El sonido atronador del Gran Espíritu* barre las añicos de la noche oscura del ego de los hombres…
Hace al niño interior reír…
Hace al corazón viajar en las alas del Amor…
Hace al viento de la Sabiduría orear las conciencias…
Hace a la Luz descender a los abismos tenebrosos, para que hasta los seres sombríos sean favorecidos con toques de Paz…
Hace a los ancianos mirar las estrellas, con lágrimas de admiración…
Hace a las manos de los curadores convertirse en pequeños soles…
Hace al espíritu del águila arrebatar el sufrimiento de los corazones y conducirlos a lo Alto, por el poder de transformación del Amor…
Hace al espíritu de la lechuza mirar la verdad de cada corazón y, en silencio, comunicar la Sabiduría del Eterno…
Hace al espíritu del cuervo traer el mensaje de los amigos espirituales, que hoy viajan por las praderas celestes…
Hace al espíritu del sol brillar en la noche oscura de la ignorancia…
Hace al espíritu de la luna inspirar la suavidad de las meditaciones…
Hace suceder el Amor más lindo de todos…
Ah, el sonido atronador del Gran Espíritu es la matriz de la música…
Y, cuando el corazón sintoniza la Luz, escucha el gran murmullo creativo en todas partes…
Ese sonido, que nace en el silencio del Eterno y que vibra en los toques del tambor, en las notas de la flauta, y se expande en los teclados, es el mismo sonido de las pulsaciones del Gran Corazón de Él, el Gran Espíritu.
¡Es el Om… Es el Axé… Es el Amén… Es el How!
Es la levedad que alivia el fardo…
Es el abrazo sutil de Él en cada Ser…
Es aquello que no se explica, solo se siente…
P.D.:
¡El Padre-Primero es el Gran Chamán!
Él es el Gran Sanador y Señor de todas las veredas…
Él es el Gran Concertista Cósmico, que solo se revela al niño interior…
Él, el Anciano de los Días, que creó el espíritu de la música y le ordenó que bajase entre los hombres para inspirarlos en la jornada…
Sí, Él, Creador de la sinfonía de la vida universal y del sonido de las esferas…
Él que brilla más que todos los soles juntos y que habita en el corazón de todos los seres… El Gran Espíritu, que hace sobrevenir el Amor más lindo de todos.
El tambor… La flauta… El teclado… El hombre… Todo es música de Él.
Y toda sanación es de Él, el Padre-Primero.
Él, a quien todos nosotros damos las gracias…**
Paz y Luz.
Wagner Borges – maestro de nada y discípulo de cosa alguna.
- Nota:
*Gran Espíritu – en la cosmogonía chamánica de los diversos pueblos indígenas es el Poder Generador de la Vida; el Padre-Primero; Manitú (llamado así por los indios algonquinos, de América del Norte); Tupán; el Todo; Dios.
**Estos escritos se hicieron en el IPPB, durante una presentación musical de mis amigos Aurio Corrá y Vítor Hugo França. Mientras ellos presentaban el espectáculo nueva ola/chamánico (y encantaban al público asistente), yo procuré captar el clima espiritual del momento y registré lo que mi corazón sentía. Y, después, leí el texto a las 80 personas presentes, todavía bajo la emoción del lance.
Observación: Ese mismo día fue lanzado el CD O Segredo da Coruja (El Secreto de la Lechuza) – nuevo trabajo de Aurio Corrá – con la participación de Vítor Hugo França en la percusión chamánica – que puede ser adquirido en el IPPB.
Y para los lectores que gustan de temas chamánicos, propongo una visita al Website de nuestro amigo Vítor Hugo França (participante del Grupo de Estudios y Asistencia Espiritual del IPPB – y responsable por la parte administrativa), que hace un trabajo de esclarecimiento muy bueno en esa área. Su dirección es link
Finalizando estos escritos, dejo a continuación otro texto, que me vino a la memoria, a saber por qué…
VIAJE ESPIRITUAL EN EL RÍO DE ESTRELLAS DE UNA CRIATURA
En la quietud de mi estancia, en el silencio de la madrugada, tras una irradiación de energías en favor de la humanidad, surgió un espíritu chino y me dijo lo siguiente:
Pequeño mío, tu casa está llena de vibraciones saludables. Es hora de escribir aquella canción. La melodía del chi* guiará tus escritos. La luz danza con el corazón amigo. Permanece pleno, íntegro de tu propia espiritualidad. Haz la canción y agradece al Tao**.
Inspirado por él, tomo pluma y papel.
Mientras escribo, me acuerdo de mis dos estrellitas: Heleninha y María Luz. ¿Podrán ellas, un día, cuando sean adultas, comprender esta canción hecha por su padre en mitad de la madrugada, mientras un espíritu chino reía aquí a un lado?
En el cielo de los sueños,
La criatura vio el río amarillo pasando
Dentro del corazón.
Serpenteaba por entre las cañadas afectivas…
Hasta llegar al mar de la tranquilidad.
Arriba, mil brillos tocaban el cielo.
Ella sonrió, y algo mágico sobrevino:
Pececitos de colores salieron de las aguas,
Y se pusieron a jugar con ella.
Una tierna melodía llenó el aire
Y trajo el dulce sonido de la flauta.
En el fondo del río, ella avistaba
Billones de estrellas brillando.
Cuando se zambullía, el río se volvía cielo,
Y ella volaba contenta.
Al son de la flauta, ella veía delfines y
Galaxias danzando en la luz…
Ella soñaba y sonreía, deslizándose en las ondas…
Nadaba y volaba alegre en medio
De las estrellas y los pececitos de colores.
Ella sabía que era un sueño, pero no le importaba.
Lo que importaba era estar en el corazón.
El son de la flauta era su compañero de viaje…
Ella nadaba en las aguas del corazón y volaba
En el cielo de la canción.
Allí, ella conocía la verdad:
Muchos sueños no son sueños,
Son viajes y canciones espirituales.
P.D.:
El mundo continúa girando, el tiempo sigue, y la vida continúa, en la Tierra y en el más allá…
Por aquí, mientras muchos se engolfan en energías viscosas y actitudes mezquinas, algunos continúan insistiendo en vibrar atmósferas creativas en medio de la turbulencia de los hombres.
Algunos emanan oleadas de odio y cavan el propio foso del dolor en las cañadas del corazón… Mientras otros emanan ideas espiritualistas, pues es preciso cantar, amar, sonreír y seguir…
(Estos escritos van dedicados a mis padres, que, un día, soñaron con una criatura en un río de estrellas. Al son de una flauta, ellos trajeron la criatura al mundo, la educaron y le dijeron: Hijo, sé virtuoso. Haz el bien. ¡Nunca abandones tus objetivos y sé digno en aquello que elijas!)
Paz y Luz.
- Wagner Borges –- Notas:
*Chi – del chino – fuerza vital; energía.
Observación: Dentro de las enseñanzas taoístas, la fuerza vital es polarizada en la naturaleza de las cosas en dos aspectos fenoménicos: el Yin y el Yang, las alternancias del Chi, las polaridades de la energía.
**Tao – del chino – “El Camino”; “la esencia de todo”; “El Todo”.
A decir verdad, el TAO no puede ser descrito o explicado por palabras humanas. Por eso dejo a cargo del sabio Lao-Tse una explicación más apropiada:
“Hay algo natural y perfecto, existente antes de Cielo y Tierra.
Inmóvil e insondable, permanece solo y sin modificación.
Está en todas partes y nunca se agota.
Se le puede considerar la Madre de todo.
No conociendo su nombre, le llamo TAO.
Obligado a darle un nombre, lo llamaría Trascendente”.
- Lao Tse – en “Tao Te Ching” – China; siglo VI a.C.