Ser libre
por Elisabeth Cavalcante em STUM WORLDAtualizado em 28/09/2012 23:45:53
Traducción de Silvana Partucci - [email protected]
No es nada fácil alcanzar el estadio en que se puede vivenciar la verdadera libertad. Por más que la deseemos, vamos, a lo largo de nuestra vida, enganchándonos a innumerables amarras que nos impiden de vivir este sentimiento plenamente. La preocupación en seguir patrones de comportamiento y normas establecidos por la sociedad o por la familia, nos vuelve esclavos, por la necesidad permanente de aprobación.
El miedo de parecer diferente está en la raíz de ese comportamiento y hace que la mayoría prefiera la comodidad de ser parte de la masa, al revés de intentar expresar su autenticidad. Otro problema esencial para nuestra libertad es la dependencia emocional.
Cuantas personas renuncian a sus convicciones y deseos, apenas para garantizar la permanencia del otro a su lado. De a poco, van perdiendo la referencia de quienes son de hecho, pues la fantasía en que embarcaron acaba volviéndose tan real que se vuelve casi imposible abandonarla.
El problema es cuando el otro se va, pues, si eso sucede, inevitablemente, ellos sienten que su mundo se derrumba y quedan perdidos delante de la nueva realidad. El sentimiento de traición es inevitable, ya que renunciaron a todo a favor de la relación.
La única manera de escapar de estas trampas es el desarrollo de la conciencia. Esto sólo es posible cuando conseguimos percibir de modo claro las motivaciones que están por detrás de nuestras actitudes. Mientras sigamos actuando sobre la influencia de nuestras emociones inconscientes, continuaremos prisioneros de la angustia y de la infelicidad.
En todas las cosas sé un maestro de lo que haces y de lo que dices y piensas.
Sé libre.
La libertad es el supremo objetivo de la verdadera religión, no Dios, no el paraíso ni la verdad y si la libertad. Esto debe ser comprendido, porque este es el mensaje especial de Gautama, el Buda, para el mundo.
La libertad es el valor más alto de acuerdo con él, el "summum bonum", no hay nada más alto que eso. Pero por libertad no quiere decir libertad política, libertad social, libertad económica. Por libertad el quiere decir la libertad de la conciencia.
Nuestra conciencia está en una profunda esclavitud: estamos encadenados. Dentro está nuestra prisión, no afuera. Las paredes de la prisión no están del lado de afuera de nosotros: ellas existen en nuestros instintos, existen en nuestros deseos, existen en nuestra inconciencia.
La libertad es el objetivo.
La conciencia es el método para alcanzar el objetivo.
Cuando estás realmente libre, eres un maestro, la esclavitud desaparece. Comúnmente, parecemos libres, pero nosotros no somos libres. Puede parecer que somos los que elegimos, pero no somos los que elegimos. Estamos siendo arrastrados, empujados por fuerzas inconscientes.
… Buda dijo: esta vida no es la verdadera vida. Estás siendo vivido, tú no estás realmente viviendo. Está siendo vivido por las fuerzas inconscientes. A menos que te vuelvas consciente, a menos que tomes posesión de tu vida, a menos que te vuelvas independiente de tus instintos, no serás un maestro; y sin ser un maestro, no hay bienaventuranza, la vida permanece un infierno.
OSHO. The Dhammapada.