Aprendí, después de mucho sufrir, que la vida es muy diferente de cómo yo la encaraba. No sabía interpretar correctamente las advertencias y actuaba, por lo tanto, de forma equivocada teniendo que pasar por tropiezos.
- Primero: yo no sabía que todo es Causa y Efecto. No es Dios que lo quiere así. Ésta es la Ley Básica del Universo.
- Segundo: lo que yo recolectaba era consecuentemente fruto de mis pensamientos y actitudes.
- Tercero: fuimos nosotros quienes elegimos vivir en el medio en el que vivimos. Las adversidades necesitan ser entendidas, aceptadas y aisladas.
- Cuarto: que siempre voy a encontrar los desafectos de vidas pasadas, que son karmas a ser resueltos.
- Quinto: lo que no me gusta de las personas es EXACTAMENTE LO QUE MÁS NECESITO APRENDER.
- Sexto: nadie necesita de religión para aprender a comportarse. Necesita de control y disciplina.
- Séptimo: el mal es un estado de energía y no un sujeto con cuernos y cola.
- Octavo: yo proyecto lo que soy.
- Noveno: mis emociones son los vectores responsables por mi felicidad ó tristeza.
- Décimo: finalmente sé que VOY A VOLVER A ESTE PLANETA HASTA RECORRER TODO EL ZODIACO.
Por lo tanto, necesito ser lúcido en esta vida si quiero tener la otra igual, o mejor. Todo va a depender de lo que siembre. De cómo actúo con mis emociones. De cómo me comporto con los bienes materiales. O tú crees que es por casualidad que existen tantas desigualdades en nuestro medio….
Así, nuestros desafectos necesitan ser encarnados como nuestros profesores. Tenemos que aprender con ellos. Son nuestros espejos. Creelo, es así. Son NUESTROS EJEMPLOS a ser seguidos, para un lado o para el otro. Lo que ellos proyectan, nosotros también lo proyectamos. Es por eso que no nos gusta, son muy parecidos a nosotros. Aplicamos las mismas reglas en nuestras actitudes. Cuando aprendí eso me asusté y no quise creer que yo era lo que era…
Nadie llega hasta nosotros por casualidad. Y, hazte un favor a ti mismo, lleva esta afirmación muy en serio. En cada persona siempre existe un mensaje embutido. Los seres que nos agradan también necesitan ser entendidos, tanto cuanto aquellos que queremos odiar y desterrar de nuestras relaciones. Las personas de las que gustamos son complementos, aquellas de las que no gustamos son Profesores.
Si tú crees que esta vida aquí es el comienzo y el fin, vas a encarar siempre las cosas entendiendo que DIOS LO QUISO ASÍ. Es errado pensar así. Dios no quiere nada. Él está bien. Somos nosotros los que necesitamos aprender. Nosotros necesitamos encontrar el eje de nuestro control emocional.
Dios y el Universo son una sola cosa. Nosotros hacemos parte de eso, por lo tanto sólo necesitamos aprender a ser dios.
Determina a partir de la lectura de este texto que tú eres tu Dios. Vas a sorprenderte con lo que va a suceder con tu vida…Como mínimo se van a acabar las disculpas, justificativos y explicaciones por tus fracasos.
Cuidate. A partir de ahora seamos, todos, un Dios sabio. Sólo querer y buscar eso ya ayuda mucho.
Saul Brandalise Jr. é colaborador do Site, autor do livro: O Despertar da Consciência da editora Theus, onde mostra através das narrativas de suas experiências como extrair lições de vida e entusiasmo de cada obstáculo que se encontra ao longo de uma vida. Email: [email protected] Visite o Site do Autor