Rescatando lo Femenino
por Graziella Marraccini em STUM WORLDAtualizado em 27/09/2010 12:21:15
Traducción de Teresa - [email protected]
Libra es un signo de Aire regido por el planeta Venus que representa el arquetipo de lo femenino. El arquetipo representado por la Venus de Tauro es en cambio diferente del arquetipo representado por la Venus de Libra, ya que los elementos a que pertenecen estos signos son distintos uno de otro en su manifestación. Tauro pertenece al elemento Tierra y Libra pertenece al elemento Aire. Esa diferencia imprime un carácter a cada una de las manifestaciones de la cualidad femenina específicas de nuestra personalidad. En astrología, Venus representa la forma en cómo idealizamos el placer, o sea, la forma en cómo buscamos la satisfacción personal y el placer, ya sea físico, psíquico o mental. Por ello la Venus de Tierra ofrecerá cualidades más materiales a la noción de placer, cualidades estas que podrán traducirse en el placer de comer, en la sensualidad y en el tacto, en el confort material, en el placer de comprar, etc. La Venus de Aire sentirá más placer en actividades artísticas y sociales, como fiestas y recepciones, y podrá expresarse en una sensualidad más refinada, intelectual y sofisticada. Venus, o Afrodita (para los griegos), nació de las aguas y surgió en el mar dentro de una concha. Esa representación puede ser vista en numerosas pinturas renacentistas o clásicas, entre ellas las famosas de Botticelli o de Bouguereau. En el Museo del Louvre en París hay una bellísima estatua en mármol llamada Venus de Milo (nombre de la isla griega donde fue encontrada). Pero hay estatuillas de Venus prehistóricas, que representan diferentemente el arquetipo femenino. ¡Estas estatuillas muestran en su mayoría mujeres que actualmente consideraríamos ‘gordas’, llenas de celulitis y manteca por todas partes!!!
Es un hecho que el concepto de belleza ha cambiado mucho a lo largo de los siglos: ¿quién no ha visto las curvas de las mujeres opulentas y róseas que el pintor flamenco Rubens inmortalizó (como en el cuadro Venus y Adonis del Metropolitan Museum of Art de Nueva York)? No hay que olvidar tampoco que el símbolo que emplea la astrología para representar a Venus muestra un círculo (el Sol) sobre una cruz (la Tierra) representando lo femenino. Diferentemente, Marte está representado por un círculo con una flecha en 45º (dirigida hacia lo alto) simbolizando el falo, o sea, lo masculino.
Todavía hoy en los países árabes (especialmente) la mujer es apreciada por sus caderas anchas y por sus carnes suaves y rosadas, que indican un vientre capaz de generar muchos hijos. ¡En cambio, en los países occidentales este concepto ha cambiado tanto en los últimos decenios hasta el punto de que se ve enaltecido un modelo femenino más cercano a lo andrógino! Las mujeres delgadísimas, de caderas estrechas y pocas carnes, es sabido que son poco fértiles. ¡No en vano tantas mujeres tienen problemas para quedarse embarazadas! ¿Os habéis dado cuenta de que las mujeres más sencillas, las que aún viven de forma más natural y primitiva, tienen menos problemas para quedar encinta que la mujer que se dice ‘civilizada’? ¡Es un hecho que las mujeres más pobres tienen más hijos! Para estas mujeres, el papel de la hembra nunca ha sido un problema. Como contrapartida, y por condicionamiento de los patrones impuestos por nuestra sociedad, de tanto cultivar la delgadez extrema, las mujeres actuales han perdido la noción del arquetipo femenino, alejándose de su función primera que es la de procrear y parir.
¡Ese es un grave error, pues a mi modo de ver, si la estética de lo femenino ha cambiado, no así la función de la hembra en la humanidad! Según mi punto de vista, las mujeres tienen que reconocerse dentro de este papel para cumplir aquello para lo que han sido creadas. Alejándose de lo femenino, pierden su identidad. La mujer es vientre, y vientre es maternidad, y eso no va a cambiar tan pronto. ¡La mujer es cáliz, es concha, y ha sido creada para recoger, abrigar, nutrir y cobijar! La verdadera mujer es la que sabe cuán importante es su feminidad. En la era matriarcal, la era de la Gran Diosa, la humanidad era ciertamente más pacífica, pese a existir también el papel de la Diosa Guerrera, ¿no es cierto? Venus no es tan solo pasividad: cuando tiene hijos sabe de cuánta lucha es capaz una madre para defender su prole o su territorio. Pongo de relieve que en el mapa natal de una mujer, la Luna también indicará la fertilidad y Venus indicará la expresión del placer y de la seducción.
Entonces ¿de cuál Venus estamos hablando? ¿Con cuál Venus nos identificamos? Cada una de nosotros tiene a Venus en un signo astrológico y también en una casa astrológica en su mapa natal. La cualidad de cada Venus estará determinada por el signo zodiacal y la forma de manifestación será determinada por la casa astrológica. Aclaro: el área en que usaremos mejor nuestra cualidad venusina-femenina estará determinada por la casa astrológica en que nuestra Venus se encuentra. La forma en cómo usaremos su energía dependerá del signo solar en que Venus se encuentra y de los aspectos astrológicos que forma con otros planetas. Pondré un ejemplo: yo tengo a Venus en Acuario, en la Casa 12/1 (o sea, está matemáticamente en la decimosegunda casa pero ejerce su influencia sobre mi Ascendente). Así yo me identifico con una Venus de Aire, de cualidad artística, intelectual, idealista y social. Como mujer, aprecio la independencia y la amistad, y a pesar de desear tener pareja, prefiero mi independencia ya que no me gusta que me exijan o que cercenen mi libertad. Venus en el Ascendente me confiere algunos atributos físicos femeninos bien apreciados por los hombres y un poder de atracción pronunciado, y además un magnetismo personal ‘diferente’ debido a la cualidad acuariana. ¿Habéis comprendido?
Listo, ahora podéis verificar dónde está vuestra Venus en el mapa (véase el artículo sobre Venus en los signos en el STUM) y obtendréis una pincelada sobre vuestras cualidades femeninas. Sin embargo, para obtener un cuadro más completo de vuestra personalidad es necesario analizar bastante más que solamente un planeta. Una interpretación completa y personalizada podrá ayudarte a conocer mejor tus talentos y tu potencial femenino, ayudándote a evolucionar y a caminar en plenitud por la vida, consciente de tu misión.
La próxima semana hablaremos de la conjunción entre Venus y Marte, ambos en tránsito en el signo de Escorpio.
¡Tened todos una buena semana, llena de Luz, Amor y Armonía!
São Paulo, 22 de septiembre de 2010.