Una ventana al amor
por Mon Liu em STUM WORLDAtualizado em 16/07/2008 16:15:57
Traducción de Teresa - [email protected]
La felicidad está donde no la ponemos y la ponemos donde no estamos…
¿Cómo definir el amor? ¡La respiración se acelera, el corazón parece salir por la boca! Sentimiento extraño que provoca estremecimientos en la piel… ¿Por qué nos gusta uno y no queremos nada con el otro? El corazón tiene razones que la propia razón ignora… Nadie manda en los sentimientos.
“Que nuestro amor sea eterno mientras dure…” ya lo decía Vinícius de Moraes. Viene con la fuerza de un huracán y ¡ay de quien se le oponga! El alma sólo ve perfección y el día-a-día se hace ligero como el ala de una mariposa. Todo va a flote y la vida es maravillosa… ¡El amor es lindo!
A buscar el verdadero amor ¿quién se resiste? ¡No hay reglas y vale todo! Recuérdese la ley del retorno: todo aquello que plantemos, lo cosecharemos. Es esencial el equilibrio: que sea bueno para ambas partes. Los chantajes emocionales ¿se combinan con esta historia de amor?
El amor es ciego, pero los vecinos, no… ¡Las paredes oyen y se enteran de cada cosa!
¿Y las parejas que gustan de escenas cinematográficas? ¡Demuestran todo su arrebatamiento en público, como si la pasión fuese cosa de vida o muerte!
¿Quién puede con ellos? ¿Y el “superbonder”, que tiene que estar pegado todo el día, olvidando que la vida es más holística? ¡Dejar de tener otros intereses también acaba con el amor!
La competición sólo estorba al romance. ¿Por qué sentirse inferior si ella gana más?
La necesidad de demostrar que se es el dueño de la verdad, o de ser la “gallina del pedazo” sólo da triunfos pasajeros y la sensación de vacío permanece. Hay que dar ocasión para que el amor llame a la puerta. Salir de la superficialidad del “quedar”. Recordar que más vale pájaro en mano que ciento volando.
¿Puede una amistad sincera evolucionar hacia el amor? Tal vez no sea aquel fuego que abrasa por dentro, pero pega mucho más profundo y sin máscaras. ¿Y aquella pasión de adolescentes que prácticamente fueron los primeros novios y se casaron? ¿Es amor o amistad? ¿Y si aparece más tarde el gran amor de su vida? ¡Dejar de vivir una verdadera historia de amor por pura cobardía, por miedo de vivir plenamente! Ya está todo tan acomodado ¿para qué ir en busca de emociones desconocidas?
Tener que recomenzar todo, no saber si saldrá bien. ¿Vale el riesgo?
¿La monotonía asegura el matrimonio? Muchos continúan juntos, pero salen a tomar el aire de vez en cuando. ¿No es peor? Estamos engañándonos y el precio que pagamos en el inconsciente es muy alto.
¿Será que estar solo es tan terrible? La sociedad exige tener novio, prometido, marido, hijos, nietos… Pero ¿ayuda a cuidarlos? ¿Quién es el responsable por tu vida? ¿No es mejor la soledad bien llevada que estar sujeto para satisfacer a otros? Renunciar a tus sueños porque la otra no quiere, no lo soporta, no le da la gana… ¿Y un tipo visual que aprecia el silencio, con una joven auditiva? ¿Sale bien?
Para que un gran amor valga la pena hace falta mucha tolerancia, saber ceder.
Aceptar al otro plenamente con sus cualidades y defectos, ¡como todo ser humano! Perdonar pequeños fallos. ¡No estamos hablando de saltar la valla! Si hay que experimentar otras emociones significa que la relación ya ha dado todo cuanto tenía que dar… ¡Es hora de hacer las maletas y partir para otra!
Tener coraje para encarar la vida de frente. ¡Chutar el palo de la barraca! Intentar. Hacer más que un amor de verano. No hay emoción mayor... Mostrar que la vida está hecha de pequeños detalles… ¡pero tan significativos! Respirar la propia esencia y curtir profundamente todos los momentos tan ricos… ¡Nuestra vida tiene que valer la pena! ¡Ah, el amor es lindo!