Liberación
por Elisabeth Cavalcante em STUM WORLDAtualizado em 06/09/2007 13:35:38
Traducción de Teresa - [email protected]
“La mente puede ser comparada con una aguja recubierta de lama y Dios con un imán. La aguja no puede ser atraída por el magneto, sin antes librarse totalmente de la lama.” Sri Ramakrisha
La mente es presa fácil de creencias, supersticiones, miedos y fantasías. Por esa razón, fuerza, coraje, determinación y perseverancia son requisitos esenciales para todo aquel que desea vivir en estado de armonía y equilibrio. Si no estamos permanentemente conectados con la sabiduría interior que nos habita, difícilmente conseguiremos retirar la lama del magneto que es nuestra mente.
La lama solamente será removida a partir de nuestra voluntad, no se desprenderá sola, sino como resultado de un esfuerzo consciente por nuestra parte para sustituirla por algo mucho más valioso, que es la verdad acerca de quiénes realmente somos. Las fantasías sobre incapacidad y falta de valor que alimentamos respecto de nosotros, tienen que ser abandonadas, pues todo ser humano, indistintamente, posee dentro de sí el poder necesario para expresar en el mundo su plenitud.
Saber que somos uno con el poder creador y que su perfección y abundancia ya están en nuestra vida, es el primer paso para que esto se manifieste concretamente. No basta repetir frases hechas, como papagayos. Si no expresan una verdad en la cual creamos sin vacilación alguna, nada sucederá.
El problema es que invertimos el orden natural del Universo y creemos que, primeramente, lo divino debe demostrarnos que existe, para que sólo entonces podamos creer en él. En el plano cósmico no es así como funcionan las cosas. La convicción de la existencia de lo divino debe venir antes, pues es fundamental para que él se presente y derrame sus bendiciones sobre nosotros.
Siempre que la negatividad de la mente aparezca, hemos de recordar que ella es el mayor obstáculo para que nos acerquemos a Dios. Él estará siempre a la espera de que nos liberemos de todas las ataduras que impiden que sus bendiciones nos alcancen.
“El mensaje de Sufí es: Entrega todo a Dios, entrega todo al todo. Y mira: esa existencia infinita sigue perfectamente. La energía que cuida de millones de estrellas también puede cuidar de ti. No necesitas llevar ese fardo sobre tu cabeza, puedes confiar. Y bastan algunas pocas experiencias de confianza y entonces ya nunca más quedarás atrapado en la vieja armadilla nuevamente, porque sabrás que tus cosas están siendo bien cuidadas. (...)
Tendrás que crear un tipo diferente de espacio. Un espacio diferente será necesario. Tal espacio se llama confianza, entrega, relajación, fe, amor, o como quieras tú llamarlo. Una vez se haya creado ese espacio, comienzas a moverte en un plano totalmente diferente. Entras en una nueva dimensión: es la dimensión sin muerte, es la dimensión sin miedo. Y entonces vivirás totalmente, audazmente, y cualquier cosa que hicieres, estarás totalmente en ella, completamente en ella. Cada acto se convertirá en un caso de pasión y muy creativo, no apenas en las cosas que creas desde el lado de fuera, sino en algo que te integra también interiormente. (...)”
OSHO - Unio Mystica