El dolor nos vuelve más alertas
por Izabel Telles em STUM WORLDAtualizado em 13/04/2009 12:04:53
Traducción de Teresa - [email protected]
Todas las mañanas al despertar me gusta mucho meditar. Pero medito de una forma diferente. Tomo el Tarot del Maestro Osho, cierro mis ojos, lo barajo vigorosamente mentalizando qué lámina va a salir para meditar durante todo el día sobre su contenido.
Hoy me ha salido el Sufrimiento. Mirando la carta, ésta revelaba la figura de un monje contraído sobre sí mismo, mirada triste, sentado en un rincón de un lugar oscuro.
Fui a leer lo que Maestro Osho dice de esta imagen. Y él habla de la importancia de tomar conciencia del dolor para poder evolucionar en el camino de nuestra curación.
Reproduzco aquí un fragmento de lo que está escrito en el libro que orienta la interpretación de las láminas:
“El dolor no existe para hacerte infeliz: ¡está ahí para volverte más consciente! Y cuando te vuelves consciente, la infelicidad desaparece.”
En los tiempos en que vivimos no es difícil encontrar personas en estado de sufrimiento: la traición de la persona amada, la pérdida del empleo, la decepción, el distanciamiento de los hijos, los males del cuerpo, las separaciones a que todos estamos expuestos.
Lo he visto todos los días en mi práctica: imágenes de seres contraídos, aislados, presos en jaulas estrechas; corazones traspasados por espadas, por flechas, atados con zarzas o alambres de espino.
Imágenes que la mente humana reproduce de los iconos que ha visto siempre en las iglesias católicas, por ejemplo, donde el sufrimiento se revela en escenas de hombres y mujeres traspasados por espadas, como San Sebastián o el propio Jesucristo, que lleva en la cabeza una corona de espinas: imágenes de dolor y sufrimiento al límite.
Como a nuestra mente le encanta copiar, entiende que esta imagen del colectivo puede bien calificar nuestro sufrimiento personal, y la emplea como indicador de nuestro estado de espíritu.
Maestro Osho nos enseña que no tenemos que negar estas imágenes, ni despreciar su significado. Debemos utilizarlas para meditar sobre lo que nos ha llevado a atraer aquel o aquellos sufrimientos, ya que somos totalmente responsables por todo lo que nos ocurre.
Y, para terminar, el Maestro nos envía este pensamiento valioso: “Tiempos de gran sufrimiento traen en sí, potencialmente, tiempos de gran transformación. Para que la transformación se produzca, no obstante, es preciso ir hasta las hondas raíces de nuestro dolor, vivenciándolo exactamente tal como es, sin culpa y sin auto-piedad.
¡Que te vaya bien! Y recibe la luz de la primavera que vibra en Portugal.