Ho´oponopono: Responsabilidad no es culpa...
por Rubia A. Dantés em STUM WORLDAtualizado em 12/06/2008 15:14:52
Traducción de Teresa - [email protected]
Es muy sutil lo que separa el “asumir responsabilidades” del “sentirse culpable”, pero el efecto de uno y de otro es muy diferente. La culpa nos hunde en la auto-piedad y el auto-sabotaje, mientras que el asumir responsabilidad nos trae la oportunidad de transformación. Si estamos de veras dispuestos a transformarnos, es bueno que nos alejemos de inculparnos y de inculpar al otro... y que asumamos responsabilidad, lo cual nos posibilita la libertad...
Una de las cosas que algunas personas tienen más dificultad para aceptar en el Ho’oponopono es el hecho de que debemos asumir el 100% de responsabilidad por todo lo que nos ocurre y que de alguna forma nos afecta.
Es que muchas veces los problemas, aparentemente, vienen solamente de la acción de otras personas, que tienen actitudes perjudiciales para los que están alrededor, sin que esas personas hayan hecho nada ni tengan sintonía alguna aparente con aquel tipo de acción. No obstante, sufren las consecuencias, por ser familiares, amigos... o por estar cercanos.
Por lo que entiendo, asumir 100% de responsabilidad por todo cuanto nos afecta, de una forma o de otra, no quiere decir que somos directamente responsables por la acción del otro, sino que... somos responsables por haber guardado memorias que nos hacen entrar en sintonía con determinadas situaciones. Reforzamos la acción del otro cuando consideramos que aquella persona siempre va a actuar de la misma forma... Así nos tornamos también responsables por alimentar en ella determinadas actitudes.
Como sabemos, estamos al final de un gran ciclo en el que hemos pasado por muchas experiencias que han generado traumas, miedos, culpas y todo tipo de creencias limitadoras. Experiencias que permanecen registradas en nuestro subconsciente, como en un banco de memorias, compartidas por todos.
Esas memorias son revividas ininterrumpidamente, como en una película, por nuestro subconsciente y se proyectan en nuestra realidad como todo tipo de experiencias que vivimos en nuestro día-a-día, sean experiencias consideradas “buenas” o “malas”. Cuando no estamos actuando por inspiración Divina, estamos solamente reaccionando conforme a las memorias.
Por ello, cuando algo nos causa problema, y proviene de la acción de otra persona, asumimos 100% de responsabilidad por nuestras memorias guardadas que nos han hecho atraer aquella misma frecuencia de vibración.
Sería como si pidiésemos a esas personas que entren en nuestra realidad y se comporten exactamente de la forma que esperamos. Y ellas aceptan... y funcionan como espejos que reflejan lo que no conseguimos vislumbrar en nosotros mismos... pero que está limitando nuestras elecciones, haciéndonos permanecer estancados y muchas veces considerando que no tenemos salida.
Las memorias vibran en determinadas frecuencias haciéndonos atraer a personas y situaciones en esas mismas frecuencias...
Al limpiar esas memorias, limpiamos la conexión con ese tipo de frecuencia y podemos relacionarnos con aquellas mismas personas con otro tipo de sintonía. O puede que esas personas se alejen naturalmente...
Sólo podemos transformar a nosotros mismos, pero cuando limpiamos algo en nosotros, el otro también se transforma.
Lo que noto que ocurre cuando hacemos el Ho’oponopono, es que limpiamos las memorias que nos hacen atraer determinados problemas... traídos por personas, situaciones... etc. y que... una vez limpias, rompen la sintonía con ese tipo de problema.
Una cosa que hago, siempre que un problema se manifiesta en una persona, es reconocer que allí está un Ser perfecto de Luz, y que, lo que me hace verla como un problema, son mis pensamientos y memorias equivocados.
Le pido entonces perdón, y por eso hago el Ho’oponopono.
Asumir 100% de responsabilidad se hace más fácil cuando comprendemos que todo lo que atraemos a nuestra realidad, y que nos aparece fuera, también está dentro... y por peor que pueda parecer, es la mejor oportunidad de liberación... En cada situación existe la perfecta configuración para que podamos liberar las creencias que nos impiden fluir como Seres perfectos de Luz que somos.
