Traumas, Inconformismos, Emdr, Genosociogramas, Técnicas Chamánicas Y Viajes Extra-Físicos
Una situación inesperada puede llevarnos a un estado de shock colocando partes de nuestra existencia suspendidas en el aire. Entonces, continuamos nuestra andadura, dejando “atrás” pedazos de nuestra totalidad.
Cuando no nos conformamos con una situación, ya sea por el miedo, ya por el dolor, es señal de que no se ha vivido el hecho en sí, en su totalidad. Éste apenas ha sido vislumbrado por el receptor debido a la dimensión y al susto de cómo se ha presentado el acontecimiento. Lo que suele suceder como defensa automática por la supervivencia es una especie de negación del momento, se entra en choque con el mismo, pero no se vivencia el acontecimiento en su real dimensión.
En la medida en que se niega un suceso, se adquiere el trauma, siendo que esta situación emocional puede permanecer orbitando en la persona de modo indefinido.
Lo triste de todo eso es que muchas veces se producen traumas en grupos y familias, y al no tener condiciones emocionales para entrar en contacto con el dolor, se quedan con el acontecimiento de modo subliminal, alcanzando por extensión a toda la familia y, peor, durante eras y eras de modo transgeneracional. Todo permanece en el liminar de la consciencia de todos y la forma violenta en como se repite el lance es enorme, muchas veces cambiando de cara, pero con el mismo contenido, siendo que en la cabeza de todos permanece como algo dual, en una especie de inconformismo por lo que no se ha podido evitar.
Hay un ejemplo muy interesante que ilustra este hecho: Un chico, con un tumor en la cabeza, fue a intentar comprender los aspectos emocionales que envolvían esta dolencia que lo había acometido. Durante el tratamiento, se le preguntó sobre su historia familiar. Reveló que venía de una familia de peluqueros y que él también lo era. Recordó también que su origen familiar venía desde los tiempos de los vikingos.
En ese momento del tratamiento, mediante el genosociograma se le preguntó qué solían hacer los vikingos en la época en que habían existido. Prontamente el muchacho contestó:
“Bueno, ellos eran los maestros de las espadas y las utilizaban para descepar las cabezas de los enemigos… ¡mira qué horror!”
En ese momento, algo mayor y transgeneracional se descortinó dentro de él. Una culpa no expresada atravesaba las generaciones en todo su ambiente familiar, tanto es así que la mayoría trabajaba para adornar/reparar cabezas siendo peluqueros, pero por lo visto aún no había sido suficiente para que tuviese lugar la expiación… Él tenía un tumor… ¡Y en la cabeza!
A partir de ese momento de lucidez, el muchacho decidió cambiar todo el sistema perceptivo de su pasado y empezó a diseñar un futuro mucho más prometedor para sí mismo. Se recuperó, cambió totalmente de profesión y literalmente se desgajó de un sistema silencioso que mantenía a esa familia en sufrimiento. Liberó también a las futuras generaciones, para que creasen nuevas realidades creativas de modo mucho más libre que lo que él y sus antepasados habían podido vivenciar hasta entonces. Se desobligó también, y asumió su propia existencia sin pendencias. Se liberó de una cuestión traumática transgeneracional.
Muchos chamanes hacen un tipo de viaje astral llamado Rescate del Alma; dicen que un pedazo del alma de la persona ha quedado preso en algún lugar-tiempo debido a alguna circunstancia de vida y ellos, los chamanes, van en busca de esos pedazos, siendo que cuando se produce el rescate, soplan en lo alto de la cabeza y en el corazón de la persona, devolviendo el pedazo del alma.
Varias personas me han preguntado si, por medio de una proyección astral consciente, se pueden encontrar explicaciones sobre el motivo por el cual determinados tipos de encuentro se producen aquí en este plano de este o de aquel modo. Mi respuesta es siempre sí, no obstante, no es así tan fácil obtener lucidez sobre los hechos.
El buscador deberá, en primera instancia, observar si existe algún nudo emocional fuerte estorbando lo que se suele llamar “el encuentro inmediato”, en que la intención proyectiva lleva a cabo la acción del conocimiento.
Muchas veces estamos junto a alguien debido a algún acontecimiento traumático mal resuelto que por algún motivo se “casa” con el de la otra persona que tiene un orden similar.
Aquí está otro ejemplo para que quede más claro:
Vamos a figurar una situación en que un niño está presente en la escena en que un hombre pega violentamente a una mujer. En su comprensión, el terror y la posibilidad de exterminio son enormes. Como defensa, esta criatura crea internamente una situación mágica para solucionar ese acontecimiento tan irracional según su mundo interno y, debido a sus experiencias anteriores fantasea, como solución, algo que sobreviene de manera perfectamente matemática; en este caso, ese crío decide portarse totalmente cuerda y pasivamente ante todo y ante todos, suponiendo que de este modo jamás atraerá ese tipo de violencia hacia sí.
En ese exacto momento de solución, su mente borra el acontecimiento y, juntamente con él, partes de su autonomía y poder personal también se borran, pero el trauma continúa coexistiendo, orientando la conducta de ese crío, siendo que en su vida adulta podrá atraer compañeros y situaciones que todo el tiempo sometan a prueba su mandato anterior e interior, mandato este proveniente de un estado de shock no resuelto.
Situaciones traumáticas, cuestiones mal resueltas que permanecen al margen de la consciencia perturbándonos, son susceptibles de ser totalmente reprocesadas cuando hacemos una pesquisa enfocada y competente.
El trabajo con EMDR ayuda sobremanera a que esas escenas o situaciones perturbadoras que vivenciamos sean totalmente redimensionadas. En el EMDR los hemisferios cerebrales, por una metodología propia se comunican, trayendo y reprocesando todo el material simbólico, emocional y traumático.
Es tan eficiente que en los EUA personas que han pasado por algún tipo de violencia, por ejemplo, y hacen EMDR antes de ir al jurado, ya no pueden ir, porque muchas veces el acontecimiento en sí pierde el sentido de exposición. Los trabajos con genosociogramas también son muy eficaces para estas situaciones.
Evita sufrir indefinidamente y tómate en serio. Tu vida no puede y no debe ser un ensayo general. Tú eres válido y mereces ser feliz.
Silvia Malamud é colaboradora do Site desde 2000. Psicóloga Clínica, Terapias Breves, Terapeuta Certificada em EMDR pelo EMDR Institute/EUA e Terapeuta em Brainspotting - David Grand PhD/EUA.
Terapia de Abordagem direta a memórias do inconsciente.
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Autora dos Livros: Sequestradores de almas - Guia de Sobrevivência e Projeto Secreto Universos