Pasan las vidas, pasan las eras, sin embargo, Jesús continúa firme, guiando los rumbos de la humanidad.
A veces, la vida en la Tierra parece un caos. Con todo, esto no es más que apariencia transitoria, pues hay un control total por detrás de las situaciones.
La gente dice que la vida ha empeorado, y que se cometen muchos crímenes por ahí…
Sabemos que el sufrimiento es real, pero también sabemos que Jesús y otros luminares siderales están actuando.
Las noticias y los acontecimientos son tristes, pero hay un Amor Mayor, Omnipresente e Interpenetrante, actuando en los bastidores de los corazones humanos.
Quien trabaja en el Bien tiene que ser optimista por naturaleza. Y hay varios motivos para ello: si hay sangre derramándose, también hay ángeles cantando; si hay desorden e injusticia en la Tierra, elevad los ojos al Espacio y acordaos de Jesús (y recordad que todos somos inmortales).
La sangre se derrama por ahí, pero nadie muere, pues el alma no sangra nunca.
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A decir verdad, el alma no nace ni muere. Ella solo entra y sale de los cuerpos durante los ciclos evolutivos, que regulan el desarrollo de las conciencias en todos los lugares del Cosmos.
Las buenas personas no pueden entrar en el ritmo de la violencia alucinante ni en la danza inconsecuente de los chismorreos y discusiones funestas. Vibrad PAZ, LUZ y AMOR en el alma, aunque todo parezca difícil y sin solución.
En la vida, hay situaciones kármicas – que van y vienen – siempre bajo el control preciso de los Ingenieros Siderales que regulan el desarrollo de las varias humanidades que habitan en los diversos orbes esparcidos por la vastedad sideral…
La Tierra es un planeta bastante pequeño en el contexto evolutivo del Universo, y la problemática humana nada significa para otras razas que son luz pura.
Mientras los terrícolas comentan sobre la sangre vertida por la inconsecuencia humana, hay seres de luz pura invitando a la gente a unirse a ellos en los cónclaves siderales que deciden la evolución de los seres. Mientras el dolor fustiga a los hombres terrestres, hay seres de luz pura vibrando, invisiblemente, PAZ, AMOR Y LUMINISCENCIAS INDESCRIPTIBLES.
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En planetas fustigados por el dolor de la violencia, seres como Jesús, Krishna, Gautama, Lao-Tse, Hermes Trismegisto, Ramakrishna, y otros, son puntales espirituales que canalizan EL AMOR MAYOR QUE GOBIERNA LA EXISTENCIA hacia los lugares más pobres del Universo.
Hay planetas más avanzados y más atrasados que la Tierra. Con todo, el habitante terrícola ya ha sobrepasado todos los límites de la tolerancia evolutiva de una raza simple. Por eso el dolor lo persigue sin tregua.
Nuevamente advertimos: pensad siempre en Jesús, en Krishna, y en otros luminares espirituales. No seáis conniventes con la liviandad ni con la hipocresía. No miréis la violencia con ojos de terror, miradla con ojos virtuosos de compasión.
No comentéis sobre el infortunio de otros, no os entrometáis en la tragedia ajena. Tened responsabilidad y grado de consciencia.
No dejéis que la frivolidad de la lengua comande vuestra mente. No permitáis que el desequilibrio dome vuestro corazón. No deis rienda suelta a la infelicidad.
Trabajad rectamente en la vida. Aprovechad las oportunidades que la vida os da y funcionad correctamente. Si hay violencia y sangre chorreando en la televisión, también hay gente invisible trabajando más allá de la muerte.
Hay tragedias que están sucediendo ahora mismo, en varios lugares; pese a ello, hay buena música surgiendo, para estimular el alma a vencer las probaciones del camino.
En resumen: ¡Jesús está trabajando!
Por favor, no lo olvidéis. No dejéis que la maldad humana aparte vuestros corazones de los buenos principios.
Paz y Luz.
- Ramatís y André Luiz -
(Recibido espiritualmente por Wagner Borges – Texto extraído del libro Viaje Espiritual – Vol. 3 – Editora Universalista – 1998.)
- Nota de Wagner Borges: recibí este texto en la pizarra del aula, durante una charla con cerca de 170 personas, en el IPPB, en São Paulo. A continuación, uno de los espíritus de la Compañía del Amor* complementó esos escritos con lo siguiente:
Las vidas pasan, las eras se suceden, pero una cosa nunca cambia: en alguna época, el Amor Mayor capturará vuestros corazones y os encantará con la dulce presencia de una Paz tan grande, que ni siquiera vosotros mismos podréis creer que un día habíais vivido y hablado de violencia, en un planeta atrasado, allá en los confines de la Vía Láctea.
- Nota del Texto:
*La Compañía del Amor es un grupo de cronistas, poetas y escritores brasileños desencarnados que me transmiten textos y mensajes espirituales desde hace varios años. En su gran mayoría son poetas y de muy buen humor.
Según ellos, sus escritos son para mostrar que los espíritus no son nubecitas o lucecitas parpadeando en un plano espiritual inefable. Ellos quieren mostrar que continúan siendo personas corrientes, solo que viviendo en otros planos, sin cargar con el cuerpo denso. Quieren que los encarnados sepan que no solo hay vida después de la muerte, sino además mucha alegría y amor.
Sus textos son sencillos y directos, buscando el corazón del lector.
Para más detalles sobre el trabajo de esa pandilla maravillosa, ver los libros "Companhia do Amor - A Turma dos Poetas em Flor – Volumes 1 e 2" (“Compañía del Amor – La Pandilla de los Poetas en Flor – Volúmenes 1 y 2”) – Edición independiente – Wagner Borges, y su columna en el Website del IPPB (que es una de las secciones más visitadas de ese Sitio): link
Publicado dia 6/1/2011 1:06:47 PM em STUM WORLD
