La vida está hecha de elecciones y, dependiendo de tu decisión en determinado momento, tu trayectoria está definida.
Sin embargo ¿qué decir de una elección mal hecha? ¿Arrepentirse? ¿De qué sirve eso? Simplemente nos lleva a una masacre mental, pero las situaciones no se revierten en función de esto.
Una evaluación completa de los movimientos que la vida nos trae es de suma importancia para una elección correcta. ¿Cómo convertirte en observador de algo si tú estás dentro de la energía de la situación?
La respuesta es sencilla, cuando estamos en pleno equilibrio energético las situaciones son contempladas desde fuera, y con toda la frialdad de un observador podemos elegir la mejor opción.
En momentos difíciles, en que estamos desaplomados, normalmente nuestras elecciones son mal hechas.
La Radiestesia puede llevarte a un mundo pleno de equilibrio y serenidad. A través de la Radiestesia clásica se hace la verificación general de una casa y se proponen las curas. Y a través de la mesa radiónica cuántica hacemos la transmutación de energías presentes, pasadas, y hacemos una conexión futura, siempre con lo que es divino.
La mesa radiónica cuántica es una junción de elementos que vienen de tres sistemas: la radiestesia (medición y diagnóstico), la radiónica (corrección y tratamiento) y la psicotrónica (ciencia en que la mente domina la intención actuando sobre símbolos y convenciones).
Que tu energía se mantenga elevada depende mucho de tu conducta diaria. Hay tres pilares que comandan el mantenimiento de la elevación de tu energía que son:
1. La verdad – estar siempre conectado con ella, luchar y actuar siempre por ella;
2. Admirar lo que es bueno y ético, luchar por ello y mantener tu conducta de esta forma;
3. Admirar lo que es bello, agradecer por las cosas bellas y de hecho admirarlas. La admiración de algo desde el fondo de tu corazón hace que esta cosa admirada forme parte de tu vida.
¡Qué cosas tan fáciles! Esos tres pilares están al alcance de todos nosotros; para alcanzarlos en plena armonía basta el cambio de nuestra conducta diaria, vigilándonos a cada instante.
¿Sabes qué significa en otras palabras vivir sostenido por esos pilares? Significa estar conectado con lo que es divino en nuestra vida.
Tener la energía equilibrada significa un canal abierto con nuestro Supraconsciente, nuestra parte divina, y esta conexión máxima nos permite alcanzar todo cuanto deseamos para nuestra vida.
Expongamos todo esto de forma muy sencilla: imagina que puedes acceder libremente sin interferencias a tu Supraconsciente y puedes pedirle lo que deseas para tu vida. Tan pronto como tu Supraconsciente recibe tu petición, envía como si fuese una red de búsqueda en Internet a los demás Supraconscientes, y trae a tu vida lo que se ha solicitado.
Lo que ocurre con la mayoría de todos nosotros es que tenemos ese canal cerrado o impregnado de las más diversas interferencias, la conexión con el Supra nunca se verifica y nunca llegamos a donde deseamos, o mejor, acabamos por hacer elecciones que no son nuestras.
Hace algunos meses, hice un atendimiento de Radiestesia que fue de la siguiente forma:
Una chica me llamó para una verificación general en su casa, considerando que el local en que vivía era el responsable por todo lo que le estaba sucediendo en la vida. Ella había pasado por una separación reciente, perdido el empleo, y además de eso su relación con su hija adolescente era pésima.
Al llegar al local hice toda la evaluación energética de la casa; el problema esta vez no era del local. Todas las energías estaban en perfecta armonía y allí no había presencia de ninguna energía nociva, pero, tal como la misma persona me relataba, su vida estaba patas arriba.
Dije entonces a la chica que tendríamos que hacer una evaluación personal a través de la mesa radiónica cuántica y verificar dónde estaban los bloqueos que la llevaban a elecciones y situaciones equivocadas en su vida.
Empecé entonces la mesa radiónica verificando las frecuencias energéticas de la persona y, por el desfase en la frecuencia general, ya podíamos observar que había campos en su vida que presentaban problemas. De esta forma, evaluamos los aspectos físico, emocional y espiritual. Había problemas serios relativos a lo emocional y espiritual.
Verificamos, entonces, todas las correcciones solicitadas en la mesa radiónica cuántica.
Al término de la consulta, dije a la muchacha:
- Tu trayectoria de vida se hará tal como tú la desees. Procura delinearla, piensa solamente en lo positivo y elige aquello que quieres, pues ¿cómo llegar, si ni siquiera hemos elegido a dónde ir?
El resultado de una mesa radiónica se proyecta normalmente en algunas semanas. En este caso, pasaron meses sin noticia alguna de la chica. Pero la semana pasada, al término de un curso que yo estaba impartiendo, la tal muchacha apareció dándome completo testimonio de su cambio de vida. Fueron tantos los resultados obtenidos que llegó a emocionarme.
En todo ese tiempo, lo que ella hizo fue mantenerse en la pauta de vibración que habíamos logrado colocar con el empleo de la mesa, y las situaciones y personas que realmente tenían que ver con su energía fueron surgiendo, y las transformaciones produciéndose.
La mesa radiónica cuántica es un objeto empleado en Radiestesia con infinitas posibilidades de utilización que está al alcance de todos nosotros.
¡Por eso, delinea tu trayectoria de vida llegando hasta donde quieres, por la simple conexión con todo lo que sea realmente divino en tu vida!
Haz que tu existencia sea plena de armonía y cosas buenas y, si por acaso algo complicado aparece en tu camino, emplea instrumentos que te encaminen nuevamente hacia lo Divino.