Recibí un e-mail de un muchacho diciendo: “la falta de dinero y el peso en exceso están acabando con mi autoestima”. Le expliqué que es lo contrario. La falta de una buena autoestima es la que lo está llevando a esos problemas. Vamos a entender por qué.
Tener una buena autoestima significa gustar de si mismo: respetarse, admirarse, apreciar su propia compañía, aceptarse de forma incondicional. Todos nosotros tenemos puntos fuertes en la autoestima, pero también tenemos puntos débiles. Son áreas donde no conseguimos amarnos de forma incondicional. Guardamos emociones, pensamientos y sentimientos negativos con relación a nosotros mismos que acaban reflejándose en la calidad de nuestra vida exterior.
Problemas como:
Dificultad en decir no e imponer límites / necesidad de aprobación y reconocimiento / no cuidar de la salud (alimentación inadecuada, falta de ejercicios, etc.) / falta de cuidado con la apariencia e higiene personal / descuido con los bienes materiales / timidez / dificultad de cultivar amistades / sentimientos de incompetencia / sensación de no ser bueno lo suficiente / sentirse inadecuado / tendencia a auto desvalorizarse, juzgarse negativamente / no permitir equivocarse / dificultad en perdonarse a si mismo / facilidad en sentirse dolido y ofenderse / miedo de las críticas y juicios / dificultad en tomar decisiones / pesimismo / dificultad de estar solo / tendencia a auto sabotearse para no crecer o mejorar en una o más áreas de la vida/ sentimientos de inferioridad / vicio de interpretar las razones por detrás de las acciones de otras personas/ tener pena de si mismo/ dificultad de encontrar cualidades en si mismo / necesidad de juzgar y hablar mal de los otros / miedo de relacionarse / dificultad de sentirse bien socialmente / celos / necesidad de bebida o drogas para socializarse / tomar todo como personal / sentirse víctima de la vida / dificultad de ver cualidades en terceros y elogiar / sentimientos de no merecimiento (que pueden manifestarse en varias áreas de la vida financiera, relaciones, salud física), etc.
Son todos indicadores de que existen puntos débiles en la autoestima.
Esas dificultades relatadas acaban llevando a otros problemas: vicios de todos los tipos, aumento de peso, depresión, relaciones destructivas, dificultades de crecimiento personal, problemas financieros, pánico, fobia social, etc.
La autoestima es bastante afectada durante la infancia, período en que estamos en formación. Cuanto más recibimos atención en forma de reconocimiento, elogios y afecto, más alimentamos nuestro amor propio.
El niño aprende a amarse y aceptarse a partir del amor externo que recibe de sus padres. Con el tiempo, va madurando y un día aprende que no precisa de ese amor de afuera y que puede amarse a si mismo independiente de fuentes externas.
Sin embargo, cuando el niño es poco elogiado, poco reconocido, tratado con indiferencia, recibe muchas críticas, es abandonado y rechazado, comienza a interpretar inconscientemente que hay algo que está mal en él, que no es digno de recibir amor y pasa, entonces, a desarrollar problemas de autoestima. El niño pasa a no conseguir amarse, pues no aprendió como hacer eso y desarrolla auto rechazo y abandono. Se vuelve así un adulto que no maduró de forma plena emocionalmente y que vive en busca del amor externo, reconocimiento y aprobación de terceros para sentirse bien.
Padres con buena autoestima consiguen darle al niño el alimento emocional que precisa durante la infancia. Pero la mayoría de los padres carga muchas dificultades emocionales y por eso no consigue suplir la carencia de los hijos. Y así quedamos marcados.
Felizmente esas marcas emocionales tienen cura. Caso contrario, seríamos rehenes de un pasado que no tenemos como cambiar. LA *EFT (técnica de auto limpieza emocional, fíjate como recibir un manual gratuito al final del artículo) es una excelente herramienta para limpiar las memorias negativas del pasado, recuerdos de rechazo, miedo, abandono y todo y cualquier tipo de pensamiento o sentimiento ligados a patrones de autoestima baja.
Con la autoestima más elevada, nuestra vida se vuelve mucho mejor. Es más fácil decir no e imponer límites, lo que nos hace construir amistades más saludables pues conseguimos hacernos respetar. Lo mismo es válido en la cuestión de las relaciones amorosas. Además de volverse mucho más fácil atraer una persona con un patrón emocional saludable.
Más autoestima tiene que ver con más autoconfianza. El miedo del juicio y de las críticas disminuye y así podemos seguir nuestro verdadero camino, independiente de lo que los otros crean. A medida que la autoestima se eleva, nos volvemos más optimistas. Se vuelve más fácil confiar en la vida y emprender sea lo que sea.
Si hubiese un aumento considerable en la autoestima general de la población, veríamos caer drásticamente los niveles de consumo de bebidas alcohólicas. El alcohol es usado como una muleta para sentirse mejor socialmente y también para amenizar temporariamente el sufrimiento interior que cargan las personas. Veríamos aún una disminución de todos los tipos de vicios.
Con la mejora de la autoestima, muchos comenzarían también a adelgazar. No porque harían un esfuerzo para eso, y sí, porque el deseo de comer en exceso simplemente disminuiría. La comida también es utilizada como una muleta. El placer que nos proporciona enmascara temporariamente el sufrimiento latente que acumulamos. Cuando estamos más en paz, libres de nuestra negatividad, además de reducir el impulso de comer más de lo que el organismo precisa, disminuyen también las ganas de alimentarse de comidas calóricas como dulces y frituras y aumenta el deseo de comidas saludables.
Con una autoestima mejor es mucho más fácil crecer profesionalmente y prosperar, pues los procesos inconscientes de auto sabotaje que nos llevan al autocastigo y pérdida de oportunidades disminuyen.
Con más autoestima, aumenta también el sentido de merecimiento y nos volvemos mejores recibidores, sintiendo que somos dignos de tener y recibir amor, confort, abundancia material, salud física. Las ganas de cuidar de si mismo se vuelven algo natural: hacer ejercicio, dedicar tiempo al autoconocimiento, ir al dentista… La pereza y la falta de ganas se van, dando lugar a la alegría y energía para vivir la vida.
Resumiendo, cuidar de la autoestima, es todo y un poco más.André Lima - EFT Practitioner. *EFT - Emotional Freedom Techniques
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