ¡¿Por qué la vida va a proporcionarte dinero si consideras que es una maldición??!??!?
El dinero debería ser considerado cosa de Dios y no del Diablo. Nunca he visto persona con dinero llevar una vida peor que quien no lo tiene. Salvo algunas personas excepcionales como Chico Xavier o Jesús. Yo no soy Chico Xavier ni Jesús (qué pena). Por eso necesito, quiero tener dinero y me gusta tenerlo. Nunca he visto a una persona que tiene coche y chófer, que come en buenos restaurantes, ser más infeliz que la persona que va en el autobús atestado y come de fiambrera todos los días. El dinero te da una vida más confortable y todo lo que atañe al dinero te hace, sí, una persona feliz.
Todo lo que se refiere a la parte material, el dinero te lo puede dar: comida en la mesa, una buena casa, un coche que te lleva a donde te hace falta de la forma más rápida y cómoda, una sirvienta que hace las cosas por ti mientras tú trabajas, y al llegar a casa tienes todo ordenado y limpito, en fin. El dinero te da felicidad material. Lo que él no te da es felicidad emocional, en las relaciones, etc. Filosóficamente o espiritualmente él no puede darte NADA.
Tú no compras amor de verdad, amigos de verdad, momentos especiales con personas que te aman de verdad. Tú puedes tener dinero toda tu vida y tener todo eso: relaciones diversas, durante toda la vida – pero todo será falso, mientras dure tu dinero. Y si él dura toda tu vida y si tú eres feliz así, sin tener esas cosas de verdad y sin conseguir reconocerlo, qué bueno para ti. A mí me dan pena esas personas, pues para mí el dinero no sustituye lo que es real y verdadero y sé reconocer de hecho a las personas que me aprecian por lo que soy y no por lo que tengo.
El dinero no compra aquello que no podemos tener o comprar, que son los sentimientos y el bienquerer de personas a quienes les importamos de verdad. La propaganda está en lo cierto: para todas las otras cosas, existe la tarjeta de crédito – siempre que tú puedas pagar la factura a fin de mes. Y sólo puede ser feliz de verdad en esta vida quien sabe la diferencia entre esas dos cosas: lo que el dinero puede o no comprar.
Ah, y nadie necesita dar dinero en la Iglesia o en los templos para propagar la obra de Dios. Pues tú eres la obra de Dios. Y Dios no ha necesitado gastar un céntimo para crear tu vida y tu alma. Y Dios está contigo todo el tiempo, dentro de ti. Y tú no necesitas ir hasta un edificio hecho por los hombres, dejar allí el 10% de lo que ganas, para ser bendecido. Pues allá donde estés, basta cerrar los ojos, elevar tu pensamiento, y vas a comulgar con tu Dios, que está dentro de ti. Él y tú sois uno solo. Y para ello no necesitas dinero. NUNCA lo vas a necesitar. Y si la obra y la palabra en que crees son sinceras, nunca será necesario dinero para que avancen. El Amor lo hará en tu lugar.