Un virus llamado Desánimo
por WebMaster em STUM WORLDAtualizado em 25/02/2013 12:40:41
por Eliana Kruschewsky - [email protected]
Traducción de Teresa - [email protected]
Hoy una nueva clienta me telefoneó, solicitando ayuda. Dijo que tiene 34 años, dos hijas preciosas, un segundo matrimonio, situación económica desahogada, pero que no tiene ánimo para nada en la vida, que nada le da placer y que el matrimonio ya está cayendo en la monotonía como los anteriores. Me dijo todo esto sollozando en un llanto de dolor y tristeza, como si estuviese de luto reciente.
¿Sabes cómo es estar de luto reciente, sin que haya muerte alguna? No quieras ni saberlo.
Hay un gran número de personas que viven como si hubiesen sido contaminadas por un virus, pero un virus energético que afecta a todo lo emocional de esas personas hasta el punto de hacerlas sentirse sin energía, sin ánimo y sin gusto por la vida. No me refiero a la depresión profunda, sino a una situación, aparentemente depresiva, pero de origen vibracional.
Cuando entramos en un ambiente lleno de personas con virus de la gripe, ¿tienes por fuerza que contaminarte también? No. Sólo contraerás el virus de la gripe si tu sistema inmunológico está bajo, abriéndole así una oportunidad. Lo mismo ocurre con nuestro campo vibracional que se compone de energía mental (lo que pensamos), energía emocional (lo que sentimos), energía física (lo que pensamos que somos) y energía espiritual (lo que religa las demás energías). Para que se produzca la contaminación energética, la persona ha de tener un déficit en una de estas cuatro dimensiones de energía.
Estar en déficit energético es más fácil de lo que podríamos suponer. Cuando sentimos miedo, enojo, envidia, celos, cuando nos sentimos contrariados, fastidiados, ansiosos, tristes, agresivos, vengativos; nuestro campo energético se hace vulnerable a energías de ese mismo patrón vibracional.
Nuestro campo vibracional está siempre en intercambio energético, damos y recibimos energías a todo instante, y estos sin siquiera darnos cuenta.
¿Te has sentido mal en determinados ambientes o al hablar con ciertas personas sin que supieses cómo explicar esa sensación extraña que has notado?
Pues bien, lo que sentías era el intercambio energético negativo, y al estar vulnerable tu campo vibracional, es casi seguro que sufriría una contaminación energética. Una vez contraído, ese tipo de virus queda acoplado a tu campo vibracional a través de una de esas dimensiones de energía antes mencionadas, y se crea allí un foco de energía que va a repercutir en síntomas, tanto psicológicos como físicos.
La mayoría de las personas recurren a ayudas de lo más diverso. Eso cuando toman conciencia de que necesitan ayuda. Pero para disolver un foco de energía de baja vibración en tu campo vibracional será necesario un procedimiento asimismo vibracional, fundamentado en frecuencias también vibracionales de alcance electroplasmático, en conjunto con los tratamientos tradicionales físicos y psicológicos.
Para cada tipo de contagio hay tipos de procedimientos vibracionales.
La nueva clienta que mencioné al principio del texto relató que lo ha intentado todo, pero que siente dentro de ella algo que no se mejora con cambios externos. Al fin y al cabo, todo cambio, toda mejora, viene de dentro de cada uno, pero el problema es que la mayoría siquiera sabe por dónde empezar y, lo que es peor, no tiene ni idea de lo que puede realmente estar causando tantos síntomas e incomodidades en su vida y atrayendo situaciones que ocasionan trastornos.
