¡Sentirse como pez fuera del agua!
por Maria Isabel Carapinha em STUM WORLDAtualizado em 17/09/2011 09:23:20
Traducción de Teresa - [email protected]
¡Ostras! ¿Cómo imaginar la sensación de un pez fuera del agua? Es una sensación de no poder respirar, de sentirse ahogado y debatirse mucho, intentando llamar la atención de algún ser que pueda venir en tu socorro. ¡Solo con pensarlo nos entra la congoja, pero esa frase muy utilizada en nuestro vocabulario tiene un fondo muy propio de comparación! Así es como de hecho nos sentimos cuando las situaciones que vivimos no condicen con nuestra esencia. Llegamos a preguntarnos: ¿qué estoy haciendo en este lugar? ¡Esas personas con quienes convivo no tienen nada que ver conmigo!
Estoy absolutamente segura de que algún día has tenido la sensación de estar en el lugar equivocado en el momento equivocado. Parece broma… ¡pero hasta aquel balón, con que juegan los niños a cierta distancia, viene lanzado hacia ti!
Puede ser un viaje planificado hace mucho, que de alguna forma se concretiza de forma equivocada, todo eso es vibración contraria a tu esencia.
También puede que estés advirtiendo esa sensación en tu lugar de trabajo, por parte de las personas que allí están, que piensan y actúan de forma completamente diferente a la tuya, y esto te tortura porque pasas allí mucho más tiempo al día de lo que pudieras desear, y eso acaba siendo una tortura diaria.
A veces, en las relaciones también se viven situaciones similares; estar con alguien que un día fue tu pasión y que hoy se ha convertido en otra persona es muy complicado y difícil de aceptar. El sufrimiento es el único camino, y eso no puede formar parte de nuestra vida.
Cuando tomamos la decisión de eliminar de nuestra vida esa sensación de pez fuera del agua, observamos algunas cosas como premisas verdaderas:
- Los demás no logran colmar nuestras necesidades, lo que eventualmente pueden es hacer que las necesidades sean menos urgentes, pero eso a lo largo del tiempo no permanece;
- En las relaciones, la única persona con quien estamos lidiando somos nosotros mismos. La otra persona no hace nada más que revelarnos lo que siente.
- Amamos de hecho en los demás lo que amamos en nosotros mismos. Rechazamos en los demás lo que no nos gusta en nosotros mismos pero no somos capaces de ver;
- Cada vez que en nuestra vida surge un sentimiento intenso, ya sea de rebelión, de tristeza, de descontento, de rechazo, es un signo seguro de que estamos lidiando con él a fin de liberarnos. Si, por ventura, resistimos al sentimiento, él se enfrentará a nosotros hasta que tomemos una decisión.
En el momento en que estemos dispuestos a vernos, a reconocer lo que estamos haciendo, abandonaremos el sufrimiento rápidamente.
Ese tipo de sensación de pez fuera del agua que puedes estar experimentando y vivenciando, es mucho más corriente de lo que puedas imaginar; son innumerables los casos que atiendo en mi consultorio y a distancia, y pueden tener origen en cualquier área de tu vida; esto no tiene más que un diagnóstico: desequilibrio energético.
Significa que estás viviendo fuera de tu frecuencia vibracional, que existen bloqueos que te están llevando a situaciones repetitivas, como si por algún motivo aún no hubieses aprendido la lección.
La eliminación de todo eso es muy fácil y tranquila, mediante el empleo de la Mesa Radiónica; ¡tus frecuencias quedarán perfectamente equilibradas y los bloqueos serán eliminados de tu vida!
Hace algunos años atendí en mi consultorio a una joven licenciada en Químicas y Derecho. Le pregunté por qué dos carreras en áreas tan distintas.
Me dijo que al comienzo hizo Químicas y se puso a trabajar en la empresa de la familia, que fabricaba glicerina y materia prima para la industria de los medicamentos; sin embargo, para la fabricación de tales productos, la materia-prima base era el sebo, y aquel hedor horrible así como las condiciones de trabajo le llevaron a detestar lo que hacía; decidió entonces pasarse a Derecho, pese a sentirse frustrada porque amaba la Química.
La Facultad de Derecho no la llenó como esperaba. Hizo oposiciones a judicatura y fue aprobada. Según ella, todo fue muy rápido, estudiaba y estudiaba como si tuviese un piloto automático y ya no pensaba en su realización personal. Llegó a decirme que no abandonó porque no sabía cómo explicar a los demás otro nuevo fracaso suyo.
Acudió a mí porque se sentía muy infeliz y quería equilibrarse y cuidar sus bloqueos antes de empezar en otro campo. Incluso la inspiración de este texto ha venido de los términos que ella misma empleó: me siento como pez fuera del agua en todo lo que hago y vivo.
Iniciamos su tratamiento, equilibramos todas sus frecuencias energéticas y eliminamos los bloqueos. Seguidamente hicimos una completa verificación de sintonía para que pudiese elegir el área de trabajo que de veras la llenase, y cuál no sería mi sorpresa, pues la sintonía era enorme con el campo de la química.
Le rogué que hiciera una lista de las áreas en que le gustaría actuar; me la trajo y al verificar la compatibilidad energética resultó muy destacada e intensa el área de cosméticos.
A continuación hizo cursos y especializaciones, dando énfasis a ese camino. La oportunidad pronto surgió y hoy ella trabaja en una gran empresa de cosméticos en la formulación y desarrollo de esencias, y se siente realizada en el lugar que de veras es el suyo.
