Qué es la intuición y cómo desarrollarla - parte 2
por WebMaster em STUM WORLDAtualizado em 07/03/2014 10:56:50
por Andre Lima - [email protected]
Traducción de Teresa - [email protected]
En el artículo de la semana pasada yo decía que la intuición es un saber que nos llega sin que tengamos plena conciencia de cómo nos ha llegado aquella información. Explicaba que hay dos tipos de intuición, una de ellas basada en nuestra experiencia de vida, en lo que hemos aprendido en el pasado, que es activado instantáneamente en varias situaciones. Esto nos lleva a saber determinadas cosas y a extraer ciertas conclusiones rápidamente.
En cambio, el segundo tipo de intuición, la que es más sutil, no se basa en nuestra experiencia de vida. Esa intuición viene de la conexión que tenemos con el todo, con el universo. Lo cierto es que nosotros formamos parte de ese universo, y todo el tiempo estamos intercambiando informaciones con él. Lo que pasa es que a menudo estamos sordos y ciegos para esas informaciones.
La intuición más sutil es la que captamos o “bajamos”, y que está disponible en el inconsciente colectivo, o gran conciencia colectiva, pues también lo podemos decir de esa forma.
Incluso una persona con poca experiencia de la vida puede tener acceso a esas informaciones y tener grandes intuiciones. Intuiciones que indican cuál es el mejor camino para tomar en la vida, qué decisión tomar en una relación, si una persona es confiable o no, qué va a suceder en el futuro…
La intuición es un aspecto de la sabiduría. La sabiduría no depende del conocimiento intelectual. Hay personas, bastante limitadas intelectualmente, pero que son muy sabias al lidiar con la vida. En cambio, otras tienen el intelecto desarrollado, pero no tienen sabiduría. La sabiduría viene de nuestra conexión con el todo, y es más amplia que la intuición.
Son infinitas las posibilidades de información que la intuición nos puede acercar. Ella no depende del conocimiento intelectual o de la experiencia, como he dicho; pero el conocimiento y la experiencia pueden ayudarnos a interpretar las informaciones que captamos.
Cuando arrastramos negatividad del pasado, esas emociones, creencias y pensamientos acaban confundiéndonos y estorban la interpretación de lo que nos llega por la intuición sutil; lo mismo ocurre con la intuición que viene por la experiencia, como he explicado en el artículo pasado.
Entonces, es posible que surja una buena oportunidad, y por un lado tu intuición verdadera, proveniente de la conexión con el universo, te dice que aquello será excelente, pero por otra parte presientes que va a ocurrir algo malo. Y ese sentir, a decir verdad, puede ser únicamente la proyección de un miedo que llevas en ti. Así, las cosas se confunden en tu interior y acabas no sabiendo cuál camino seguir.
Y, dependiendo de la fuerza de esa negatividad que arrastras, es posible incluso que te sabotees de forma inconsciente para que las cosas no salgan bien. Y ante el resultado negativo, te dices a ti mismo: “algo me estaba diciendo que iba a salir mal…”
Esto ocurre porque tenemos varios mecanismos internos, aparte de la ley de la atracción, que ayudan a crear nuestra realidad, con base en lo que pensamos y sentimos. Y si estamos llenos de emociones malas, estas emociones nos ayudan a inconscientemente elegir de modo equivocado, y así a atraer situaciones negativas. De este modo tú “intuyes” falsamente que va a salir mal, y, sin darte cuenta, haces que salga mal y confirmas tu creencia.
Nuestro ruido interno obstaculiza la recepción e interpretación de la intuición sutil, o sea, de la información que podemos captar del universo. ¿Qué cosa sería ese ruido interno? Exceso de pensamientos; barullo mental; emociones en conflicto; estrés; sentimientos negativos que hemos acumulado durante la vida…
Todo esto funciona como una suciedad que atasca nuestros canales de comunicación y distorsiona las informaciones. Imagínate acceder a Internet con una conexión sin hilo de mala calidad. En el momento de escribir este artículo estoy en un hotel, y la conexión sin hilo está lenta en extremo, es difícil incluso abrir un correo. Solicité un cable para conexión directa a Internet, y todo empezó a funcionar maravillosamente bien. Pero supón que ese cable estuviese sucio o defectuoso…
Cuando nos curamos de emociones, pensamientos y sentimientos negativos, retiramos la suciedad interna que obstaculiza la recepción e interpretación de las informaciones. Con eso nuestra intuición mejora. Cuanto más limpios por dentro, más ancho será nuestro canal de comunicación, y más rápido.
Sanar nuestra negatividad también reduce el exceso de pensamientos. Estamos más silenciosos por dentro. Nuestra mente se vuelve más serena y deja de producir el barullo que interfiere en la intuición verdadera. Nos convertimos en un canal limpio y eficiente.
El desarrollo de la intuición sutil viene por nuestro mejoramiento interior. Y para acelerar en gran medida ese desarrollo, tenemos que sanar nuestras emociones negativas. Por eso la práctica de la *EFT (técnica para auto-limpieza emocional) nos ayuda y mucho a mejorar la intuición, porque la técnica tiene un gran poder de limpiar la negatividad interior. Cuanto más practicas la EFT, más intuitivo te volverás. En el fondo, cuanto más autoconocimiento y desarrollo llegues a tener, por cualquier vía o método que sea, tu intuición mejorará.
Bien, se podría decir mucho más acerca de la intuición. Dos artículos es muy poco para hablar sobre ello. Quizás en algún momento yo llegue crear un curso con ese tema. Pero eso queda para más tarde.
André Lima - EFT Practitioner. *EFT - Emotional Freedom Techniques
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