Un fin de semana en la naturaleza nos abastece para enfrentar la dura realidad de quien vive en una ciudad grande. Pero quiero conduciros suavemente a un paisaje lleno de verde, de sonidos de cascadas, de sones “silenciosos” que conmueven el alma. Caminando entre árboles de troncos anchos y sencillos arbustos, encontremos las flores. Observad lo que intentan decirnos. Hay siempre un mensaje para quien tiene oídos de oír. La belleza, el color, la forma, el lugar donde nacen y crecen, hablan tanto de sí como de nosotros. Al conectar con el espíritu sagrado de las flores estamos accediendo a la poderosa energía de la naturaleza que nos sostiene en su grandeza de sabiduría.
Procura darte cuenta de la naturaleza que te rodea y observar el potencial creativo y curativo que de ella se emana. Sintonízate con los ciclos, aunque el clima no esté acorde con las estaciones. El hombre ha venido interfiriendo y la naturaleza responde haciéndose eco de esa desarmonía. En un otoño cálido, no dejemos de ver las hojas que caen y que anuncian el dejar ir de aquello que ha vivido su tiempo. Todo se prepara para renacer. Dentro de poco, cuando llegue la primavera y un nuevo ciclo recomience. ¿Y tú? ¿Ya te has dado cuenta de lo que es preciso dejar atrás? ¿Cuáles serán las hojas de otoño que van cayendo en tu vida en este momento? Puede ser una relación o apenas un tipo de actitud.
¡La lección que las flores siempre nos traen es que debemos honrar la vida e impulsarla a ser repleta de luz! En momentos de tránsito de ideas y posicionamientos frente a la vida, cada opción que elegimos es vital. Si hay vacilaciones, recurre a la naturaleza, procura estar inmerso en su sabiduría, contacta con los seres que te mantienen pulsando, déjate sentir en el alma, en su espacio sagrado y escucha su respuesta. ¡Siempre está dentro de nosotros!
Los florales han venido proporcionando a las personas cada vez más la posibilidad de buscar la armonía interior y de trabajar su proceso de auto-conocimiento y auto-cura. La esencia WALNUT de los Florales de Bach ha venido auxiliando a muchas personas en sus momentos de transición, al envolverlas en un patrón de sentido de la responsabilidad, es decir, de preservación de aquello que somos, de nuestro propósito, evitando la interferencia de otros en las opciones que elegimos.
Puedo compartir los resultados obtenidos por personas que han tomado Walnut en momentos de cambios, precisamente cuando necesitaban dar el salto a otra etapa y esta esencia les ha sido de mucha utilidad.
En separaciones dolorosas, como un divorcio, momento en el cual la persona ve que tendrá que arreglárselas “sola” nuevamente, este sentimiento de soledad y abandono es reconfigurado por el Ego, comprendiendo la esencia de su individualidad y de su potencial único.
El floral Walnut actúa haciendo que la persona tome conciencia de la terminación del ciclo, auxiliándola a vislumbrar su capacidad interior de recomenzar y con ello aprender nuevas lecciones. Abstraer el aprendizaje y continuar... Las separaciones normalmente abren verdaderos boquetes en la auto-estima y la impresión que tiene la persona es la de que nunca más volverá a ser la misma. ¡Esto es verdad!
Tiene además la impresión de que nunca más va a recuperarse. ¡Esto puede ser de otra manera! ¡Las esencias florales contribuyen, haciendo despertar para un nuevo comienzo! Los relatos de las experiencias con florales en este tipo de procesos hablan de aumento de la confianza en sí mismo, de la esperanza en la vida y de una fuerza que la persona “ni siquiera sabía” poseer.
Nuestro recorrido por los jardines de la vida no se termina aquí. Es constante. Hay mucho que descubrir en nosotros mismos, en la naturaleza íntima. No hay edad, no hay cualesquiera límites. ¡Siempre es posible! Entonces, ten coraje para buscar en tu jardín interior.
Publicado dia 2/6/2008 3:48:35 PM em STUM WORLD
