¿Hasta cuándo vale la pena luchar por un amor?
por Rosana Braga em STUM WORLDAtualizado em 08/04/2020 11:35:09
Traducción de Teresa - [email protected]
Muchas veces, vivimos relaciones difíciles, que nos causan muchas más tristezas, decepciones y dolores que alegrías y satisfacción. Sin embargo, por algún motivo que ni siquiera nosotros mismos sabemos cuál es, insistimos en mantener esa relación. Nos empeñamos en volver a intentarlo, nos agarramos a palabras que no se corresponden con la realidad ni con las actitudes tomadas por la otra persona. Y así, confusos y perdidos en esta sensación entre el amor que nos gustaría vivir y lo que realmente estamos viviendo, ¡no sabemos qué hacer!
Convencidos de que amamos a esa persona, nos llenamos de fuerzas y de ánimo para luchar por ella. Pero pronto percibimos que no hay reciprocidad, que esa persona no está dispuesta a luchar, a intentarlo de verdad, a cumplir lo que promete y, entonces, vemos diluirse nuestras esperanzas y aumentar todavía más nuestro dolor. Algunas personas enferman, caen en depresión, se sienten desmotivadas, se alejan de los amigos, pierden incluso el empleo por culpa de una relación que más parece una tortura, aplastando sentimientos y deseos.
En este momento, por más que no queramos oírla, la pregunta se repite en nuestra alma y exige una respuesta: ¿vale la pena continuar? ¿Vale la pena insistir? ¿Existe la posibilidad de conquistar a esa persona definitivamente?
En fin, creo que la respuesta no es tan objetiva, especialmente porque no podemos prever el futuro de manera tan clara. Pese a todo, esta es, sin duda, la hora de que mirarnos a nosotros mismos y respetarnos, valorarnos y, sobre todo, amarnos. No tengo duda de que si no lo hacemos así, la otra persona tampoco lo hará. Pero si, por el contrario, decidimos reconquistarnos, luchar por nosotros mismos, si miramos lo que tenemos de bueno y volvemos a levantarnos, habrá una salida. O sea, ganaremos fuerza y discernimiento para descubrir la respuesta acertada: ¡si vale la pena o no!
Si vale, estaremos listos para exigir lo que queremos de esta relación, indicando a esa persona que merecemos ser amados, respetados y valorados. Y ella, si nos ama realmente, estará dispuesta a darnos lo que merecemos.
Pero si no vale, estaremos preparados para abrir mano de esta relación que no nos ha traído nada bueno, que sólo ha servido para tenernos angustiados y desesperados por tanta indecisión, incertidumbre e incoherencia.
Entonces, si estás viviendo una relación que te viene causando más dolor que alegría, te sugiero que te plantees algunas preguntas y seas sincero contigo mismo. La primera es: ¿amas realmente a esa persona? Si la respuesta es que no, entonces ya ni siquiera hace falta contestar las demás preguntas. Pero si es que sí, entonces pregúntate: ¿has venido dando lo mejor de ti para intentar salvar la relación? Después, evalúa: la persona amada ¿está dispuesta a salvarla también? ¿Demuestran sus actitudes un verdadero amor o expresan indiferencia, incomprensión y falta de respeto?
En el caso de que ambos estéis dispuestos a reconquistaros, es bastante probable que lo consigáis. Pero si tú eres el único que está dispuesto a ello, lo mejor que puedes hacer es poner punto final a esta historia, pues una relación se compone de dos corazones ¡y nunca de sólo uno!
Quizá un día esa persona esté lista para vivir esa relación y vuelva a ti, ¡pero mientras tanto, los hechos están demostrando que ya no es posible! Recuerda que una persona se enamora de otra por sus cualidades y después, con la convivencia, aprende a aceptar sus defectos. Entonces, cuida de ti, expresa más tus cualidades, mejora tus puntos flacos, supera tus limitaciones y conviértete en una persona apasionante.
No malgastes tu vida insistiendo en una relación que no te hace crecer, que no te hace persona más consciente y más entera. ¡Y nunca olvides que el Universo te da exactamente aquello que tú consideras que mereces! Por tanto, trata de valorarte, y así tendrás la absoluta seguridad de que mereces mucho más.
