¡Recuerdos! ¡Ellos pueden dirigirnos en la vida!
por WebMaster em STUM WORLDAtualizado em 25/03/2010 12:42:22
por Wilson Francisco - [email protected]
Traducción de Teresa - [email protected]
"Recordar es vivir” es un dicho popular que reputo como un comando mental negativo. ¡Claro, algunos recuerdos, atrayentes, agradables pueden dirigir nuestra vida atendiendo o dándonos la fuerza que necesitamos para superar ciertos obstáculos de la vida!
Pero viven de recuerdos, se aprisionan en el pasado, en vez de arrojarse hacia delante en busca de un espacio útil y bueno donde puedes aterrizar tus sueños y proyectos. Es mucho mejor. ¡Ahora es el momento!
Marlon es hoy un empresario iniciando proyectos de trabajos, acudió al consultorio, trayendo sus dudas e incertidumbres.
Hicimos el proceso de mantenimiento, la lectura del cuerpo y del alma y él fue observando y sintiendo.
En determinado instante, sus ojos brillaron, él respiró hondo y con la voz emocionada dijo: Wilson, ahora estoy recordando. Yo tenía 10 años. Era un niño esbelto, despierto. Quería a toda costa trabajar, ayudar a mi madre, no había conocido a mi padre.
Encontré trabajo en un autoservicio, me colocaron como repositor de mercancías. Trabajo pesado, ¡superior a mis fuerzas! Me cambiaron de sector: fui a examinar y seleccionar cebollas. Y después, pasé a tener cuenta de los carritos y a empaquetar las compras ganando buenas propinas. Estuve escuchando esa declaración que provenía de su alma. Era un recuerdo constructivo, anunciador de acontecimientos futuros.
Aún le brillaban los ojos, cuando dijo: Wilson, en aquella época le dije a mi madre: ¡cuando cumpla los 30 años tendré mi coche y mi casa!
Mirándome, dijo casi en un grito:
El mes que viene cumplo 30 años, tengo mi coche ¡y ahora comprendo por qué tú, en este proceso, señalas como muy importante el que yo salga pronto de esta casa prestada en que vivo!
Pues así es, todo proceso indicaba el cambio como estrategia importante, algo que le venía del alma.
Era el clamor del alma, buscando romper los esquemas del miedo y de la inseguridad.
Y para Marlon, el ángel bueno que vino a anunciarle este viraje en la vida fue el recuerdo divino de cuando aún era niño haciendo proyectos y sueños en un autoservicio.
Extraordinaria esta experiencia. Y aquí os queda este relato del corazón sugiriendo que rescatemos en nosotros el crío ingenuo y feliz que cada uno de nosotros lleva dentro.
