¡Tú eres pura energía!
por Graziella Marraccini em STUM WORLDAtualizado em 13/10/2010 12:45:57
Traducción de Teresa - [email protected]
¿Cómo definimos la energía? Veamos qué dice el diccionario Aulete: 1. Fís. Capacidad, potencial (que tiene un sistema, un cuerpo, una sustancia) de realizar un trabajo. Y el Aurélio afirma que ‘la masa de un cuerpo puede transformarse en energía, y la energía en forma radiante puede transformarse en un corpúsculo con masa’. Por tanto, cuando nuestro espíritu se materializa en un cuerpo físico en la Tierra, comienza como pura energía radiante (me encantó el ‘radiante’) para formar nuestra masa corporal. La información sobre nuestra materialización ya existe en el principio energético inicial. ¡De la misma forma, cuando desencarnamos, nos convertimos en pura energía para reintegrarnos a la energía primordial radiante! Ese razonamiento parece bastante lógico, ¿no es cierto? Pero entonces ¿qué es lo que impide ese ‘retorno a la energía radiante inicial’? ¿Por qué no nos ‘desmaterializamos’ al igual que hizo Jesús?
A mi modo de ver, uno de los mayores estorbos para que esto ocurra es la ‘basura’ que acumulamos durante nuestra estancia aquí en la Tierra. La basura está representada por varias cosas, pero principalmente por deseos o sentimientos negativos y por hábitos nocivos. Esa negatividad es la causa mayor de nuestras enfermedades y posteriormente va a retardar nuestro retorno al estado de pureza inicial. La energía es fuerza pura y sin esa fuerza no podemos funcionar. La medicina china explica que cada uno de nosotros nace con una energía inicial que nos viene transmitida por vía hereditaria. Esta energía inicial – que como astróloga identifico como perteneciente al elemento Fuego – es determinante, puesto que es nuestra reserva natural necesaria para que nuestro cuerpo físico haga su trabajo. Sin energía no hay voluntad. Sin energía existe la muerte física.
Otra energía necesaria para nuestro sustento es la que proviene de la respiración, o sea, del oxígeno que respiramos. Si vivimos en lugares de mucha contaminación, donde el oxígeno no es suficientemente limpio, perdemos buena parte de la carga de energía proveniente del Aire, y causamos desequilibrio en el campo energético. ¡Quienes viven en las grandes metrópolis como São Paulo se hacen una idea sobre de qué estoy hablando! En cambio, sabemos que la Tierra como un todo ya empieza a ponerse enferma a causa de esta carencia energética global, y que la humanidad enferma como consecuencia de este desequilibrio en el ecosistema natural.
Otra fuente de energía es la proveniente de la alimentación, y es la energía de la Tierra. Esa también es necesaria para que podamos nutrir nuestro cuerpo físico con proteínas, carbohidratos, vitaminas, sales minerales, etc. Somos lo que comemos, dicen los médicos. Una alimentación sana y variada con alimentos exentos de agrotóxicos proporcionará ciertamente la mejor energía de la Tierra.
Por último, tenemos la energía del Agua que hidrata y promueve el transporte de las otras energías, siendo además responsable por la limpieza de los órganos de nuestro cuerpo físico. Sabemos de la importancia de este elemento, sin el cual nuestra vida no sería posible en nuestro planeta.
Reconozco que no siempre logramos mantener estos cuatro elementos en equilibrio perfecto, y por esa razón acabamos poniéndonos enfermos… Continuando nuestra reflexión, podemos concluir que si tenemos una buena herencia genética, comemos bien, bebemos agua bastante y nos ejercitamos mucho, tendremos una vida larga y saludable, ¿cierto? Pues la cuenta no es así tan fácil, porque lo que más contamina nuestro cuerpo es nuestra negatividad, o sea, ¡nuestros pensamientos! La ‘basura’ con que nos cargamos durante la vida contaminando nuestro campo energético proviene ciertamente de nuestros pensamientos. Emociones y pensamientos negativos también estorban nuestro camino de vuelta a Nuestro Hogar, porque la energía de la Tierra proviene asimismo de los pensamientos y sentimientos de los hombres.
Una de las Leyes Herméticas, específicamente la Séptima, la Ley de Causa y Efecto, es la Ley del retorno. Si reconocemos que toda la energía negativa generada por nuestros pensamientos y sentimientos negativos habrá de volver a nosotros en forma de negatividad, podremos procurar transmutar todos los sentimientos negativos y de esta forma recuperar (reparar) nuestro campo energético. En mi experiencia en el consultorio he notado que una poderosa energía que ‘repara’ los estragos que hacemos con nuestro comportamiento negativo es la proveniente de nuestra capacidad de amar incondicionalmente. ¡Si transformamos un pensamiento negativo en un pensamiento de amor, transmutaremos el campo energético hasta el punto de reparar los estragos!
Personalmente, hago uso de las Técnicas de Liberación Emocional llamadas EFT* (Emotional Freedom Techniques), que reúnen una serie de acciones capaces de armonizar el campo energético, eliminando dolores, fobias, bloqueos emocionales y las principales enfermedades de nuestro cuerpo físico. La acción terapéutica de la EFT* es fácilmente asimilada por los profanos en la materia ¡y está a disposición de cualquiera! Basta aprenderla y practicar. (Véanse también los vídeos en mi Website).
Continuando con mi razonamiento, pondré un ejemplo: una persona con exceso de Fuego, pero con carencia de Tierra, tendrá mucha energía para gastar en ideas, en cambio tendrá poca capacidad para realizarlas. Ese exceso, al causar un desequilibrio energético, podría asimismo traducirse en alguna patología como por ejemplo una tensión arterial elevada. Por otra parte, una persona con exceso de Agua tendrá una inestabilidad psíquica y emocional muy acentuada ¡y si tiene carencia de Aire, tendrá mucha emotividad y poca racionalidad! Las patologías de esa persona se observarán mayormente en el área digestiva o congestiva.
Como astróloga – y sirviéndome de la rama de la astrología llamada Astromedicina – puedo hacer un diagnóstico sobre el mapa astral natal de una persona e indicar una terapia adecuada para el restablecimiento del campo energético desgastado o bloqueado por hábitos alimentarios, actitudes y pensamientos y – principalmente – por emociones negativas. Las terapias florales u homeopáticas son coadyuvantes de la EFT* y pueden ser empleadas en conjunto, de forma a promover el proceso de cura que para tener éxito, no obstante, va a depender de tu voluntad y persistencia. La voluntad también es energía y si no pones energía en aquello que haces no lograrás alcanzar tu meta.Concluimos, por tanto, que las carencias o desequilibrios físicos y mentales pueden ser rectificados si al menos nos hacemos cargo de ellos y ponemos voluntad en corregirlos, ¿no es cierto? Al fin y al cabo, difícilmente nacemos con todos esos elementos en perfecta armonía y con la felicidad de vivir en ambientes armónicos ¿no es verdad? Entonces, vamos a corregir la polaridad negativa por una positiva y recuperaremos el campo energético, promoviendo la cura de nuestro cuerpo físico y mental. ¡Viviremos mejor y más integrados con el mundo a nuestro alrededor!
¿Vamos a empezar esta semana con la transmutación de los pensamientos negativos en pensamientos positivos, de amor fraternal? ¡Nuestro campo energético lo agradecerá!
Deseo a todos una buena semana y doy las gracias por vuestras innumerables manifestaciones de cariño y por los relatos recibidos por e-mail. Continuad interactuando conmigo: ¡me encanta compartir con vosotros mis experiencias! A fin de cuentas ¡SOMOSTODOSUNO!
¡Una semana llena de Luz y Amor!
