Felicidad
por Saul Brandalise Jr. em STUM WORLDAtualizado em 07/01/2008 16:09:33
Traducción de Teresa - [email protected]
Fue una pregunta interesante:
- ¿Eres Feliz?
Sí, contesté. ¿Y tú?
- No lo sé...
Cómo es que no lo sabe... pensé. ¿Cómo una persona no consigue saber en qué fase de su vida empieza su felicidad?
Ciertamente los valores están cambiados y confusos, pues felicidad es un estado pleno de consciencia y espíritu.
Consciencia, porque es allí donde comienza todo. Si no sé lo que soy, ¿cómo voy a comprender en qué fase me encuentro?
Si no me gusta lo que hago. Si convivo con quien no quiero convivir. Si digo sí cuando quiero decir no. Si no aplico valores éticos y morales en mis actitudes, cómo puedo querer ser feliz...
Es efímero intentar reemplazar estas verdades por adquisiciones materiales. Cuando se busca la felicidad con regalos, significa querer controlar a la persona con la materia. Esta felicidad es pasajera, corta y sin contenido.
Todo cuanto está relacionado con la felicidad no se toca, se siente. Viene del alma, de nuestro profundo interior.
Ella es espiritual, jamás se toca, se ve, se degusta...
Nadie conseguirá ser feliz llevando su infelicidad consigo. Parece una paradoja, pero no lo es. Muchas veces la infelicidad vive en la habitación de al lado y nos parece que eso es un ejercicio de convivencia. Recelamos las consecuencias de nuestras actitudes de expurgo de la infelicidad.
Para encontrar la felicidad es necesario luchar y dominar nuestros miedos. Sólo entonces estaremos aptos para la relación externa. La vida feliz es una constante superación de obstáculos.
Nuestra verdadera felicidad vive fuera de nuestra zona de comodidad. Nuestros estremecimientos son conquistas y nunca obra de la casualidad.
Una conquista exige fe y determinación; jamás quedarse esperando a que las cosas sucedan. Ellas simplemente no suceden. La vida pasa y nosotros nos estacionamos.
Será mucho pedir que mires hacia afuera por la ventana y veas cuántas personas se encuentran en peores condiciones que tú... ¿Sabes por qué? Porque lo han merecido. Su incomodidad de hoy ha nacido ayer en sus actitudes.
Ya lo he escrito, pero no cuesta repetirlo:
SOMOS LA SUMATORIA DE NUESTRAS DECISIONES PASADAS. En esta o en otra vida. ¿No estás satisfecho con tus cosechas? Modifica la forma de plantar.
Be happy
Beso en el alma.