Una niña de ocho años tuvo el siguiente diagnóstico médico: Autismo. Durante dos años recibió cuidados especiales en la escuela con participación de médicos, consejeros, profesores y otros niños.
Su comportamiento presentaba cierto grado de retraso. Mirada distante, vitrificada, como si estuviese en trance profundo. Ninguna respuesta verbal, física o mental. No se vestía sola, no hablaba ni tampoco jugaba. Cuando alguien hablaba más alto, se estremecía. Tenía miedo de los hombres.
La observación realizada por la chamana Tela Falcao a través de la clariaudiencia indicaba que podía escucharla conversando consigo misma y con compañeritos imaginarios en su propia mente.
Está encerrada en otra dimensión espiritual, bajo la custodia de seres pequeñitos, dice la chamana. Físicamente está en un universo material, pero mentalmente se encuentra en un universo espiritual.
Para escapar de un universo sociocultural donde había sufrido abusos verbales, mentales y sexuales, había viajado a esa otra dimensión.
El histórico de la niña es este. La madre se divorció tres veces y es la pieza principal del caso.
El ambiente familiar en su casa está repleto de alcohol, drogas, pobreza, conflictos familiares y negligencia.
La niña, ante la situación del comportamiento de sus familiares, busca protección en el mundo mental en otra dimensión. Era demasiado pequeña para salir de casa o para reaccionar.
Utilizó el recurso de la fantasía y de la imaginación.
Buscó el aislamiento y lloraba mucho.
Estos dos factores favorecen la expansión de las habilidades psíquicas latentes. Este proceder suyo ha permitido también el acceso al plano físico de estos seres que son reales, a pesar de ser considerados como si fuesen compuestos en el mundo imaginario infantil.
Ellos han atendido su pedido de protección y consuelo.
El tratamiento indicado por Tela Falcao, fue la realización de una ceremonia de cura. En la ceremonia percibe y entra en contacto con los seres pequeñitos, en esa otra dimensión habitada por ellos.
Los convence a liberar la mente y el alma de la niña.
Después, entra en el mundo mental de la niña y la convence de que lo más seguro es retornar al mundo físico. Le da garantías, a través de palabras provenientes del corazón. Los seres pequeñitos, a su vez, orientados por la Chamana, dicen a la niña que es seguro entrar y salir del mundo físico y que ella podría hacer eso siempre, si fuese necesario.
Esta confrontación y negociación entre la chamana, Tela Falcao, los seres pequeñitos y la niña, es afortunada. Había verdad y amor en el proceder y en la energía de Tela Falcao.
La niña, finalmente llora y habla tímidamente, dirigiéndose a la madre. Las dos son estimuladas a agradecer a los seres pequeñitos, pues la acción de éstos se llevó a cabo por amor y compasión ante la necesidad de la niña.
La apoteosis de este suceso y atendimiento espiritual se da cuando Tela Falcao, la niña, la madre y los seres pequeñitos cantan juntos, una canción de gratitud y alegría.
La madre confesó sus equivocaciones y prometió que modificaría su vida, acudiendo a un terapeuta profesional, juntamente con su marido.
En la tercera ceremonia de cura, madre e hija se purificaron en la casa de vapor, según las costumbres y rituales del chamanismo.
Tiempo más tarde la niña estaba saludable y frecuentando la escuela, con alto nivel de aprovechamiento.
La madre se liberó de la bebida y de las drogas y el marido pasó a actuar con dignidad.
Este acontecimiento fue adaptado y recopilado en el libro Curandeiro Nativo, escrito por Médico Urso Pardo do Lago. Y ha sido a través de ese libro como yo he iniciado mis pesquisas y vivencias chamánicas.
Wilson Francisco é Terapeuta Holístico, escritor e médium espírita. Desenvolve o Projeto Mutação, um processo em que faz a leitura da alma da criatura e investigação do seu Universo, para facilitar projetos, sonhos e decisões, descobrindo bloqueios, deformidades e medos que são reprogramados energeticamente.
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