¿Sabes aquellos días en que te despiertas y parece que alguien te oprime el corazón con mucha fuerza? ¿Que te sientes agobiada, dolorida, frágil y con ganas de esfumarte sólo para no tener que lidiar con algo que, muchas veces, ni siquiera eres capaz de entender?
Preguntas sin respuestas, lágrimas sin motivos claros, un sufrimiento angustiante y una ansiedad por tiempos de alegría, carcajadas y placeres: tú estás en pleno invierno dentro de ti misma.
No sé cuanto tiempo puedes llevar así, pero el caso es que si bien es posible hacer algo con el fin de prepararte para una linda primavera y después un inolvidable verano, antes hay que aceptar que no sólo de sol está hecha la vida.
Por eso, tengo tres sugerencias:
1-Relaja, respira y acoge este momento. De nada te servirá ni te ayudará permanecer peleándote con las dificultades que se presentan en esta fase. Respira hondo algunas veces seguidas y relaja los hombros siempre que te acuerdes. Cuanto más corta sea tu respiración, menos oxigenado estará tu cerebro y tus células y menor será tu creatividad y capacidad para vislumbrar las oportunidades. Y cuanto más tenso se encuentre tu cuerpo, menos flexibilidad, energía y disposición tendrás para lidiar con los desafíos.
2-Un día de cada vez. ¡Sólo por hoy! Intentar engullir un pan entero sería prácticamente imposible y bastante desagradable. Sin embargo, si lo cortas en pequeñas rebanadas, será fácil consumirlo y ese ejercicio podría ser incluso interesante, incluso cuando el pan no lleva el relleno que te apetece. O sea, la vida es como es. Consume lo que tiene para hoy. Tal como es. Y haz tu parte de la mejor forma posible, hasta que ella se vuelva agradable, placentera y tal como a ti te gustaría.
3-Aprovecha la oportunidad. Los tiempos difíciles tienen mucho para enseñarnos. Pero mientras sólo te lamentas, te haces la víctima y te cuestionas sobre qué habrás hecho para merecer semejante tristeza, nada puedes aprender que realmente transforme tus fallos y limitaciones en madurez y noción de merecimiento.
En fin, acuérdate de que quien no se reconoce como aprendiz merecedor de los tiempos difíciles, ciertamente tampoco se reconocerá como persona guerrera merecedora de los tiempos felices. Uno forma parte del otro. Todo es de lo mismo. La misma enseñanza y los ciclos que nos hacen evolucionar. La oportunidad de hacerte íntegro, entero y auténtico. Listo para la vida que te mereces.
Rosana Braga é Especialista em Relacionamento e Autoestima, Autora de 9 livros sobre o tema. Psicóloga e Coach. Busca através de seus artigos, ajudar pessoas a se sentirem verdadeiramente mais seguras e atraentes, além de mostrar que é possível viver relacionamentos maduros, saudáveis e prazerosos.
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Publicado dia 4/13/2018 7:50:31 AM em STUM WORLD
