Las 70 palabras mágicas que comienzan con P - Parte 6
por Izabel Telles em STUM WORLDAtualizado em 10/01/2005 19:02:17
Traducido por Melissa Park - [email protected]
Hoy, para usted, el Perdón.
Como es difícil, muchas veces, perdonar!
Mas, por todo lo que sé (y mire que nada sé) el perdón es el sentimiento más poderoso, después del amor, para suministrar curas (es que el amor nace después que el perdón limpió todo el terreno intoxicado de la mente).
Cuesta mucho cuando fuimos lastimados... dar la otra mejilla!
Recuerdo siempre aquella frase de Jesús Cristo en su dolor físico supremo cuando Él mira para el Cielo y dice “Padre, perdonad a estos seres, ellos no saben lo que hacen”!
Para mí, El Gran Maestro estaba queriendo darnos una más de sus geniales lecciones. Porque es así: cuando yo descargo sobre el otro mi odio, mis frustraciones y mi rabia, en forma de agresiones físicas o psicológicas, esa misma fuerza va a regresar para mí en forma de enfermedad física o bloqueando los caminos de mi vida. Y era eso lo que el Gran Maestro recordaba al Padre como quién dice, “Ya sufro por ver cuanto ellos van a sufrir“.
El año pasado asistí en Lisboa al film de Mel Gibson, Pasión de Cristo. Recuerdo que al salir del cine tenía anotado algo en mi agenda. Esta mañana fui tras de la tal agenda y encontré esta anotación del día 15 de noviembre del 2004, un lunes:
“A través del film Pasión de Cristo podemos ver como hemos tratado a nuestros hermanos, a nuestra tierra, a nuestros corazones, a nuestros amigos y especialmente como hemos maltratado aquello que aún no entendemos”.
En la página siguiente de la agenda encuentro un pedazo de texto que debo haber escrito algunas horas después dentro del metro o sentada en la mesa de algún café:
“Al asistir al film usted va a avergonzarse del mal que su parte humana es capaz de provocar. Más se va a enorgullecer de la capacidad que su parte Crística tiene de perdonar. Felicitaciones, Mel Gibson por haber colocado luz sobre este tema con su film Pasión de Cristo”!
Como estamos iniciando un nuevo año, propongo a usted un ejercicio para el perdón. Va a practicarlo durante 21 días, siempre que no esté haciendo otro. Si estuviera, espere acabar la serie y después comience este del perdón.
Al despertar todos los días, se sentará en una mesa donde tenga bastante papel en blanco y bolígrafos.
Va a iniciar cerrando los ojos y preguntándose:
- Que es lo que yo tengo que perdonar?
Entonces inicie escribiendo en el papel:
Fulano (fulana) yo te perdono y te libero
(su nombre) yo te perdono y te libero
... del sentimiento (nómbrelo) que siento al respecto porque usted hizo eso... y va escribiendo todo lo que le viene a la cabeza al respecto de las acciones, pensamientos y hechos que generaron el sentimiento que precisa ser perdonado.
Escriba hasta que agote el asunto.
Rasgue entonces los papeles escritos, préndales fuego y entierre las cenizas en una maceta o en el jardín. O, si lo prefiere sople al viento.
Al día siguiente repita el mismo ejercicio iniciando de la misma forma y escribiendo cosas nuevas que le vengan a la cabeza sobre el sentimiento o la persona que precisa ser perdonada. Al final rasgue el papel, prenda fuego y entierre las cenizas o sople al viento.
Así por delante, todas las mañanas, por 21 días.
Quien me enseñó este ejercicio fue una poderosa Xamã brasilera llamada Gláucia a quien yo reverencio y honro eternamente.
A partir del 1º de Enero del 2005 me encuentro en Lisboa, para una temporada de dos meses, donde inicio mis atenciones, conferencias y lanzo mi tercer libro: El libro de las Transformaciones (O Livro das Transformações). Todas las informaciones sobre mi trabajo en Lisboa podrán ser obtenidas con la Sra. Aurora Rich, en el e-mail: [email protected] Están todos invitados! La presencia de los amigos siempre nos da coraje para dejar nuestra casa! Aún que estoy en otra patria que por acaso tiene un nombre que también comienza con P: Portugal! Aparezcan!
