- Descarga siempre el péndulo, tirando varias veces del cordón hasta el final.
- Dedica quince minutos diarios a la práctica de la radiestesia, a fin de adquirir persistencia y disciplina.
- Procura estar descansado, sin preocupaciones, sin tensiones, sin prisa y sin energía negativa.
- Apoya los pies en el suelo y las manos sobre la mesa.
- Evita la presencia de otras personas, para no tener interferencias al comienzo.
- No tomes calmantes; tu tensión, si la hubiere, desaparecerá con la observación del péndulo.
- Mucha paciencia. La radiestesia solo tiene un secreto: trabajo, pesquisa y prudencia.
- Adquiere confianza en ti mismo. Has de estar convencido de que el péndulo funciona en tu mano. Lleva a cabo ejercicios que puedan ser comprobados.
- No trabajes cerca de imanes, radio, TV, altavoces.
- No trabajes después de comer.
- No trabajes cerca de hierro (cuidado con mesas), cocina, baño, área de servicio con pilón, no ingieras alcohol.
- En días de tormenta, esperar dos horas antes de trabajar.
- Posiciónate preferentemente de frente hacia el Norte magnético, si es posible.
- Cuidado con los campos artificiales producidos por aparatos electro-electrónicos y la energía telúrica.
- Procura utilizar testigos en tus trabajos.
- No olvides remover remanentes e impregnaciones.
- Cuando el péndulo no se mueve, la causa puede ser un cambio climático brusco (desequilibrio de iones), cansancio o tensión del practicante. Deja la pesquisa para otro momento.