Practica el perdón...
por WebMaster em STUM WORLDAtualizado em 15/05/2014 11:01:05
por Mel Aitak - [email protected]
Traducción de Teresa - [email protected]
Cualquier momento es tiempo para reflexionar y perdonar…
Si tú eres cristiana, de la religión que sea, sabes la importancia de recordar las lecciones de Cristo con relación al amor, la caridad y el respeto al prójimo. ¿Qué tal entonces seguir el ejemplo del Maestro y practicar el perdón?
Perdonar hace mucho bien, pues alivia el alma. Quienes piensan que nos rebaja o nos hace más débiles, están en un error. Ese acto fortalece en nosotros la certeza de que somos especiales a los ojos de Dios. Es cierto que no todo el mundo ha llegado al grado de madurez suficiente para comprender esto. Muchas personas aún están presas en sentimientos egoístas y solitarios. Por lo tanto, modifícate tú.
La vida es una jornada fantástica. Frente a las posibilidades que se abren ante ti, detente y reflexiona: ¿debes recorrerla a solas o apoyarte en un hombro amigo, cuando necesites descanso durante el trayecto? Yo prefiero la segunda opción.
Cuando alguien me hace daño, analizo la situación. Si puedo, hablo. Si la persona no me da apertura, dejo que siga su camino y aprenda con sus errores y aciertos. Esto sucede en el tráfico, en el trabajo y en cualquier lugar de la vida. No siempre es fácil tomar distancia y analizar la situación.
La primera reacción puede ser de indignación. Pasado el momento de explosión, párate, piensa y perdona. Perdona también las amarguras que están creando su tejido en tu corazón, endureciéndolo. Tú has cambiado y muy probablemente la persona que te ha hecho daño también ha evolucionado. Por tanto, no mantengas un vínculo de odio y rencor con nadie. Libérate.
Una persona airada presenta un aura densa, enrojecida. Sabiendo que el rojo, en la cromoterapia, es un color caliente, ¿qué supones que esa vibración hará en tu cuerpo físico? Calor y energías pesadas. No dejes prevalecer esto en ti ni te conectes a personas con esa vibración interior. Busca siempre la luz, que ella saldrá a tu encuentro en medio de la multitud.
