Más allá del auto-conocimiento
por Sergio Scabia em STUM WORLDAtualizado em 27/01/2010 15:58:52
Es ciertamente muy fuerte la presencia del STUM en nuestra vida... más allá del auto-conocimiento, el Sitio representa un gran punto de encuentro para cientos de miles de personas que viven en el exterior, es un lugar para hallar respuestas importantes en relación al camino espiritual a recorrer aquí en la Tierra, un santuario donde es posible sentirse acogido y amparado, un rinconcito sereno para reflexiones y sobre todo un espacio donde Tú y yo somos uno, sin separación, sin diferencias... percibiendo que todos somos partes especiales e indispensables del Todo.
Estamos empezando con el STUM otro año más de vida. Sin embargo, para nosotros se inicia un año 11, número maestro de la numerología, el cual tiene que ver con liderazgo, acción, reciclaje de valores, idealismo, visión amplia, fuerza espiritual...
Por lo que queda dicho arriba – y los Guías están incentivándonos – ha llegado la hora de que nuestro contenido abarque más aspectos de la vida sobre la Tierra y esto con mucha tenacidad, vehemencia y enfoque. Las llamadas recibidas son muchas, son claras y se refieren a situaciones muy reales, prácticas, “pies en el suelo”.
La Tierra, nuestra madre Tierra y sus cuatro elementos vitales, están heridos. El aire, el agua, el suelo, están duramente contaminados. Los reinos vegetal, animal y mineral también están sufriendo devastaciones constantes y a veces irreversibles. El ser humano, en su gran mayoría, vive en condiciones precarias, luchando por la supervivencia, aun viviendo en los países más ricos, impidiéndosele vivir con dignidad su tránsito aquí en el Planeta azul, aunque riquezas inmensas, mucho más allá de nuestra capacidad de comprensión, encerradas en manos egoístas e impías, permitiesen, y sobradamente, resolver cualesquiera problemas que asolen nuestro orbe.
Reaccionando frente a semejante drama, la Naturaleza se manifiesta cada vez más y con absoluta claridad (para quien sepa ver y oír), dejando evidente a todos cuán poderosa es y al mismo tiempo paciente y tolerante para con los desmanes de tantos seres inconsecuentes y brutos que ignoran casi todo sobre la verdad de la vida, de tan obcecados que están por el poder y el lucro a toda costa.
Es preciso que hagamos nuestra parte.
Quizá el comienzo signifique aprender a exigir hechos y acciones decentes a “nuestros” concejales, diputados, senadores, ministros. El voto bien utilizado es otra herramienta fundamental. Somos nosotros quienes continuamos eligiendo a personas que solo tienen por objetivo el enriquecimiento personal.
Tenemos que dejar de comprar productos y servicios superfluos, o dañinos para la salud física, que crean dependencia en nosotros y embotan nuestra conciencia, eliminando de una vez bebidas y alimentos que tengan como “aditivos” sustancias tóxicas o genéticamente modificadas, reduciendo o cortando el consumo de carne.
Es indispensable que hagamos nuestra parte en la disminución de actos que hieren todavía más a la Naturaleza, ahorrando agua, energía eléctrica, andando más a pie, utilizando el transporte colectivo, generando menos basura y reciclándola siempre que sea posible.
Es interesante también dejar de ser teledependiente, dejando la TV desconectada durante más tiempo, evitando una intoxicación aguda de emociones violentas o de acontecimientos terribles ocurridos allá fuera... es difícil, pero sería estupendo tener una buena charla, leer un buen libro, hacer un poco de ejercicio, una buena caminata por el barrio, en vez de quedarnos sentados en el sofá mirando las novelas...
Y hay mucho más... tenemos todos un poder inmenso de creación, desarrollo y acción, que permitiría, caso fuese canalizado debidamente y en grupo, realizar verdaderos milagros. ¿A qué estamos esperando? ¿O será que nos gusta tanto nuestro rutinario estilo de vida que siquiera imaginamos modificaciones profundas, positivas y en sintonía con las Leyes Universales?
Es preciso definitivamente pasar de fase... demasiada repetición no hace bien... hay tanto por descubrir, hacer, divulgar.
Nadie desea que te transformes de repente en un guerrero (si bien a veces esto hubiese sido estupendo) sino que asumas tu fuerza y tu poder, usurpados desde siempre por innumerables religiones y los más diversos sistemas de poder.
Cree en ti, siente que perteneces a un grupo invencible que emana amor puro, ideas poderosas, pensamientos provenientes de las esferas; actúa escuchando tu conciencia cada vez más abierta, tu intuición preciosa que nos premiará con soluciones viables para cada dificultad que se nos presente, provocando estallidos de confianza, creatividad y resultados prácticos. Confía, con el coraje y la determinación que proceden del centro de poder, y las energías que nos limitan serán derrotadas para siempre.
Queremos mejorar lo más posible, a partir de ahora, desde este exacto momento en que estás leyendo estos renglones. Abriremos espacios para seleccionar y llevar al aire ideas nuevas, o algo bueno que ya existe y solo necesita ser divulgado, como ha ocurrido conmigo... y esta es mi contribución a los lectores.
Fue así, en el quincenal anterior me quejaba de dolores en las manos provocados por la artritis. Una Amiga y colaboradora de este Sitio, Cristina Tanajura, de Salvador, me escribió un e-mail sobre un remedio natural, las semillas de sucupira, una planta muy brasileña. Hice la infusión y llevo tomándola cinco días. Los dolores de muchos años han desaparecido.
Estoy agradecido a Cris y feliz pongo su email a tu disposición, con las instrucciones de preparación y posología en el Blog, donde podrás dejar tus propias indicaciones para todos los lectores.
Encaminemos nuestro rumbo, nuestras voluntades, nuestros deseos de mejoramiento (y perseveremos en el cambio) a cada acto, actitud y momento, dejando atrás patrones superados, fardos inútiles, situaciones obsoletas de un pasado remoto, eligiendo en cada momento lo que es correcto, lo mejor para esa ocasión... estaremos cambiando el mundo a nuestro alrededor... nuestro ejemplo se propagará y marcará la diferencia... ¿vamos a ello?
Somos muchos y somos Uno, en la Unidad... y ciertamente estamos todos por aquí en la hora propicia y en el momento oportuno. Un período memorable.
¡Y quizá aún hoy alguien reciba de su Guía una inspiración para reducir o suavizar los graves daños diarios de la lluvia aquí en São Paulo!
Lo siento mucho, te amo, te doy las gracias.
(Muchas gracias, mis Guías, Rodolfo, Lidiane, Sandra y Teresa... sin vosotros este boletín no estaría sucediendo).