En fin, otro año nuevo que se acerca
por Rosemeire Zago em STUM WORLDAtualizado em 08/04/2020 11:35:05
Traducción de Teresa - [email protected]
La Navidad ya se fue, mucha correría, comida, alegría, regalos, niños felices por la llegada de Papá Noel; ahora, maletas hechas, viajes y unos días para descansar y reponer las energías. Dentro de algunos días empieza el conteo regresivo para la llegada del año nuevo. ¡Y siempre que algo nuevo llega, trae la esperanza de que sea mucho, mucho mejor! ¡Así lo deseamos! ¡Y así será!
Muchos pasaron la Navidad con la familia o entre amigos, pero muchos también la han pasado solos, por opción o por su propia condición; otros están enfrentando momentos difíciles, ya sea por una separación reciente, por dificultades financieras, o bien enfrentando el dolor de una pérdida o tienen personas queridas en un lecho de hospital. Sabemos que en esta época del año nos hacemos más sensibles y todo lo que nos ocurre parece dejarnos las emociones a flor de piel, sentimos todo con más intensidad y el dolor parece doler todavía más. Ante la saudade, la tristeza, la soledad, ¿cómo esperar que el próximo año sea mejor?
¿No podríamos detenernos y buscar la lección que todas las situaciones difíciles nos han traído? Cuando un año termina tendemos a censurarnos por todo aquello que no hicimos, que no conseguimos, por las actitudes que no tomamos, las situaciones que no resolvimos, nos criticamos y nos culpamos, pero esta vez hazlo diferente. No seas tu mayor enemigo. La vida a menudo se muestra tan difícil que tendemos siempre a mirar solamente la parte vacía del vaso, o sea, las dificultades. Cuando sufrimos por algo o por alguien no conseguimos siquiera razonar, la emoción se sobrepone a la razón y sufrimos más y más. Pero tú puedes elegir entre continuar sufriendo o buscar alguna enseñanza. ¿Qué camino prefieres? ¿Quieres empezar el próximo año creyendo que todo va a seguir igual, sufriendo, llorando, o creer que será verdaderamente un nuevo año mucho mejor?
En este momento, ruego que te pares unos minutos y reflexiones sobre ese año que está terminando. lo sé, no tienes tiempo, lo comprendo. Pero en algún momento párate y escribe todo aquello que ha pasado, y la consiguiente enseñanza. Por más difícil que sea una situación, siempre deja un aprendizaje. Pregúntate a ti mismo qué es lo que tal situación está tratando de enseñarte, cuál es el mensaje que te trae. Estoy seguro de que si insistes en la pregunta lograrás obtener la respuesta. Y esto te aliviará mucho, pues siempre que comprendemos el posible motivo de haber pasado por alguna situación, logramos tranquilizar nuestro corazón ¡y alcanzar la tan deseada paz!
Procura percibir cuán fuerte has sido para enfrentar lo que ocurrió y cuánto más fuerte aún te has hecho con todo eso. Quizá un poco lastimado, de acuerdo, pero solo el hecho de que estés aquí en condiciones de leer este artículo, con salud física y mental, ¿no es ya motivo suficiente para demostrarte que eres capaz de superar lo que sea? Aunque tengas que mirar hacia los lados y (re)comenzar a recoger todos los trozos que quedaron, aún así podrás tornarte entero nuevamente, y cuántas veces sea preciso. ¡Recuerda siempre que todos nosotros somos capaces, incluso tú! Reconoce cada logro que has tenido a lo largo del año ¡y agradécelo!!! ¡Ejercita sobre todo la gratitud! Principalmente en momentos muy difíciles, busca la enseñanza. En todo podemos aprender, y cuando aprendemos podemos agradecer, y con ello, crecer y evolucionar. Considero que ese es nuestro objetivo mayor: ¡la evolución! Y solo evolucionamos con auto-conocimiento, mirando hacia dentro y siendo capaces de identificar cada sentimiento originado por las situaciones que hemos enfrentado y superado. Sí, mirar hacia dentro requiere coraje para enfrentar el dolor, pero has de saber que si no miras va a doler de la misma forma, o quién sabe, incluso más, porque estarás ignorando algo que quiere salir. ¿Quieres llorar? ¡Llora! Pero todo tiene un límite y ahora tienes que percibir el momento de parar y reaccionar. ¿Qué tal decidir que ese momento sea ahora?
No siempre tenemos el control de todo, frente a muchas situaciones somos impotentes, y también podemos aprender con eso. Mientras estamos en el papel de víctimas, buscando culpa, sea en el otro o en nosotros mismos, no lograremos cambiar nada. Cuando dejamos de enfocar la persona más importante nos perdemos, no del otro, sino de nosotros mismos. Y ¿quién es la persona más especial e importante en tu vida? Espero que tu respuesta sea única: ¡TÚ!!!
¡Deseo que cambies aquello que depende tan solo de ti, no te permitas seguir sufriendo, y haz que tu año nuevo sea verdaderamente diferente! ¡Sé feliz!
"Canción del Tercer Milenio" interpretada por Leonardo: