Hace tres semanas estoy recibiendo e-mails desesperados.
Son, la mayoría, de mujeres que fueron cambiadas por otras. Casamientos de 10 años o más destruidos por la repentina noticia de que su pareja tiene otra. Repentina noticia? Es eso que toca mi conciencia. Relaciones de tantos años no pueden así, en un pase de magia, ser desbaratados. Lo mínimo, es que esta convivencia ya venía recibiendo señales de que algo no iba bien.
Tiene de todo los e-mails: mujeres en tal desespero que están recurriendo a la magia negra; otras pensando en matarse; otras perdiendo peso y vitalidad al punto de no tener más fuerzas para el trabajo, ni disposición para la vida; otras contratando detectives para “descubrir todo” y procesar al ex por perdidas y daños. Hay una mujer que se está internando para hacerse una cirugía plástica da cabeza a pies. No recibí ningún e-mail diciendo:
- Voy a intentar entender lo que está sucediendo y procurar recibir con calma y serenidad la lección que la vida me quiere ofrecer con toda su generosidad.
- Voy a buscar alguna ayuda para aprender a no morir por dentro cuando algo muere fuera de mi.
Ayer escuché decir que una mujer fue asesinada por la ex-mujer del ex-marido o ex-enamorado de ella (no entendí muy bien). El escenario de la desgracia había sido una cafetería famosa aquí en San Pablo donde criaturas acostumbran comer con sus padres y amigos a la hora de los refrigerios.
Claro que el clima energético del Planeta no está pacífico. Y eso se refleja en todos los seres vivos. En Chile un tremendo terremoto sacudió al país algunos días atrás, en California otro temblor de tierra, en el Brasil el desagüe que abrió el gobierno para mostrar aquello que ya todos sabían…
Es necesario tener mucha fe y elevación espiritual para entender que todo eso es parte de una limpieza planetaria que, según dicen, sólo está comenzando y que se va a destara hasta el año 2012. No se. Siento simplemente que algún portal fue abierto y que todo será poco a poco cuestionado. Los vientos del cambio van a soplar sobre todos los corazones.
Tal vez eso explique, en parte, esta serie de mujeres abandonadas por sus maridos, enamorados, compañeros, parejas. Este desespero colectivo donde no encontramos en nuestros líderes la necesaria confianza para vivir nuestros conflictos personales.
Los gobernantes de este país también nos traicionan. Y no fueron sólo las mujeres. Fue el pueblo todo. Como dice una gaucha que encontré en la sala de espera do aeropuerto de Porto Alegre:
- La gente va para las elecciones pensando que ahora si va a ser bueno y no demora nada cuando percibimos que, en verdad, nos juntamos a un extraño, no cuidamos de la relación y un día vemos caer la casa.
Es la misma relación que tenemos en nuestras parejas amorosas. La gente se casa en un clima de “flores color de rosa” y se olvida de regarla todos los días. Va descuidando, va dejando a la hierba dañina minar, sofocar, matar el diálogo, el afecto, la compasión. Y cuando abre los ojos, el jardín murió y no quedó ni una planta con vida. Ahí es que parte a correr con el corazón revuelto, lleno de odio, rabia, aflicción y angustia. Y es cuando quiere recuperar el tiempo perdido en un sólo día. Eso no existe, no es posible. Vida la gente vive en cada segundo. Pasado es un tiempo que no vuelve más.
Infelizmente nosotros no tenemos el hábito de cuidar de lo que es nuestro. En todos los sentidos. Entregamos nuestro país al primero que pasa, entregamos nuestro corazón al primero que sonríe para él. Después, ponemos todo en las manos de Dios y lloramos desesperados cuando descubrimos que Dios no es bueno. Dios es justo.
Izabel Telles é terapeuta holística e sensitiva formada pelo American Institute for Mental Imagery de Nova Iorque. Tem três livros publicados: "O outro lado da alma", pela Axis Mundi, "Feche os olhos e veja" e "O livro das transformações" pela Editora Agora. Visite meu Instagram. Email: Visite o Site do Autor
Publicado por Izabel Telles
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