¡Madre e Hija! El Reencuentro para el Perdón
por WebMaster em STUM WORLDAtualizado em 26/01/2017 10:46:38
Autor Wilson Francisco - [email protected]
Traducción de Teresa
[email protected]
Laura es una niña de ocho años, vive en una ciudad del estado de Río de Janeiro y estudia en un Colegio Especial. Su diagnóstico, Autismo. En el aula, tiene el apoyo de una profesora especializada, que la atiende a ella y a otro chico, mientras que la profesora instruye a todos los demás alumnos.
Yo me ofrecí para dar apoyo a María Helena, amiga y cliente. Ella me cuenta sobre su trabajo.
Mira, Wilson, tanto yo como la profesora, notamos que hay una interferencia espiritual en esa niña. Su nombre es Laura, es hiperactiva y no tiene buena relación con la madre, a causa del rechazo de ésta. Ella tiene ocho años. Otro particular es que está siempre diciendo a sus compañeritos que “la muerte los va a pillar, que la muerte los va a visitar”. Si puedes echarme una manita, te lo agradezco.
En principio, di las instrucciones que intuía para el caso, y recurrí al apoyo de Marlene, de aquí de SP, que tiene un hijo autista de 19 años y es médium kardecista. A los pocos días, Marlene envió este mensaje por e-mail: “En otra vida, la pequeña era madre de una pareja de niños pequeños, salían de un supermercado cuando un mendigo bajaba por la calle. La vi pedir a los críos que se escondiesen y ella fue hacia el mendigo, le tiró alcohol encima y prendió fuego a su cuerpo; pidieron el socorro de otras personas, pero vi que su rostro no se quemó, aunque el cuerpo, manos, piernas fueron totalmente consumidos por el fuego. Esta madre desencarnó. El mendigo tenía problemas mentales. En esta vida, el mendigo vino como la madre y la madre que había sido quemada vino como hija, si bien con un profundo resentimiento y gran rencor guardados en su alma”.
Siempre que recibo cualquier información, tanto de personas como de Espíritus, procuro “sentir” en mi alma la frecuencia vibracional del mensaje. Carlos Castañeda, en el libro El Arte de Soñar, dice “observa si en el camino hay corazón”. Entonces, sigue. Solicité, entonces, a Marcia, amiga sensitiva, más ligada a la Umbanda y ella respondió diciendo: “Madre e hija están asociadas desde hace mucho tiempo, ahora unidas por los lazos de la maternidad. Sí, madre e hija están muy enredadas por sombras que las acosan constantemente. La atmósfera de la niña es nebulosa”.
Observad qué interesante, las dos, Marlene en SP, Marcia en RJ, no se conocen y ambas tuvieron percepciones que se completan. La primera “vio” la historia de las dos, en una vida pasada. Marcia ve a madre e hija enredadas en un proceso de obsesión. ¿Quién causa la obsesión? Ellas mismas, inducidas por disgustos de la vida anterior. Y la nebulosidad observada por la sensitiva es el sentimiento de venganza que aflora del inconsciente hacia el consciente de la niña.
Caio, hijo de una cliente, al enterarse del caso y sin estar familiarizado con el asunto, hizo una pregunta que entiendo justa: “No me conformo con el permiso que tuvo Laura/Espíritu para esa nueva reencarnación.
Entiendo que Laura debería tener más tiempo en el Plano Espiritual para perdonar… ¡Y no nacer con esos sentimientos aflorados!”.
Sí, Caio, comprendo tu opinión. Ocurre que esa cuestión de “tiempo de morir”, “tiempo de nacer”, pertenece a Dios, la Inteligencia Suprema, Causa Primaria de todas las Cosas. Un día, quiero tener una entrevista con Él, para que me explique, punto por punto, todo eso. Una cosa te digo, si dos Espíritus se odian y permanecen en el Mundo Paralelo en ese estado, la alienación de ambos puede facilitar la acción de Espíritus Vampiros, que se aprovechan de aquella “materia prima”, el sentimiento de odio, para disfrutar y subyugarlos.
Por eso se sugiere que ablandemos nuestro corazón, deshaciendo iras, venganzas, que pueden someternos a las acciones del Mal. Si tú perdonas, o al menos no odias, quedas en la energía del Bien. Y hay más, amigo mío, a veces el renacimiento es una oportunidad para que tú, oculto en otro cuerpo, puedas buscar el perdón de aquel a quien has hecho daño. Y entiendo que, venir a la Tierra, teniendo a un enemigo vestido de madre, puede ser una Gracia Divina.
Volviendo a lo que fue informado sobre Laura, las sensitivas recomendaron oración, perdón y mucho apoyo, tanto para la niña como para la madre. Naturalmente, nada de esto se ha revelado a ellas. Sin embargo, al cabo de unos días, recibí un agradable recado de María Helena.
Dice: “Vengo a traer noticias de Laura. Ella está más tranquila, más dócil y me abraza a mí y a la profesora Alessia. Otra cosa que quería indicar es que Laura ha dejado de hablar de la muerte con sus compañeros. Su aura está más clara, pues cuando yo la veía su aura estaba negra. ¡Veo avances! Ella llegó con un lazo blanco en los cabellos, toda feliz al mostrarlo. Esto lo cuento porque toda su referencia es masculina, precisamente porque es el padre quien le hace caso, la atiende, la baña, etc. Inclusive la profesora me informó de que el año pasado ella decía a los otros chicos que era un niño y también porque rechazaba el rosa y cualquier tipo de juego que tuviese lo femenino por telón de fondo, debido a la relación con su madre. Alessia me ha dicho también que Laura a menudo pide abrazos o que su madre juegue, si bien ésta no es capaz de expresar su amor”.
Si lees estas informaciones con el corazón, vas a percibir la mutación, el efecto transformador causado por las revelaciones, por el apoyo y las oraciones. Yo sigo el camino de los que creen que una simple ramita puede ser el inicio de la elaboración de un nido acogedor. Y fue en un sencillo pesebre donde se inició el mayor evento divino aquí en la Tierra.
Me siento feliz cuando veo los resultados positivos del Proyecto Mutación. No sé en qué medida tu intervención y la nuestra han sido responsables por todo eso.
Confieso que lo realizo y convoco a personas que lo apoyen, destacando siempre que estamos siempre bajo el comando de la Ley de Compasión Universal, de la Madre Kuan Yin y conducidos por los brazos/alas fuertes del Arcángel Miguel y de una infinidad de Maestros, como Meishu Sama, Tranca Ruas, Chinés, Sumiochi, la Monja Hermana Mónica, amigos Chamánicos, seres Atlantes, Delfines y tantos otros. Otras tantas Lauras pueden estar por ahí, quizá próximas a tu casa, cerca de tu corazón, al alcance de tus manos. ¡Tiende las tuyas!
