Pocas personas logran dar rienda suelta a sus sueños. Es comprensible, porque la mayoría de nosotros estamos condicionados para seguir patrones. No hemos sido educados para permitirnos seguir nuestra mente, nuestro corazón y nuestras verdades.
Repito: Hemos sido condicionados para seguir patrones.
La palabra SOÑAR ES LINDA, yo la “siento” como el “SON DEL AIRE”. Y ¿cuál es el son del aire? El “son” que yo estoy preparado para sentir, para escuchar y para dejarme inebriar. Es así de sencillo, pero por paradójico que pueda parecer, es así de complicado.
Nuestro sistema de vida tiene dos fases distintas. Una de paz, de postura tranquila, de capacidad de ser efectivamente lúcidos en el momento que estamos viviendo.
La otra es estar condicionándonos al resentimiento, al odio, a la ausencia de perdón y a la depresión.
Es importante afirmar que todas estas fases han sido construidas por nosotros. Nada es querido por este o aquel ser. Nadie habla por nosotros. Nadie anda por nosotros, nadie nos coloca en esta o en aquella fiesta. Es nuestro Libre Albedrío el que nos sitúa. SOMOS LO QUE QUEREMOS Y CREEMOS SER.
Así, SOÑAR, sentir el son del aire es TAMBIÉN nuestro Libre Albedrío. Tan intenso cuanto intensa es la vida. Tan fuerte cuanto nuestra capacidad de permitirnos ir con los pensamientos a donde ser humano alguno logra acompañarnos.
A nadie es posible interferir en nuestra mente, juzgar y decretar: pero eso es una tontería, dice alguien…
¿Dónde está escrito que lo que es bueno para mí es una tontería? ¿Quién puede, en sana conciencia, juzgar lo que me hace efectivamente feliz?
Nadie. El SON de mi AIRE sólo yo lo sé sentir. Sólo yo consigo SOÑAR.
Pocas personas se dan cuenta de que el combustible de la felicidad es el sueño. Éste llega antes de mis actitudes y de mi racionalidad. Sin él la vida carece de fundamento, a fin de cuentas, ¿qué hago yo en este planeta repleto de desigualdades? Sueño y aprendo a controlar mis emociones, por paradójico que esto pueda parecer. Así es como evoluciono y así es como construyo mi próxima encarnación.
El Son del Aire puede ser cálido cuando estoy enamorado y amando.
El Son del Aire puede ser frío (estremecido) cuando te miro y vibro en tu misma frecuencia.
El Son del Aire puede ser compensador cuando llego a su ápice.
El Son del Aire puede ser secreto… Por tanto de “color oscuro”, pero tan oscuro cuanto mi coraje para revelarlo.
El Son del Aire puede ser y es MI SON DEL AIRE. Al fin y al cabo me gusta y quiero soñar.
Jamás dejes que otras personas te roben tu capacidad de ser feliz. ¿Sabes por qué? Porque antes de que llegue la felicidad viene el Son del Aire.
¿O es que tú todavía eres de aquellos que consideran que la felicidad va aparejada a lo que tienes y no a lo que sientes?
Siento, luego existo. Existo, luego soy. Soy, luego puedo llegar a tener…
Siendo así, ¿qué viene primero? ¿EL SER O EL TENER?
Cuídate.
Saul Brandalise Jr. é colaborador do Site, autor do livro: O Despertar da Consciência da editora Theus, onde mostra através das narrativas de suas experiências como extrair lições de vida e entusiasmo de cada obstáculo que se encontra ao longo de uma vida. Email: [email protected] Visite o Site do Autor