Trascender los bloqueos
por WebMaster em STUM WORLDAtualizado em 13/05/2013 09:20:40
por Teresa Cristina Pascotto
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Traducción de Teresa - [email protected]
En nuestro proceso de vida, somos llevados a conocer la existencia de los bloqueos - que nos han sido impuestos, que hemos permitido o que hemos creado - que ponen interdictos en nuestra vida.
Descubrimos que, por nuestro miedo a enfrentar la vida, acabamos aprovechando esos bloqueos y sirviéndonos de ellos para escondernos de la vida y eso nos mantiene apegados a ellos. Percibimos también que si luchamos contra los bloqueos, más ligados a ellos quedamos.
La toma de conciencia respecto de esta condición, con su debida aceptación, nos anima e impulsa a buscar la libertad. Con esto, los bloqueos se van haciendo cada vez más innecesarios y nos desapegamos de ellos gradualmente. En el desapego, dejamos intuitivamente de buscar recursos para liberarnos y quitamos el foco de los bloqueos; nuestro foco ahora queda situado más allá de los bloqueos, en aquello que nuestra alma desea pero que el ego teme y por eso nos mantiene prisioneros de dichos bloqueos. Al cambiar el foco de los bloqueos para aquello que está más allá de ellos, naturalmente ya no nos sentimos tan ligados a ellos, ya no es preciso tanto esfuerzo para liberarnos.
La aceptación de los bloqueos y el deseo de ir más allá de ellos, nos conduce a un proceso natural de trascendencia de los propios bloqueos. Es algo totalmente diferente de simplemente querer sobrepasar, transponer, eliminar o destruir los bloqueos, es ir más allá, como si los bloqueos se volviesen "humo".
Así, al trascender determinados obstáculos y bloqueos, rompemos el lacre que nos mantenía prisioneros de esas condiciones y protegidos de las responsabilidades que el ego no quería asumir en la vida. Llegamos ante un portal. Atravesando ese portal, somos conducidos a un nuevo nivel de conciencia, totalmente diferente de los otros niveles y portales por los cuales hemos venido pasando y accediendo. En este nivel es donde empezamos a entrar en sintonía con frecuencias de luz de vibraciones mucho más intensas y "calidad superior" a las limitadas frecuencias a que estábamos acostumbrados - no es posible describir en palabras el significado de esas nuevas frecuencias, sólo es posible "sentir" esa diferencia y potencia.
Pasamos a tener que lidiar con esa nueva frecuencia y vibración, antes incluso de lograr "utilizarlas" de forma adecuada. Tenemos que aprender a vivir a partir de esta nueva vibración, tenemos que adaptarnos a ese nuevo estado de ser que hemos alcanzado al pasar a ese nivel más elevado.
Mientras esta adaptación se produce, empezamos a notar sensaciones diferentes, de algo nuevo que sucede, pero no logramos definir lo que es. Un "síntoma" básico de esa nueva condición es una sensación de "ansiedad saludable" (a decir verdad, es de anhelo), aquella sensación de "frío en la barriga", de expectativa de algo bueno que vamos a hacer, es una intensa y al mismo tiempo sutil sensación de que algo muy diferente está para suceder. Cuando teníamos esas sensaciones en los viejos niveles, cuando estábamos preparándonos para hacer algo importante y bueno, estas sensaciones eran de ansiedad intensa, de aflicciones e inseguridades. Pero en este nuevo nivel las sensaciones nos dan tranquilidad y seguridad, aun no sabiendo lo que ocurrirá a continuación.
Nuestra alma está más integrada y satisfecha en este nuevo nivel y en esta nueva experiencia que aporta la agradable sensación de "expectativa saludable". Sí, con ello nuestra alma está comunicándonos que hay nuevas experiencias por venir, pero que ocurrirán de forma que nuestra mente no logrará racionalizar su expresión real, sino que para la mente todo parecerá lo mismo de siempre; pero como ya nos hemos adentrado en el portal, inevitablemente nada en ese nuevo nivel se experimentará en los viejos moldes y patrones. Todo es nuevo, todo es diferente. Sólo para la mente, que necesita referencias para comprender las experiencias, todo se hará un poco extraño.
Tendremos sensaciones mixtas, pues al mismo tiempo en que sentimos el flujo intenso de nuevas frecuencias de energía actuando en nosotros y a través de nosotros, que son muy agradables, sentiremos también las reacciones químicas, energéticas, emocionales y psíquicas que no lo serán tanto en nuestro "nivel humano" de tercera dimensión.
Tener consciencia de esa etapa es necesario para que no vengamos a abandonar el nuevo estado de ser sólo porque no lo comprendemos y porque nos trae sensaciones extrañas y desagradables. En todo proceso de transformación, las reacciones desagradables suceden y esto no significa que sea algo malo, sino que algo muy bueno nos está sucediendo.
Así, con comprensión y aceptación de este nuevo momento de trascendencia de los viejos patrones, modelos y bloqueos, y con la debida paciencia en la adaptación necesaria para comportar esas nuevas frecuencias, empezaremos a relajarnos y a observar lo que ocurre dentro de nosotros y percibiremos que una infinidad de "micro-sensaciones" están sucediendo en nosotros, estaremos afinando nuestras percepciones extra-sensoriales que nos llevarán a percibir fragmentos de "luz e información sagradas" que estaremos recibiendo y emanando naturalmente. Se trata de que nuestros códigos sagrados están siendo activados y comunicándose con nosotros, dándonos intuición para nuevos pasos. Será activada también nuestra capacidad de "escuchar" las orientaciones e informaciones emanadas de nuestros cuerpos, - físico, mental y emocional - sacando a la superficie nuestra sabiduría innata.
Pero el paso fundamental, que pondrá en marcha la "ignición" de esa sabiduría inherente, es la atención consciente y enfocada que es preciso tener hacia esos cuerpos. Después de esto, sentiremos la fuerza de la intuición que nos guiará en la creación de recursos para los cuidados necesarios de nuestros cuerpos, que se convertirán en el "cáliz sagrado" y sano que recibirá y comportará nuevas frecuencias y vibraciones cada vez más elevadas.
En ese nuevo estado, viviendo con la fuerza de lo humano en nosotros - significa que no nos convertiremos en seres libres de la condición humana, sino humanos con capacidades superiores de entendimiento y manifestación -, empezaremos a percibir y a sentir más de aquella sensación de "grata ansiedad", como un indicador que nos muestra que algo nuevo y "muy bueno" está para suceder en nuestra vida, a cada momento. Tendremos destellos de percepciones de innumerables posibilidades ante nosotros, que nos harán sentir gran placer y deseo intenso de entregarnos a ese nuevo flujo de energías con condiciones muy favorables para nuestro despertar y para nuestro desarrollo y transformación.Deberemos desarrollar, cada vez más, la capacidad de mantenernos en sintonía con nuestra alma, para que ella nos guíe frente a esas innumerables posibilidades, para que la mente no domine y nos haga perdernos frente a tantas posibilidades, por su necesidad de "abrazarlo" todo de una sola vez, para su control. Solamente con la fuerza del alma tendremos discernimiento y sabiduría para dejarnos llevar por el flujo natural que nos conducirá a cada posibilidad en el "momento oportuno". El mapa de nuestra alma ya está trazado, y sólo si nos entregamos a ella conseguiremos seguir este camino divino.
