¿Felicidad?
por Elisabeth Cavalcante em STUM WORLDAtualizado em 05/10/2006 12:53:14
Traducción de Teresa - [email protected]
Todo ser humano anhela la felicidad. Esta es una verdad incuestionable. Sin embargo, el concepto de felicidad puede ser diferente para cada uno de nosotros. Para algunos, la felicidad se resume apenas en tener dinero y seguridad material. Para otros, la felicidad se resume en la realización afectiva, y sin eso, aquélla se hace imposible.
Otros, todavía, identifican a la felicidad como siendo un estado de bienestar físico y emocional. Es obvio que la salud física es un requisito importante para la sensación de bienestar que solemos llamar felicidad.
Curiosamente, empero, encontramos a personas que, aun teniendo problemas de salud o deficiencias en su cuerpo físico, son capaces de arrancar a la vida motivos para sentirse felices. Y están aquellas que, aun viviendo entre dificultades económicas son capaces de extraer, de cosas sencillas, motivos para sentir alegría.
No cabe duda de que algunas personas tienen una vida extremadamente difícil, y para ellas el alcanzar la felicidad es un gran desafío. No obstante, si encaramos nuestra vida como un conjunto de acontecimientos que han sido generados por nuestras propias actitudes, en esta o en otras vidas, podremos abandonar la postura de víctimas del destino y hacer frente con realismo al papel que nos corresponde, para alcanzar el estado de felicidad que tanto anhelamos.
“CREATIVIDAD
El camino de la felicidad
…Sé feliz, respeta la felicidad, y ayuda a las personas a entender que la felicidad es la meta de la vida Satchitanand; los místicos orientales dicen que Dios tiene estas tres cualidades: Él es sat; Él es verdadero, existencial. Él es chit: consciencia, percepción. Y, finalmente, el pico más alto, es anand: felicidad. Donde hay felicidad, hay Dios.
Siempre que veas a una persona plena de felicidad, respétala, ella es sagrada. Y siempre que encuentres a un grupo que se siente feliz y festivo, mira a ese lugar como sagrado.
Tenemos que aprender un lenguaje totalmente nuevo, sólo así esta vieja y pobre humanidad puede ser modificada. Tenemos que aprender el lenguaje de la salud, de la totalidad, de la felicidad. Será difícil, porque son grandes nuestras inversiones. Por eso es tan difícil ser feliz y tan fácil ser miserable.
…La felicidad necesita de talento, genio y creatividad. Sólo las personas creativas pueden ser felices. Que esto penetre profundamente en tu corazón: sólo las personas creativas son felices. La felicidad es un subproducto de la creatividad. Crea alguna cosa y serás feliz. Crea un jardín, hazlo florecer, y alguna cosa florecerá en ti.
Crea una pintura, y conforme ella se vaya desarrollando, algo empezará a desarrollarse en ti. Cuando acabes la pintura, cuando le des los últimos retoques, verás que ya no eres la misma persona. Estás dando los últimos retoques a una cosa que es muy nueva en ti mismo.
Escribe un poema, canta una canción, baila con una música y observa: comienzas a sentirte feliz… Dios solamente te ha dado esta oportunidad para ser creativo: la vida es la oportunidad para ser creativo. Siendo creativo, serás feliz.
…Hace falta inteligencia para ser feliz, y a las personas se les enseña a no ser inteligentes. La sociedad no quiere que la inteligencia florezca. La sociedad no necesita de la inteligencia; en realidad, siente miedo de ella. La sociedad necesita de personas estúpidas. ¿Por qué? Porque los estúpidos son Sannvas manipulables.
Las personas inteligentes no son necesariamente obedientes – pueden obedecer, pueden no obedecer. Pero la persona estúpida no desobedece; está siempre pronta a ser comandada. La persona estúpida necesita de alguien que la comande, porque no tiene inteligencia para vivir por sí misma. Quiere a alguien que la dirija; busca sus propios tiranos.
...La persona inteligente es rebelde: inteligencia es rebeldía. La persona inteligente decide por sí misma si dice que sí o que no. La persona inteligente no puede ser tradicional; no permanece adorando el pasado, no hay en el pasado nada que venerar.
La persona inteligente desea crear un futuro, y quiere vivir en el presente. Vivir en el presente es su manera de crear el futuro. La persona inteligente no se ata al pasado muerto, no arrastra cadáveres. Por más bellos que puedan ser, por más preciosos, ella no arrastra cadáveres. Pone fin al pasado; él se ha ido para siempre.
…El hombre sólo puede ser feliz si es inteligente, totalmente inteligente. La meditación es un truco para liberar la inteligencia. Cuanto más meditativo te vuelvas, más inteligente serás.
Pero recuerda, inteligencia no quiere decir intelectualidad. La intelectualidad forma parte de la estupidez. La inteligencia es un fenómeno totalmente diferente, no tiene nada que ver con la cabeza. La inteligencia es algo que proviene de tu propio centro.
Ella crece en ti y, con ella, muchas otras cosas comienzan a crecer. Te tornas feliz, te tornas creativo, te tornas rebelde, te tornas aventurero, empiezas a apreciar la inseguridad, empiezas a moverte hacia lo desconocido. Empiezas a vivir peligrosamente, porque esa es la única manera de vivir.
…Solamente andando por lo desconocido creas el camino. El camino ya está ahí; caminando, tú lo creas. Para las personas estúpidas existen grandes autovías por las cuales se mueve la masa: Desde hace siglos y siglos esas personas se han estado moviendo y no van a lugar alguno, andan en círculos. Pero tienen el consuelo de estar con mucha gente, de no estar solos.
La inteligencia te da coraje para estar solo, la inteligencia te da la visión para ser creativo. Una gran urgencia, un gran apetito por la creatividad surge en ti. Y sólo entonces, como consecuencia, tú puedes ser feliz, puedes estar pleno de gracia.”
OSHO, de la serie “El libro de la sabiduría II
