Todo cambio de año nos trae la oportunidad de poner a cero el pasado y recomenzar con nuevas fuerzas y esperanzas. Como en un Rito de Paso, este es un momento en que podemos reciclarnos, establecer nuevas metas y transformar nuestra vida. Y el conocimiento de la Ley de la Atracción puede ayudarte a proyectar tus deseos al Universo, para que atraigas una vida verdaderamente nueva.
Son tres las etapas de cambio:
1ª - Da por cerrado de verdad el año que pasó
Reserva algunas horas para aislarte y pensar en tu vida en los doce meses pasados. Haz un balance general de los acontecimientos, y busca extraer sus lecciones: en qué te has equivocado, en qué has acertado. Pero, principalmente, qué has aprendido con tus experiencias.
Ten cuidado con los patrones de pensamiento que estableces en esa reevaluación, pues si llegas a la conclusión de que “ese noviazgo no cuajó, porque ningún hombre vale”, te quedarás en soledad o atraerás nuevas experiencias del mismo tipo, porque este es el patrón masculino que has impregnado en tu vida.
Permanece atenta también a la auto-imagen que estableces en esa evaluación, porque si llegas a la conclusión de que “soy negada, he sido incapaz de realizar las cosas que me he propuesto hacer”, seguramente vas a proyectar esa imagen para el siguiente año también. Contémplate como una persona capaz, en proceso de aprendizaje y de desarrollo de tus talentos.
Es fundamental que, al revisar el pasado, ante situaciones de ira y frustración, sientas las emociones, pero a continuación “déjalas ir”. La Ley de la Atracción muestra que si cultivas la amargura y el resentimiento – aunque hayan tenido un motivo justo – esto te mantendrá presa en las situaciones del pasado o atraerá nuevas situaciones del mismo tipo – porque ese es el patrón que tú estás proyectando en el universo.
Agradece, agradece, agradece por todas las cosas buenas que la vida te ha traído.
Solemos pensar en lo que nos falta, pero este es el momento de enfocar tu atención en las muchas bendiciones que ya tienes en tu vida y que muchas veces se vuelven invisibles con el tiempo. Mira en torno y reconoce lo que ya tienes, la persona que eres, con sus cualidades y defectos, siempre creciendo y aprendiendo; la salud, la familia, la alegría de los hijos, el lugar donde vives, el almuerzo de domingo, los amigos, los libros que has leído, las películas que has visto, las cosas que has aprendido, las pequeñas y grandes conquistas.
Bendice el año viejo con todo lo que te ha traído, de positivo y negativo. Y después, despídete y entrega todo al universo. Cierra el ciclo. Deja que el pasado se marche. Siéntete libre y abierto para un nuevo ciclo.
2ª - Define qué es lo que quieres
Si eres vago y solamente piensas “yo quiero cosas buenas para este año”, no estarás enviando informaciones claras al Universo. Es fundamental que sepas exactamente lo que quieres, para que las cosas sean atraídas a tu vida.
En el primer día del año (o ahora, tras leer este texto), separa también algunas horas, pero ahora para pensar en la vida que deseas para ti mismo. Siéntate, permanece en silencio o pon una música tranquila. Busca interiorizarte y sentir qué es lo que realmente te gustaría vivir, realizar y conseguir. Intenta sentir, más que pensar, en lo que realmente te traerá felicidad y realización. Escribe todo cuanto te venga a la cabeza, sin racionalizar o criticar.
Ahora divide tu vida en las varias áreas que consideras importantes: Amor, Amigos, Familia, Profesional, Salud, Finanzas o otras que desees (Emocional, Espiritual, Esparcimiento, etc.)
Entonces elabora mejor lo que has escrito, añadiendo detalles y visualizando con claridad lo que deseas. Insiere tu lista de los deseos en las áreas de tu vida.
3ª - Crea la Imagen de tus sueños
Un poderoso recurso que podrá recordarte constantemente tus metas para el año es la imagen. Ésta puede alcanzar directamente tu inconsciente, plantando en él la semilla de tus deseos. Y activar la información que proyectas al Universo.
Compra o construye un panel de corcho de tamaño medio o grande.
En su centro coloca una foto en la que estés alegre, irradiando felicidad, salud y confianza.
En la parte superior del panel, en la posición central, coloca en letras grandes y coloridas el tema central de este año 11: REALIZACIÓN, FUERZA Y OBJETIVIDAD.
Divide ahora el panel en las varias áreas de vida que has delineado. Y piensa: ¿Cómo puedo crear una imagen clara de lo que quiero?
Busca fotos y recortes que representen lo que tú deseas, en fotografías antiguas, revistas e imágenes en Internet. Si quieres una casa, por ejemplo, encuentra una que tenga el estilo que te gusta; puedes además recortar otras imágenes, que muestren una ventana con jardineras, vergeles floridos, un baño con hidromasaje o una piscina. Compón una imagen nítida de la casa de tus sueños.
Si lo deseas, puedes también pegar en cada área frases con las palabras-clave a alcanzar. Si andas muy estresada, escribe “Estoy en paz con la vida” o “Mantengo la paz en todas las situaciones”.
El Panel de los Deseos es dinámico, y puedes modificarlo durante el año, a medida que muchos objetivos van siendo alcanzados, y nuevos deseos surgen.
Mantén el panel en un lugar donde puedas verlo continuamente. De esta forma, mantienes siempre enfocado lo que deseas, y también dinamizas y realimentas tu comunicación con el Universo que –seguramente-, te responderá, trayendo a tu vida la materialización de tus deseos.
Sonia Weil é é professora de Comunicação Social e pesquisadora na área de Numerologia, onde atua com consultas, cursos e palestras desde 1986. Realiza também palestras e workshops sobre a Lei da Atração (do filme O Segredo) em empresas e institutos esotéricos.
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Publicado dia 1/5/2009 5:41:53 PM em STUM WORLD
