Hoy cuando abrí el word para escribir y me vi ante una hoja en blanco, por un segundo me pasaron por la cabeza las muchas posibilidades de cosas que podría escribir, de temas… de historias, enfocar esto o aquello…
Y eso me ha llamado la atención hacia nuestras vidas… Pienso que cada día recibimos una hoja en blanco cuando nos despertamos por la mañana… lo que pasa es que ni siquiera nos damos cuenta de que tenemos infinitas posibilidades de rellenar esa hoja y, automáticamente las memorias toman la delantera y escriben una historia ya escrita y reescrita que nos hace repetir siempre los mismos patrones.
Despertamos y nos acordamos de quiénes estamos siendo en este momento, en esta época, los muchos papeles que tenemos, nuestros problemas, las cosas que nos preocupan, que nos prenden y limitan, lo que tenemos que hacer, los muchos horarios y agendas que cumplir, y con esto la hoja en blanco enseguida va quedando repleta de pasado… y de un posible futuro que sólo tiene en cuenta un pasado ya contaminado de memorias equivocadas… Y sin siquiera darnos cuenta de que estamos frente a una hoja en blanco, a menudo nuestro pensamiento ya nos proyecta hacia el fin de aquel día, llevándonos a creer que no vamos a ser capaces de tanto como tenemos que hacer…
Y con ello un fardo que no sabemos por qué ya se apodera de nuestro día, que no ha sido vivido aún…
Apenas damos oportunidad alguna al presente y a lo nuevo.
Por qué no ser más creativos cada día, imaginando que el día es una hoja en blanco y que somos nosotros quienes escribimos las historias que vamos a vivir en aquel trocito tan precioso de tiempo que desperdiciamos tantas y tantas veces, al vivir del pasado y del futuro, que sólo es donde no podemos vivir…
¿Por qué no dejar que la historia del día a día y de nuestras vidas de ahora en adelante se escriba desde el presente?
Sé que es una propuesta no demasiado fácil de llevar a cabo, pero sé que es la única por la cual vale la pena luchar. Luchamos por tantas cosas inútiles, que son reacciones a la llamada de todo menos de nuestra Alma que… ¿por qué no arriesgar algo diferente, algo completamente nuevo?
Por qué no quitarnos las máscaras que nos llevan a repetir siempre las mismas viejas y ya enmohecidas historias, y no asumir un nuevo papel en nuestras vidas… un personaje que no es personaje… ese que se arriesga a entrar en el escenario de la vida sin máscaras y sin papeles aprendidos de memoria, que se arriesga cada nuevo día a sumergirse en lo desconocido, únicamente siendo, y simplemente teniendo el valor de estar presente.
¿Cómo hacemos lo más sencillo tan complicado? ¿Cómo nos hemos acostumbrado a hacer de cuenta que somos en vez de simplemente Ser… ¿Por qué creemos que siempre tenemos que hacer de cuenta que somos así o asá, lo mismo que una pandilla de gente que también cree que tiene que ser y proceder así o asá para ser aceptados? ¿Aceptados por quién? Por ese mundo que intentan servirnos en bandejas sucias de fango.
Me parece que está siempre en nuestras manos, pero… en nuestras manos que están limpias de tener que seguir o agradar a cualquiera que no sea nuestra Alma…
Si todo está así es porque también estamos así, y si el mundo es un reflejo, a cada uno incumbe limpiar aquello que está reflejando hacia el mundo.
¿Qué tal arriesgar más a ser quién realmente eres… y dejar de ser dominado por quien tú no eres?
Publicado dia 11/20/2015 9:52:44 AM em STUM WORLD
