Ya debes haber oído aquella metáfora del vaso con agua hasta la mitad, que nos invita a reflexionar sobre lo que vemos: ¿medio vaso lleno o medio vaso vacío? Bien, la idea es averiguar se tenemos observado las circunstancias a partir de lo que está faltando o a partir de lo que ya existe. Y pretendo seguir por esta línea, al hablar de estar o no viviendo una relación actualmente…
Considerando que fue establecido el Día del Soltero, partimos del principio de que hay algo a ser conmemorado por quien está solo. Apenas por esta razón, ya tenemos un ángulo positivo bajo el cual puede ser vista la cuestión. Pero sabemos que la cuestión es más profunda. O sea, a pesar de que algunas personas realmente sepan aprovechar la soltería, otras, sin embargo, se sienten profundamente angustiadas al constatarse solas.
En primer lugar, pienso que, para quien quiere vivir un gran amor, aprender a estar soltero y feliz de verdad es fundamental! Algo más o menos como saber apreciar una música justamente por conocer el silencio. O conseguir sentir el calor del sol sobre todo por ya haber sentido su ausencia. En fin, lo que quiero decir es que no da para aprender a entregarse y a valorizar una relación de gente grande si antes no sabes vivenciar tu soltería. Son dos lados de la misma moneda! Cuestiones inseparables.
Un lado jamás será completamente bueno (incluyendo todas las particularidades de una relación), si el otro no ha sido vivido de forma intensa, entera y profunda. Estar soltero es una invitación al deleite de conocer, sea a ti mismo o al otro, conocer lo nuevo, lo diferente, las hasta entonces inexistentes posibilidades. Estar soltero es vivenciar un tiempo de recrear, recomenzar, renovar, renacer.
Mientras tanto, infelizmente, muchas personas solo consiguen ver lo que les falta sin darse cuenta de que la falta es de ellas mismas, de lo que podrían ser y volverse como seres singulares para que, cuando pares, supiesen que no vale la pena tantas implicaciones sin razón, tantas provocaciones irrelevantes que no llevan a nada y solo destruyen momentos que podrían ser imperdibles.
La soltería es una lección imprescindible. Es como el intervalo entre una película y otra para el pochoclo y el pipi. Y no hay nada mejor y reconfortante que satisfacer estas pequeñas necesidades o deseos. El problema es que mucha gente solo consigue reclamar y lamentarse y victimizarse, haya lo que haya, y ni siquiera notarlo. Cuando está relacionándose, pelea, se pone impaciente, saca todos sus demonios y cree que el otro tiene que soportar todo como prueba de que lo ama de cualquier manera. Y cuando está soltero, se siente el último de los solitarios, abandonado, buscando lo que hay de malo consigo, día y noche.
En fin, una completa perdida de tiempo. Un total desperdicio de vida, placeres, alegrías y realizaciones sin conseguir apreciar un lado de la moneda, simplemente desvalorizando el otro lado. Sin permitirse jamás un noviazgo consigo mismo -que nada más es que la soltería- no conseguirá permitirse un verdadero noviazgo con el otro.
Mi sugestión es para que tú, al estar soltero, consiguas vivenciar de hecho la mejor de las realidades: estar en aquel momento en que se enamora a la vida, seguro de que lo mejor está por venir. Pero recuerda que esto no significa que la felicidad está por llegar. Ella ya está. Estar soltero o estar comprometido, repito, son dos vías de un mismo camino. Y se cada paso, sea por una vía o por la otra, no es dado con la seguridad de que ambos reservan alegrías y tristezas, nunca conseguirás sentir esa felicidad, simplemente porque vas a pasarte la vida esperando por lo que podría ser, pero no es!
Rosana Braga é Especialista em Relacionamento e Autoestima, Autora de 9 livros sobre o tema. Psicóloga e Coach. Busca através de seus artigos, ajudar pessoas a se sentirem verdadeiramente mais seguras e atraentes, além de mostrar que é possível viver relacionamentos maduros, saudáveis e prazerosos.
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Publicado dia 8/28/2011 9:43:31 AM em STUM WORLD
