¿Será verdad que las terapias consiguen acceder a multiuniversos?
por Silvia Malamud em STUM WORLDAtualizado em 27/11/2016 10:14:35
Traducción de Teresa
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Existen ciertas teorías que explican la cuestión de los multiuniversos, e igualmente las vidas simultáneas y aunque puede que éstas nunca sean íntegramente confirmadas, aún así, vale enormemente la pena que pensemos un poco al respecto, con el propósito de extraer nuestras propias conclusiones.
Ideas sobre universos paralelos o muchos mundos es lo que no nos falta.
Tenemos alusiones a esos temas en las más diversas religiones, y ahora, más que nunca, algunas áreas de la física también abordan esas posibilidades.
El propio Espiritismo a su modo desarrolla este tema cuando habla sobre las colonias espirituales. En otras doctrinas religiosas, el factor relativo a la multiplicidad de universos también se menciona cuando se nos revelan los cielos a donde supuestamente iremos al morir. Espíritus de “pretos velhos” incorporados en humanos, por ejemplo, también pueden ser observados como realidades que vienen de otras dimensiones simultáneas a las nuestras y que por determinados acontecimientos provocados consiguen interconectarse con algunas personas y ambientes en un mismo espacio de tiempo.
Quizá no en todos los sueños, pero sí en muchos de ellos, puede que aspectos de nuestra consciencia se desplacen a otros universos en los cuales también estamos existiendo. Son aquellos sueños en que tú te percibes haciendo cosas totalmente diferentes de lo habitual, en otras historias de vida. A veces las personas, en este tipo de sueños, también consiguen percibirse en un estado de doble consciencia al notar que actúan en realidades que no son efectivamente suyas, pero que de manera paradójica surgen en los sueños de modo altamente familiar. Sería algo así como si hubiese un acoplamiento de nuestra consciencia de aquí, con otra consciencia nuestra que coexiste en otra dimensión de realidad, en dicho sueño.
En ese mismo canal de percepción, otro ejemplo del mismo orden puede ocurrir en la meditación o incluso cuando imaginamos algo.
La teoría sobre los universos paralelos de la física cuántica se originó en respuesta al principio de la incerteza de Heisenberg en relación a las posibilidades de que ocurriesen múltiples estados dentro de un mismo sistema cuántico. La teoría de los muchos mundos pertenece al campo de la cosmología y existe un estudio bastante amplio en esa área, en relación al tema.
Según esos campos de percepción y conocimiento, podemos decir que vivimos en un mundo de muchas dimensiones, y que todas las posibilidades de vida de una persona pueden inclusive formar parte y caber en vidas simultáneas, con variables en esta y en otras dimensiones.
Si vas conduciendo un coche por una carretera y repentinamente sufres un accidente y mueres, en otra dimensión otro aspecto de ti mismo puede haberse desviado y salido ileso de una situación semejante o igual, y aún en otra realidad tú simultáneamente puedes estar haciendo algo totalmente diverso de esas dos posibilidades anteriores.
Y si todo eso, por más loco que nos pueda parecer, aún así fuesen posibilidades reales, la pregunta que resta es si de algún modo podríamos interferir en esas vivencias hasta el punto de interceder sacando provecho para ampliar nuestros conocimientos.
Recuerdo una paciente que sufría una gastritis crónica durante años y años, y que en el transcurso de la terapia empezó a soñar y a trabajar terapéuticamente su sueño en relación a la tal gastritis. En este sueño, que era recurrente, siempre sobrevenía una escena donde ella salía de un campo de concentración en el cual había permanecido demasiado tiempo, y casi sin alimentarse. Según la paciente, cuando fue liberada sentía un inmenso malestar gástrico y en la secuencia siempre era encaminada a un hospital de base para recuperarse. En la siguiente escena que venía, ella se veía en una cama de hospital siendo atendida, pero aún sufriendo dolores terribles y enorme angustia, porque aparte del drama vivido en el campo, nunca conseguía salir de aquel estado de dolor… Trabajamos intensamente la escena perturbadora del sueño con la terapia EMDR, de reprocesado cerebral, hasta que en determinado momento, el cerebro de la paciente saltó a otra escena donde ella estaba dando clase en una escuela infantil. Hizo un relato detallado sobre el lugar donde estaba y dijo además que se sentía bien, en paz y segura. Cuando le pedí volver al lugar perturbador, ella simplemente ya no fue capaz de acceder nuevamente a aquella situación, si bien tenía conocimiento de la misma. Se sentía feliz y curada en la sala de clase. Durante el proceso terapéutico la paciente pudo interceder en sus otras realidades, ya fuesen imaginarias, simbólicas o no, y pudo reprocesar los contenidos de dolor físico y emocional implicados en aquellos escenarios que se trasvasaban a la realidad de aquí.
El trabajo terapéutico se hizo por el nivel de la perturbación, a través de las imágenes, de los sentimientos y pensamientos al respecto, en fin, en la máxima consciencia posible, y este tipo de terapias, según mi modo de ver, también es un acceso a esas realidades en que coexistimos. Yo misma no sé precisar si mi paciente fue a alguna vida pasada, simultánea, o si fue su creatividad mental y simbólica de sanación lo que funcionó. El hecho es que durante el proceso de autoconocimiento y sanación, ella también se acordó de escenas de su infancia que la corroían del mismo modo que la situación de su sueño también la corroía en tal campo. La misma cuestión emocional se enlazó a las escenas y con los recursos terapéuticos ella pudo reprocesar y salir de sus versiones de realidad más lúcida y liberta.
Con su energía rescatada, su vida actual ha mejorado mucho y ella ha podido crear otros mapas existenciales en medio de nuevos y saludables ambientes emocionales.
Que todos nosotros podamos tener la oportunidad de desarrollarnos en nuestros procesos personales de modo particular, único y trascendente.