Ah! No consigo dar cuenta de todo, me siento sobrecargada, y en medio de todo eso ¿dónde estoy yo?
Vivir postergando las cosas hace que pierdas tu espontaneidad, o sea, dejas de ser tú misma, pues vives siempre conectada en un momento que no existe. Tu mente te hace exigencias cada segundo, y así entablas una guerra mental buscando millones y millones de disculpas para dejar para más tarde aquello que tienes que hacer.
Nuestro papel es implicarnos con la vida, participar en ella, aprovecharla y divertirnos.
Tenemos una fuente interior que nos provee de todo eso, pero ella ha de ser escuchada, y una mente atiborrada de ruidos, o sea, de cosas para hacer, no permite que esta conexión se produzca, y así dejas de disfrutar de lo mejor que la vida puede proporcionarte. A esta fuente inagotable que hay dentro de nosotros, podemos darle el nombre de intuición, basta con pedirlo y ella nos da respuestas inmediatas y llenas de sabiduría.
La intuición está directamente ligada al silencio y la paz interior y esto solamente se conquista cuando no aplazamos las cosas. Esto se llama vivir en el momento presente.
La intuición te ofrece muchos beneficios, entre ellos:
- Aprenderás a calmar tu mente, a estar en el momento presente;
- Eliminarás lo negativo de tu vida, pues la confianza queda restablecida;
- Prestarás más atención a las señales que la vida te da;
- Notarás lo que es tener sincronía.
Tu vida exterior puede ser el reflejo de tus órdenes interiores, para ello basta con poner en marcha tu poder personal y tener claramente esquematizado lo que deseas para tu vida.
En los momentos en que no decidimos ni elegimos lo mejor para nuestra vida, permitimos que otros hagan la elección por nosotros, y entonces la infelicidad y la insatisfacción se instalan.
Haz una lista de todo lo que has venido aplazando en tu vida y establece prioridades. Tu lista puede contener tareas diarias o incluso planes futuros, pero el paso inicial de resolver una cosa por día hará que te vuelvas cada día más presente, principalmente en tu vida. Pasarás a ser tú mismo en cada situación, las frustraciones irán siendo exterminadas una a una y las exigencias, tanto personales como de otros serán, entonces, eliminadas. Únicamente así habrá un progreso personal y percibirás que ya no estarás al mando de todo. Estarás, sí, abierto y listo para recibir lo mejor que tiene la vida para ofrecerte.
La Radiestesia, por medio de la Mesa Radiónica, permite identificar los bloqueos energéticos que te hacen repetir situaciones como la que hemos referido, de aplazar las cosas y perder la espontaneidad.
Recientemente atendí a una chica que vive con este enorme fantasma en su cabeza; aplazaba todo y se sentía exigida por la vida y por los demás, notaba que hasta aquel momento no había conquistado nada; por muchos incentivos familiares y apoyo de amigos que tuviese, ella nunca tomaba la iniciativa de empezar y concluir algo en su vida, su tristeza y frustración personal eran enormes, y ya no sabía qué más hacer para desvincularse de tal situación.
Me relató todo lo que estaba dejando de realizar en su vida y advertí en todas las escenas un punto en común, el aplazamiento constante. Le dije que había un bloqueo original energético que le hacía adoptar siempre la misma actitud en diversos momentos de su vida, y que al llevar a cabo el equilibrado de sus frecuencias, eliminaríamos tal bloqueo.
La fecha identificada como del bloqueo fue el momento de su nacimiento. Le dije que había algún acontecimiento significativo ocurrido en ese momento. Ella de pronto confirmó que su parto había sido muy complicado, pues tenía el cordón umbilical enrollado al cuello y su nacimiento se prolongó mucho más de lo previsto. Entonces le comenté que, identificado el bloqueo inicial, íbamos a eliminarlo por medio de la Mesa Radiónica, y le transmití la certeza de que a partir de aquel momento ella tendría inmensos deseos de ir realizando todo lo que se halla pendiente en su vida. Me miró un poco incrédula, hasta que le dije la vieja frase: el tiempo es el dueño de la razón, quiero verte en 21 días con novedades.
Pasado el tiempo pactado, ella volvió a mi consultorio y parecía de hecho otra persona; empezó a contarme las conquistas que ya había logrado de la A a la F que estaban en su mente, con tiempo demarcado para concluirlas en los próximos tres meses.
Y así la vida camina para todos nosotros… el paso inicial tuyo en este momento es buscar ayuda para eliminar el bloqueo que te hace repetir situaciones.