Autoestima- ¿Por qué ofensas y críticas molestan tanto?
por WebMaster em STUM WORLDAtualizado em 26/03/2012 12:10:02
por Andre Lima - [email protected]
Traducción de Teresa - [email protected]
En mayor o menor grado, todos nos sentimos afectados por la crítica de otras personas hacia nosotros, y también por las ofensas, incluso las más infundadas. Vamos a investigar cómo se manifiesta ese sentimiento y qué es lo que hay detrás de esa preocupación por lo que otros puedan pensar.
El miedo a ser juzgado va a influir sobre nuestra vida en todos los aspectos: relaciones (a quién eliges como pareja), profesión (cuál debes practicar), modo de vestir, hablar y conducirse, amistades. Voy a contar un caso que atendí hace cierto tiempo para ilustrar el vínculo entre la autoestima y el impacto de la crítica.
Era un cliente inteligente y exitoso. Se hacía una votación en su trabajo para decidir sobre una reforma. Había dos opciones de proyecto: planta “A” y planta “B”. Por ello se convocó una reunión. Estaba él en la reunión defendiendo la planta “A”. Otro colega que defendía la planta “B”, de un modo desabrido, dijo que él (mi cliente) era egoísta, que solo estaba pensando en sí mismo al defender el proyecto “A”. Dijo que el proyecto “B” beneficiaba a más personas, etc. y que aquellos que acatasen los argumentos de mi cliente y votasen en la planta “A” también serían egoístas.
Esta acusación le causó bastante desasosiego, empezaron a surgir varios pensamientos: “no es posible, Fulano piensa que soy egoísta, únicamente he defendido una opinión y él me ha acusado de esa manera”. Lo peor es que él perdió la argumentación y el proyecto “B” salió vencedor en la votación. Esto le causó todavía más malestar: “¿Pensarán los demás también que yo soy egoísta? Precisamente yo, que me gusta ayudar a los demás, que hago trabajos voluntarios, etc.; me voy a sentir incómodo al encontrar a esas personas por los pasillos y en el ascensor, en la reunión de fin de año, ¿qué estarán pensando de mí?”
Es importante resaltar que mi cliente disimuló muy bien el disgusto, y nadie se dio cuenta de cuánto aquello le había afectado. Pero aquellos pensamientos le causaron rabia, deseo de convencer a los demás, miedo, vergüenza, angustia, e incluso insomnio. Esto le ocurre a la mayoría de las personas. Ni siquiera imaginamos lo que les pasa por la cabeza… están allí ante nosotros, aparentando tener una gran autoconfianza, cuando en realidad sufren desasosiegos que no imaginamos.
La única certidumbre que tenemos es que nunca vamos a estar seguros de la opinión de los demás respecto de nosotros. En lugar de relajarnos y dejar a cada cual que piense lo que quiera, caemos en la trampa de estar preocupados tratando de adivinar el pensamiento ajeno.
Pero ¿de dónde viene esa preocupación?
Primero, queremos dar una imagen de “buena persona”. Nos molesta el hecho de que alguien opine que somos deshonestos, fútiles, egoístas, de mal carácter… Y entonces se produce una inquietud por tratar de desmontar esa imagen. Como no es posible modificar ni adivinar lo que pasa por la cabeza del otro, nos da rabia y nos angustiamos. Algunos entran en el juego de tratar de demostrarlo a toda costa, de hablar mal por detrás para defenderse, lo cual normalmente acarrea más efectos negativos.
Segundo, tenemos puntos negativos en nuestra autoestima. Si tenemos la certeza absoluta de quiénes somos ¿por qué preocuparnos por la opinión ajena? A menudo se debe a que verdaderamente no nos sentimos seguros respecto de nosotros mismos. Si alguien dice que yo soy incompetente, cuánto más inseguro yo esté en lo referente a mi propia competencia, más me afectará esa acusación. Si tengo plena confianza en mí mismo, es probable que llegue a reírme de la ofensa.
Tercero, cuando la acusación u ofensa responde realmente a la verdad, tenemos dificultad para asumir nuestros errores y defectos. Y eso causa irritación, angustia, deseos de replicar, vergüenza, deseos de demostrar lo contrario.
Es interesante que podemos sentirnos afectados incluso por personas que ni siquiera conocemos. Cuántas veces ocurre esto en el tráfico. La persona es insultada por otra a la que nunca ha visto, y se siente irritada, lleva aquella crispación para casa rumiando lo ocurrido. Hasta se cometen crímenes por no soportar el dolor de una ofensa. Haya baja autoestima.
Cierta vez supe de una colega que estaba celebrando su cumpleaños en un bar con los amigos. Llegó un ex acompañante que no había sido invitado y que no quería aceptar el final de la relación. Él empezó a insultarla con varios epítetos. ¿El resultado? Él fue expulsado del bar, pero ella también se marcho llorando, con mucha rabia y vergüenza. Obviamente ella sabe que el desajustado es él. Pero él consiguió lo que quería: ofenderla y desestabilizarla. Racionalmente sería muy fácil pensar: “ese tío tiene serios problemas, voy a esperar a que lo expulsen y continuaré aquí disfrutando con mis amigos.” Pero esto no es lo que ocurre la mayor parte de las veces, y ello debido a las fragilidades que portamos en la autoestima.
Comprender racionalmente lo que ocurre en los procesos emocionales es importante, pero no lo es todo. A veces comprendemos intelectualmente que nuestra reacción emocional es inútil. Sin embargo, aun así no dejamos de sentir el malestar. Por eso la *EFT (técnica para auto-limpieza emocional, véase al final de artículo cómo recibir un manual gratuito) es una herramienta tan importante. Conseguimos limpiar la emoción negativa de nuestro sistema energético, lo cual trae alivio y paz interior desde el momento de la aplicación. Toda emoción negativa se presenta como bloqueo de energía en los meridianos (los canales por donde fluye la energía del cuerpo) de acupuntura. Esa técnica desbloquea la energía, y la consecuencia de ello es la eliminación del sentimiento negativo.
Y fue con la EFT como traté al cliente citado en este artículo. Empleé varias frases durante el proceso (se utilizan frases y toques en los meridianos) para que fuese eliminado el sentimiento. Voy a poner algunos ejemplos (lo comprenderás mejor si has leído el manual):
- Aunque Fulano me considere egoísta, yo me acepto profunda y completamente.
- Aunque yo me sienta angustiado con su opinión sobre mí, yo me acepto…
- Aunque yo no consiga demostrar lo contrario…
- Aunque su opinión me dé rabia…
- Y aunque yo sea egoísta de vez en cuando…
- Aunque yo no sepa la opinión de los demás colegas…
- Aunque ellos me consideren egoísta…
- Aunque yo no consiga dar a todo el mundo la imagen que me gustaría…
Al final de la sesión lo que él relató fue un sentimiento de paz, de ya no estar incomodado al pensar en la acusación que se le había hecho. Y además notó una mayor confianza en sí mismo, un sentimiento de tener la conciencia tranquila y la certeza de haber defendido la mejor idea. Tú puedes emplear la EFT para liberarte cada vez más de la cárcel interior que es la preocupación por la opinión ajena.André Lima - EFT Practitioner. *EFT - Emotional Freedom Techniques
es la acupuntura emocional sin agujas. Enseña a desbloquear la energía estancada en los meridianos, de forma fácil, rápida y extremamente eficaz, proporcionando la cura para cuestiones físicas y emocionales. Tú mismo puedes auto aplicar el método. Para recibir un manual gratuito de esa técnica y comenzar ya a beneficiarte, haz clic aquí.