Año 2013 - Año de vibración 6
por WebMaster em STUM WORLDAtualizado em 20/12/2012 10:20:41
por Helena Gerenstadt - [email protected]
Traducción de Teresa - [email protected]
Este año promete ser excepcionalmente propicio para todos los asuntos familiares y del corazón. Amor, familia y responsabilidad serán la tónica de este año. A la mayoría de las personas les traerá armonía, felicidad y equilibrio en las cuestiones sociales y domésticas, pudiendo incluso recuperar afectos perdidos (por ruptura o distanciamiento). Podrán también reaparecer en nuestra vida amistades o personas que no nos encontrábamos hacía mucho tiempo. Estarán favorecidas las relaciones sociales y las diversiones, tanto en casa como con otras personas. Pero antes de continuar, una nota de advertencia: la inclinación y naturaleza de los acontecimientos de este año 6 pueden mostrar dos características totalmente opuestas. La mayoría de las personas vivirá uno de sus mejores años. Se sentirán satisfechas con su situación familiar o sentimental actual y habrá una profunda sensación de plenitud y equilibrio en todo lo relacionado con sus seres queridos. Es muy posible que su casa sea el centro de reunión con personas que tienen problemas o que buscan un remanso de paz y comprensión. La familia va a traer alegría. El hogar traerá felicidad y equilibrio. No obstante, para otras muchas personas este puede ser un año complicado para las relaciones, en el cual los vínculos sentimentales se rompen, pero todo depende del equilibrio, principalmente, con la vibración de 2012, año 5.
Algunas personas encontrarán el amor, establecerán fuertes vínculos afectivos, porque sus encantos y poder de atracción están muy desarrollados. Es un período favorable para crear un hogar y consolidar vínculos de todo tipo. Las actividades sociales proporcionarán gratos momentos y de amistades, y también nos sentiremos más inclinados a tomar las situaciones con más tranquilidad, pudiendo tener más ganas de aprovechar la vida que de ocuparse de cosas serias o de las cosas diarias. Podemos sentirnos indolentes y perezosos, una vez más viene la llamada para nuestras decisiones. En caso de que continuemos en ese camino perderemos oportunidades de progreso que pueden presentarse, o para dar continuidad a algo ya iniciado. Aunque, como otra de las dualidades que se darán, bajando esa vibración puede ocurrir todo lo contrario, que el trabajo sea muy arduo y que sea necesario un tiempo de respiro.
En esta vibración 6 puede ocurrir que algunas personas se sientan presas, atadas, o con muchas responsabilidades familiares, que cortarán su libertad. Es posible que se vean obligadas a cuidar o hacerse cargo de un pariente o que surjan problemas con la familia.
En esta vibración 6, el momento es excelente para invertir en bienes materiales o para promover las cuestiones materiales. Negociaciones y convenios reciben buenas vibraciones, pero debemos ser cuidadosos antes de comprometernos en algo nuevo. También es un buen momento para efectuar mejoras en nuestro hogar, en el local de trabajo o en la apariencia personal, porque todo lo que tiene relación con la belleza recibe buenas vibraciones, así como todas las actividades artísticas. Los asuntos legales pueden resolverse favorablemente, y al estar bajo la influencia de la vibración 6, será posible solucionar problemas u obstáculos cotidianos con buen sentido y sensatez.
Procuremos ser más cuidadosos, generosos y comprensivos de forma desinteresada, principalmente tratándose de aliviar los problemas de las personas que necesitan de nosotros, porque la vibración 6 es el espíritu del amor y del servicio.
Evitemos también darle demasiada importancia a los problemas cotidianos. Algunas personas pueden mostrarse más hipocondríacas, pesimistas, indecisas por cosas sin importancia. En caso de no controlar esa tendencia pueden presentarse problemas de salud. De nosotros, tan solo de nosotros, depende que al final el año 6 se presente con saldo positivo o no. Habrá oportunidades de perfeccionamiento y progreso, pero como la vida social o familiar será tentadora, podemos encontrarnos con las manos vacías si no logramos equilibrar los extremos.