Personas y Flores
por Rubia A. Dantés em STUM WORLDAtualizado em 19/06/2008 16:37:33
Traducción de Teresa - [email protected]
Pasaba en coche por una calle de mucho movimiento cuando el semáforo se cerró justo delante de una floristería… Mis ojos pasearon distraídos por las lindas flores de un búcaro, de tan bonito color que me hicieron, por un momento, olvidar todo el barullo del tráfico.
Mi mente… en ese pequeño intervalo… aprovechó para también pasear por otros espacios remitiéndome a otro tiempo… Me acordé de un día en otra floristería a donde había ido a comprar un búcaro de flores para alguien y mi reacción ante las flores fue completamente diferente de la que este pequeño tiesto me producía ahora… de puro encantamiento.
Aquel otro día en casa ya sabía exactamente lo que quería y la imagen de las flores ya me había venido muchas veces a la mente, que se encargó de hacer un arreglo perfecto… en la forma… en los colores… en el tamaño… en todo… en eso ella no se hizo rogar… es de veras muy creativa.
Entonces… con el arreglo ya todo listo, dejé para última hora el acto de comprar las flores porque ni siquiera se me había pasado por la cabeza que podrían no existir en aquella forma.
Pero llegué a la floristería y nada de mi arreglo… Miraba ansiosa buscando alrededor, con la seguridad de que él estaría allí esperándome… nada… entre tantos jarrones de flores… ninguno se parecía al mío… y yo no conseguía encontrar un tiesto lo suficientemente bonito para decidirme entre los que estaban allí disponibles en ese momento.
Entonces acabé comprando una maceta de pequeñas flores color de rosa, pero… ni de lejos me dieron aquella sensación de contentamiento que yo tendría… si hubiese encontrado las flores… que mi mente tan cuidadosamente utilizó para el arreglo que había creado para mí.
Pero cuál no sería mi sorpresa cuando la persona que recibió las flores quedó encantada con ellas… yo me puse feliz e incluso algo asustada porque no esperaba en forma alguna una reacción tan favorable a un tiesto que para mí no era el ideal porque se alejaba – y mucho – de las especificaciones de mi mente…
Desperté con el claxon de los coches llamándome la atención para el flujo del tráfico que insistía en querer continuar… a pesar de la belleza de las flores…
Comprendí en un segundo cómo perdemos maravillas por tratar de adaptar la naturaleza a modelos creados por la mente y por la razón.
Las personas… como las flores, son únicas… en matices… en tonos… en perfumes… en magias y encantamientos… tan diversificadas que las hacen especiales justamente por ser únicas en aquella forma natural de ser…
Saber observar y aceptarlas simplemente como son… sin querer modificar ni a las personas ni a las flores… para que quepan exactamente dentro de nuestras expectativas… puede traernos sorpresas mágicas y hacer que un día gris y sin gracia, en medio del tráfico arrasador de una gran ciudad… se convierta por un momento que sea… en algo encantado y eterno… y por eso mismo inolvidable.
Rubia A. Dantés es Diseñadora, crea mandalas e ilustraciones en conexión...
Trabajos individuales y en grupo, con el Sagrado Femenino, el Don y el Perdón...
