Es tener esperanza en el mañana.
Saber que tras la noche viene el día.
¡Vivir intensamente las emociones!
Saltar de alegría.
No invadir el espacio ajeno.
Ser espontáneo.
Apreciar el nacer y la puesta del sol.
Amar a las personas incondicionalmente.
Aprovechar todos los momentos…
Hacer trabajo voluntario.
¡Vencer la depresión!
Es cantar en la ducha.
Confiar en la voz de la intuición.
Perdonar a las personas.
Estimular la creatividad.
No prenderse en detalles.
Jugar como un chiquillo.
Llorar de felicidad…
Dejar a un lado.
Tener pensamiento positivo.
Respetar los sentimientos de los demás.
Reír a solas.
Saber trabajar en equipo.
Ser sincero.
Encontrar la felicidad en las pequeñas cosas.
Comprender que somos personas únicas.
Es danzar sin miedo.
No apegarse a bienes materiales.
Respirar la brisa del mar.
Escuchar la melodía suave de una fuente.
Observar la naturaleza.
Encantarse con un día de lluvia.
¡Tener motivación!
Ver más allá de las apariencias.
Descubrir que necesitamos de los demás.
Olvidar lo que ya ha pasado.
Buscar nuevos horizontes.
Percibir que somos humanos.
Vencernos a nosotros mismos.
Ver la belleza del alma.
Salir de la pasividad.
Saber que la vida es consecuencia de nuestras actitudes…
No aplazar las decisiones.
Mimar a la criatura interior.
Dejar que suceda…
Besar mucho.
Practicar la humildad.
Encantarse con el calor humano.
Disfrutar las pequeñas victorias.
¡Vivir apasionado por la vida!
Visualizar solamente cosas buenas.
Comprender que existen límites.
Mentalizar lo positivo.
Tener auto-estima.
¡Colocar tu energía positiva en todo lo que realizas!
Mirar la vida con otros ojos…
Sólo arrepentirse de lo que no se hizo.
Escuchar música clásica o new age.
Hacer aparcerías con los amigos.
Crecer juntos.
Dormir feliz.
Emanar vibración de amor…
Saber que estamos tan sólo de paso.
Mejorar las relaciones.
Aprovechar las oportunidades.
Escuchar el corazón…
¡Creer en la vida!